Viento sagrado (Espectro) · Tierra

[Druga 903]

Viento sagrado

Espectro

 

Estoy preparando una historia nueva, no sé lo que tardaré en empezarla. Como es cortita, la idea es hacer capítulos cortos con menos fotos, para publicarla en mi simblr, y luego también aquí.
La gracia de esta historia será que solo hay 2 personajes, no aparecerá nadie más, salvo quizás otro tipo de criaturas que no sean sims, pero esto no es seguro. Pretendo que sea intimista y centrarme solo en la historia detrás de las 2 protagonistas, que serán 2 chicas jóvenes.

Transcurre en la era del hierro, más o menos inspirado en los celtas y los vikingos, en esa época. Pero es mera ambientación, ya que la historia no pretende ser realista ni fiel históricamente, dado que el género va a ser bastante fantástico, pero algo realista, con algo de intriga y drama.
Como ya he mencionado, todo gira en torno al reencuentro de las 2 protagonistas y únicas sims de la historia, y los secretos por descubrir, y los sucesos que acontecen tras ese extraño reencuentro.

De momento solo puedo decir que las protagonistas se llaman Meredith (curandera/hechicera), y Elvia (cazadora). Y que son de la misma aldea. Pero no puedo aportar todavía fotos porque estoy en proceso de hacer las bases, creando a los personajes y los escenarios en los que van a vivir.

Espero no tardar mucho, tengo unas ganas enormes de empezar esta historia, me encanta la temática y las ideas que tengo en mente, y no la alargaré mucho, la historia es más bien corta.

Esta vez será para todos los públicos, aunque tampoco quiero decir con eso que sea recomendable para niños, porque al ser esa época y al haber una cazadora, fácilmente habrá escenas de sangre con heridas o muerte y destrucción, o cosas por el estilo. Además de contar con cierto dramatismo que no todos están preparados para soportar.

Mi intención con esta historia es reflexionar sobre las secuelas de las guerras, y sobre los celos.

 

XXX

See ya.

Capítulos:

Spoiler

Boomerang

Simblr v.

 

Ocaso

Simblr v.

 

Agua somos y al agua vamos

Simblr V.

Vacío

Simblr V.

Zect

Simblr V.

 

Manzana

Simblr V.

 

Peñasco

Simblr V.

 

Tierra

 

Editado 26 feb 2018 por Druga

[Dractem 44]

Me parece muy interesante,me gusta la tematica y por lo lei va a ser una historia intensa llena de intriga 

[Barbs 19]

Me gusta, espero leerla pronto. c:

[Druga 903]

On 2/10/2017 at 15:47, Dractem said:

Me parece muy interesante,me gusta la tematica y por lo lei va a ser una historia intensa llena de intriga 

Lo has descrito a la perfeccción, sobre todo será intensa.

On 6/10/2017 at 7:09, Barbs said:

Me gusta, espero leerla pronto. c:

Nos ponemos ya en marcha.

 

 

PD.: Tengo que decir que el tema de las imágenes en tumblr es fráncamente decepcionante, razón por la cual no puedo cargar mucho los capítulos de fotos, ya que la idea nació para tener contenido que meter en mi simblr, no porque tuviera ganas de saturar el foro de historias . Pero bueno, ya que lo subo allí, no me cuesta nada copiarlo todo y darle a pegar aquí. Y yo soy una obsesiva de las fotos normalmente.

 

Cada capítulo tendrá su música de ambientación, como es costumbre en mí, eres libre de escucharla o no, es para generar más ambientación, meterse más en el tema, simplemente.

Me he vuelto loca durante meses buscando músicas temáticas y hasta dejándome la crisma traduciendo idiomas nórdicos, o que ya no se hablan, o directamente inventados por el artista en ocasiones, para saber de qué habla cada canción y asegurarme de que no meto una de guerra en un capítulo romántico, o una de amor en una escena triste, por ejemplo, al menos, o que tenga alguna relación con el tema de ese capítulo concreto. Casi me vuelvo una experta en cultura nórdica. Y todo eso únicamente por la música, que no me vino mal toda esa info para ambientar también la historia de paso, y como cultura a nivel personal.

Sin más, empiezo. Que me gusta a mí contar mi vida.

 

Spoiler

El viento sagrado

(Espectro)

 

—Ahora me cuesta creerlo.

Cómo ocurrió. Qué desató tan amarga fortuna.

Hace mucho tiempo de eso. Me cuesta recordarlo. Por lo que se ha llevado el tiempo, y porque me hace daño.

 

Me haces daño.

Fue días después de la guerra con aquéllos bárbaros, nuestra aldea perdió la batalla contra los dos ejércitos. La guerra de la ceguera, así la llamaron, con sus municiones de humo y polvo.  

Los nuestros nos mantuvieron a salvo, alejadas de la masacre. Pero eso no nos salvó de ver sus consecuencias. Esas imágenes permanecieron siempre en mis pesadillas.

 

Tú venias del horizonte ensombrecida de álamo temblón, yo cogía fauces de león para ofrenda. Mi espinazo se encogió y sentí un escalofrío por la espalda y el cogote.

—¡Elvia!.  —Mi corazón me dio un vuelco. Mis sentidos mentían al verte venir, Elvia. 

—Has vuelto. —Te dije, incapaz de ocultar mi sorpresa. —Los dioses te han regresado, apreciada Elvia.

—No me han devuelto los dioses, Meredith. —Dijiste, y no te entendí.

—¿Dónde pensabas que estaba todos estos días?. —Me preguntaste.

 

—Pensaba que habías huido siguiendo el río, Elvia. Que me habías abandonado. —Respondí, y en ese momento noté algo diferente en ti, pero no sabía precisar el qué.

—¿Por qué iba a abandonarte, Meredith?. Estamos solas, siempre hemos sido buenas amigas. ¿Por qué me imaginabas con tan mala obra?. Mi amistad siempre fue sincera, y grande. Meredith. Tú, mi sacerdotisa, mi guía, mi gran amiga, siempre he confiado en ti. ¿Por qué iba yo a abandonarte?. Mi Meredith.

—No lo sé. —Respondí. —¿A dónde fuiste entonces, Elvia?.

—¿De verdad no lo sabes?. A ningún sitio. —Me respondiste tajante.

—¿Y dónde te guarecías en la noche y en la tormenta, Elvia?. —Me apresuré a preguntar.

—En la aún más profunda noche. Donde van los lobos y el espíritu de la lechuza, estimada hechicera.

—Has pasado miedo, lo veo en tu mirada. Pero ya estamos juntas de nuevo, amiga. Los espíritus quieren que estemos juntas, Meredith. Seremos felices, nos cuidaremos del viento traicionero y del lobo. Yo seré tu guía, tu sapiencia, tu cura; tú cuidarás mi espalda, serás mi protectora. No volverás a tener miedo. —Te decía emocionada, mientras enderezabas tu arco mirando para otro lado.

 

Entonces te incorporaste muy deprisa, y me dijiste mientras me mirabas a los ojos. —Ahora seremos felices, Meredith.

—Y yo te creí. Te creí Elvia. Como creí a los dioses el día que me hicieron mujer, y el día que tuve mi primera visión porque ellos me eligieron, el trance primigenio. Quise sentir al fin… la felicidad, deseé sentirla contigo, no separarme de ti. Realmente, mi apreciada Elvia. Qué es la fe-li-ci-dad.

 

 

Próximamente más…

 

Pd.2:Pondré los links a cada capítulo de mi simblr en el post principal, por si se caen las fotos de aquí, o alguien prefiere seguir la historia allí, o cualquier cosa.

[Barbs 19]

Me gusta la estética de las fotos y el peinado de Meredith me fascina. <3 Disfruto la forma sobria pero sensible de las conversaciones. Por favor, continúa, me da curiosidad seguir conociendo esta historia!

[Druga 903]

Spoiler

 

—No precisabas comida ni reposo aquella noche. A pesar de mi cansancio, me quedé a escucharte casi toda la noche. No podía creer que estuvieras de verdad conmigo. Los dioses debían amarme para haberte hecho volver y darnos la oportunidad de estar cerca otra vez. No quería perderte de nuevo, Elvia, mi felicidad es contigo.
—Tengo miedo. No quiero estar sola. —Te dije luchando por no caer dormida. Y tú me entendiste, acallaste las sombras y los maullidos de pena. Aquella noche, hablamos de cómo jugábamos siendo niñas.
—Quiero jugar de nuevo. —Recuerdo haberte escuchado decir: Quiero jugar contigo. Y yo, incapaz de hablar, sonreí, y finalmente me quedé dormida fantaseando con esos juegos, llenos de emoción e incertidumbre, de éxtasis y descubrimientos. La emoción es contigo, mi ilusión es en tu luz tornasolada y tu fuerza silvestre. La luz recorría mi espalda invadiendo todo mi cuerpo, brillo acuoso con sabor dulce en la superficie de mis ojos cerrados. Me hipnotizó tu resplandor salvaje.

 

Al brillar el sol desperté y ya no estabas a mi lado. Pero Salí a buscarte, y te encontré contemplando mi colección de frascos con avidez.
—¿Alguna vez has intentado capturar el viento, Meredith?. —Preguntaste con tono serio.
—¿Y tú has intentado pescar al agua?. —Te respondí.
—El viento es libre, está por todas partes a las que decide ir, no se puede capturar, hechicera. ¿Entiendes?, así nacimos también los sims.
—Somos libres, Elvia. Como los ciervos, como los caballos, como los corderos y las lechuzas a los que tú das caza.

—Tú no cazas. —Murmuraste antes de salir corriendo, y empezaste a dar vueltas sobre ti misma, y a inhalar aire riendo a carcajadas. En ese momento, pensé que tu desaparición te había cambiado. No te vi así de resplandeciente desde que éramos niñas.
—Elvia. —Te detuviste de golpe, mirándome sonriente. —¿Vas a cazar hoy?. —Te pregunté.
—Claro que sí, ¿quieres acompañarme?.
—Asentí con la cabeza y te seguí.

 

Tú te escondías entre los árboles. El sol asomaba por sus bordes remarcando la línea de tu figura, como si fueras un espectro.
Llegamos al claro junto al rio, y mataste al silencio sembrándolo de dudas.
—¿No añoras la aldea?. —Preguntaste, sonando calmada.
—A veces. De vez en cuando. Tengo un trozo de ella conmigo. —Te respondí optimista. Y tu respuesta me decepcionó un poco.
—No tienes nada, Meredith. Lo perdimos todo.
—Tú estás aquí, querida Elvia. —Me expliqué.
—Shhhh, ciervo... —Viste un ciervo. Era extraño, porque en esos bosques no hay apenas animales, como cuando solíamos cazar en nuestra aldea. Ya no quedan ciervos en esa zona, tan solo algunos conejos, peces, aves, y algún jabalí. Muy escasos ciervos, sería raro encontrar a uno en un claro y tan cerca de unas sims como nosotras.
—¿Dónde?.
—Allí delante, ¿no lo ves quieto?. —Insistías.
—¿Tras los árboles?
—No, frente a nosotras. Es de color blanco. Nunca he visto a uno así, pero es grande. —Especificabas mirándome a la cara, con semblante preocupado.
—No hay nada, Elvia.

—¡Huye hacia allí!, está... está herido en el abdomen.
—Yo no he visto nada. —Realmente no vi ningún animal.
—¿Cómo no lo vas a ver?, estaba justo aquí, a 2 zancadas.
—¿Qué?, ¿tan cerca?.
—No importa, ya se ha ido. —Concluiste, desilusionada.
—Se te escapó. Jaja.

—Volvamos al campamento, Meredith. El miedo sigue en mi corazón, tenías razón, necesito descansar. Los animales están nerviosos, ha eclosionado la primavera.
—Sí, volvamos, Elvia.
—Me gusta ver enrojecer el cielo cuando se pone el sol. —Dijiste. —Es como si se doblegara avergonzado ante nosotros.

—Volvimos al campamento, y cenamos pastel de verduras. Aquella noche dormimos una junto a la otra. No podía creer que hubieras vuelto, Elvia.

 

Próximamente más...

 

Editado 17 oct 2017 por Druga

[Druga 903]

Estoy editando unas fotos y mientras puedo ir actualizando esto.

Spoiler

—La soledad nos abrazaba desgarrándonos, y aun así, nos sentíamos reconfortadas y libres, mientras sangrábamos sonrisas ciegas, de las que evitan mirar al vacío, y se maravillan y deleitan con las flores que hay al borde de su precipicio.

Aquella mañana no vi sombras en tu rostro, Elvia. Las rarezas parecían haber desaparecido, y resplandecías como la mañana. Cantábamos, reíamos como cascabeles.

Dijimos palabras para encender una hoguera. Ardimos en risas, jugamos como niñas libres, al dios de los palomos dice...

—El dios de los palomos dice que somos...

—Somos gacelas. —Respondí sonriendo, incorporándome del balancín.

—Cázame si puedes. —Y salí corriendo esperando que vinieras tras de mí.

—¡Te atrapé!. —Tu mano tocó mi hombro, y te sonreí.

—Sígueme tú ahora, manos rojas.

—Corriste. ¿Por qué lo hiciste?. ¿Por qué, Elvia?. Éramos felices, como niñas. Por-qué-mataste al sol.

Te vi, despojarte de tus ropas, como un animal salvaje correr y acercarte al estanque. Trepar la roca, y sin pensarlo, saltaste al agua.

—Ven, Meredith. Cázame. —Me decías con voz suave.

—¡No!. —Te grité.

—¿Por qué no?. Está tibia. Como a ti te gusta.

—¡Sal de ahí, Elvia!. ¿Estás loca?, ¿por-por qué haces esto?. —Exclamé ansiosa y sin aliento, a punto de derrumbarme, incapaz de respirar, evitando mirar hacia el agua.

—Ya no somos unas niñas. —Murmuraste segundos después, pasando por mi lado, dejando un reguero de agua.

—Elvia, yo... —Titubeé mientras te alejabas. —Me asusté mucho, creí que te había perdido cuando desapareciste en el bosque.

Próximamente más...

 

[Druga 903]

He estado parada por varios motivos, el más reciente que tuve un problema con la gráfica y he tenido que cambiarla por otra más nueva, pero antes de eso estaba algo liada con varios proyectos personales. Ahora ya tengo algún rato (y gráfica nueva).

La historia va un poco lenta al pirncipio, porque aunque corta, empieza lenta, como suele pasar con las historias intimistas, hay que meterse en situación, pero una vez lleguemos a cierto punto, se empieza a descubrir poco a poco todo el pastel y pasarán muchas cosas.

 

Spoiler

Primavera.
—Un nuevo día. No vuelvas a hacerlo, Elvia. Lo de ayer. Recordé el día que te perdí, fue terrible. No quiero recordarlo. No te expongas, no tientes al peligro, eres lo único que me queda, Elvia.
Examinaré el cielo, los dioses tienen que hablarme. Tendrán que decirme si mañana puedes ir a cazar.  

 

—Me tumbé en el suelo de piedra del campamento. Tú permaneciste un momento parada, hasta que te vino la curiosidad, fuiste incapaz de aguantarla y reposaste a mi lado.
Quedamos casi toda la tarde en silencio. Contemplando las nubes cálidas y ligeras como humo dulce.

—Se avecina lluvia. No puedes ir a cazar mañana. —Te dije. Y tus ojos se despellejaron en vano en un esfuerzo, por comprender el comportamiento de las nubes.

 

—Esa es toda la carne que queda, Meredith. Guarda las sobras, por si hacen falta.

—Tras la cena, cantamos frente al fuego de la hoguera, como si nada importase, como si volviéramos a vivir en un tiempo anterior, anterior a la guerra, rodeadas de nuestras familias y amigos, anterior a la pesadilla en la que los encontramos a todos muertos, y anterior a tu desaparición. Rodeé tu espalda con el brazo, vi las llamas reflejarse en tus ojos, y me acerqué para besarte la frente, pero tu rostro estaba frío.

 

Antes de dormir, me hablaste de los invertebrados. De la risa del viento, y del olor a las Fauces de león que a veces sentías sin una razón.

—Es primavera. —Te recordé. —El polen flota en el ambiente, en una danza mística con el aire, se vuelven imprudentes, y se introducen en las cuevas de tu rostro tosco, venidos desde otra latitud.

—Yo ya sé lo que es flotar con el polen, Meredith. Él me trajo de vuelta hasta aquí, porque necesitaba una sanación. —Me llené de emoción y deseo por la vida, de ganas de volar como el polen, al oírte decir esas palabras, mi Elvia. Y te quise abrir mi alma.
—Yo nací sin alas. —Te decía. —Así que me construí unas y salté al vacío. Mi caída inicial, directa, rápida, me hizo sentir miedo, terror. ¿Qué había hecho? ¿Cómo se me podía haber ocurrido algo así?. Sin duda que me estrellaría contra el suelo y moriría. Pero cuando ya casi podía tocar las copas de los árboles más altos, respiré profundamente, levante mi cara hacia al cielo y alcé el vuelo. Al principio sólo subía y bajaba, a trompicones, giraba sin control hacia un lado y arriba ahora, hacia el otro lado y con rápido descenso al segundo siguiente. Pero ya no tenía miedo. Y cuando el miedo desapareció, no tardé en tomar el control de mi nueva y alada forma. Subía y bajaba y giraba a placer como a placer usaba el viento en mi vuelo en un momento como me dejaba llevar por él al momento siguiente. Y dejándome llevar, el viento me llevó hacia el horizonte.
Era libre. Miré hacia abajo y vi todo lo que ya no podía atarme, lejano, pequeño, en el suelo, lejos, muy lejos de mí que ahora tenía alas y volaba libre por el cielo. Lejanas y pequeñas las cosas, lejanos y pequeños los sims y sus voces que me pedían que volviera, junto a ellos, al suelo. Pero yo no quería bajar porque era libre volando, porque era libre dejando que el viento me llevase lejos, muy lejos y muy alto hacia el horizonte. Y subí tan alto como pude, y volé tan lejos como pude, hasta que dejé de ver a la gente, tan alto y tan lejos que dejé de escuchar sus voces llamándome junto a ellos.

Entonces, cuando ya estaba lejos de todo, me detuve en la cima de una montaña y un águila se detuvo junto a mí. Juntos mirábamos hacia el horizonte y veíamos el atardecer de mi primer día. "Naciste sin alas -me dijo el águila- pero te construiste unas y saltaste al vacío. Ahora ves atardecer aquí en las alturas junto a mí. ¿Por qué no te quedaste en el suelo donde naciste?" El águila me miraba y yo miraba al águila, el sol se escondía ya entre las montañas y, con el último rayo de luz, se hizo un silencio suave y fresco. "¿Hubieses bajado tú a contemplar el atardecer en el suelo conmigo?", le respondí.

Sí, el viento, por orden de los dioses, te devolvió a mí. Los sueños me atrapan, ellos me llevan a mí, contigo. —Dije entre suspiros, mientras me tumbaba en el lecho de pieles.
—Elvía.

 

 

Próximamente más...

 

[Druga 903]

Espero poder seguir con la historia, me gustaría terminarla, no he abandonado, pero se me han juntado muchas cosas, las fiestas, un pc nuevo, problemas de actualización de mods aun no resueltos y que ya ni recordaba, y ahora estoy preparando un nuevo proyecto por otros medios el cual empiezo con muchas ganas, pero quizás pueda compaginar ese nuevo proyecto con la historia, ya que en él se incluyen los sims 4 y el photoshop (entre otras cosas), podré seguir la historia cuando empiece ese nuevo proyecto y tenga mis carpetas de los sims en el pc nuevo, y actualice/borre los mods desactualizados.

Pero de momento no abandono del todo la historia, solo que han pasado muchas cosas y hasta dentro de unos días me será imposible seguir.

[Druga 903]

Spoiler

 

 

—Ommi Crëmer. Stulkar memanne zzcrët, ommi Crêttar. Zakuka stulkar et. Zect.

—¿Elvia dónde estabas?.
—¿A quién orabas, Meredith?.
—Estaba agradeciendo a los dioses que te hayan retornado.
—Dudo que vayan a escucharte.
—¿Por qué dices eso, Elvia?

 

—Pero esa misma tarde...

—¿Me ayudarás a preparar la cena, Elvia?. Oh, ¿por qué te has preparado para ir a cazar?.
—Acompáñame, hechicera, tengo que practicar mi puntería.

—Está bien, Elvia. Siempre quise ver cómo preparabas tu destreza con el arco. De paso, pillaré unas fauces de león, quiero hacer ofrenda esta noche.

Una hora más tarde...

 

 

Más, próximamente...

 

[Druga 903]

Spoiler

—¿Por qué tiemblas, Meredith?. —Preguntaste, tratando de apuntar a la manzana. —¿A caso tienes miedo, hechicera?.
—Y lanzaste la flecha contra mí, temí que fuera a mi corazón. Pero fue justo a encima de mi cabeza.

Y en lugar de arrepentirte, preparaste otra flecha.

¿Tú alguna vez temiste algo?. Por eso te admiraba. No eras como las demás mujeres, tú no conocías el miedo.

 

—¿Has terminado ya?. —Te pregunté.

Mis muñecas dolían y se amorataban por las ataduras.

—Creo que sí. ¿Necesitas que te desate?

—Creo que sí. —Te respondí, y te acercaste en mi ayuda. Me liberaste sin mucha delicadeza, he de decir. Fue entonces, cuando me preguntaste por qué no había llovido todavía, tardé unos minutos en entender que lo decías por mi predicción de las nubes del día anterior. Efectivamente, aun no se había cumplido.

 

Próximamente más...

 

[Druga 903]

Spoiler

—Siento haberme equivocado con la lectura de las nubes, Elvia. Todavía quedan verduras y patatas, y un cangrejo. Puedes cazar mañana.
—Mentiste.
—No lo hice, Elvia, de verdad, solo analicé las nubes. Fueron ellas quienes mintieron.
—Las nubes no pueden mentir, fuiste tú, Meredith. No querías que fuera de caza.

—Tienes razón, Elvia, no quería que corrieras ningún peligro. No quiero que vayas a cazar, podemos comer otras cosas.

—Ni hablar, Meredith, cazar es mi única pasión en la vida, sin eso me sentiría inútil y vacía. Tendrás que aprender a vivir con miedo, forma parte de la vida. Mañana iré a cazar a primera hora.

—Asumí tu decisión, Elvia. Acepté que hicieras lo que te hacía feliz. No puse más impedimentos para que fueras libre.

Pero tú... no sé qué pasó por tu cabeza, querida Elvia, para que a los pocos días obraras de aquella forma, cuando se suponía que te ibas a cazar como siempre.

 

—Extasiada de luz en los claros olvidados que siempre existieron.
Tres fuegos azules, de los cuerpos hechos flores, tres fuegos.
De los cuerpos hechos flores, el jazmín en los ojos, tres fuegos.

El lirio en las pestañas y el nardo en la boca, de los cuerpos hechos flores, mil oraciones ablandan la piedra dura.

 

—En mitad de un canto me hallaba, en el barranco del sur, cuando sentí un golpe seco y contundente.

Una presencia esquiva, Elvia.

Una fuerza de empuje, y el mundo vuela sobre los árboles bailarines, en cuestión de segundos.

 

 

Continuará...

 

[Druga 903]

Spoiler

Fui empujada hacia el barranco, apreciada Elvia.

Adiós, alcones, adiós flores salvajes, adiós luz del día, mis ojos se descomponen en oscuridad, mis heridas sangran y cantan su dolor, mi respiración se vuelve pesada.

Mi ropa está húmeda y densa, mi boca sabe a sangre.

¿Dónde estoy?. ¡Puedo ver de nuevo el sol!.

¿Estoy sobre la yerba del monte?.

¡Elvia!
 

 

 

Otro día más...

 

[Druga 903]

Hola vengo a cancelar definitivamente la historia, por varios motivos y con mucha pena, puesto que tenía ya preparada la continuidad de la serie, pero no he podido volver antes, y ahora se han caído las fotos y tendría que volver a ponerlas todas, además he preferido borrar todo de mi juego y empezar sin nada y bajar solo lo que necesite, porque cuando dejé de jugar los sims me influyeron mucho problemas con el funcionamiento del juego, y he pensado que hacer esto sería lo mejor.

Pero estoy trabajando en una serie nueva con mucha ilusión, aunque me muera de pena por dejar esta sin conocer lo que ocurría con las protagonistas, puedo hacer un resumen muy corto para compensar a quien pudiera interesarle y anunciar que estoy trabajando en una historia nueva:

Lo que ocurre con las chicas, es que Elvia está muerta, y en un par de ocasiones atenta contra la vida de su amiga (ya se vio su primer intento), y Meredith empieza a temerla y a sospechar que obviamente su amiga quiere acabar con su vida, pero no sabemos por qué. Al final Elvia acaba con ella en una intensa escena tremenda, gracias a la cual vemos un flash o último recuerdo de Meredith, en el que se muestra como la chamana, evolucionada a necromante en sus últimos días, mató a Elvia (la cazadora) por celos enfermizos tras la guerra, lo que veríamos exactamente es a Elvia llorando sobre el cadáver de un guerrero de su aldea tras la guerra, y a Meredith mirándola con rabia a cierta distancia. Y entonces es cuando sabemos que fue ella la primera en matar a su amiga poseida por los celos posesivos, y no era la víctima inocente que nos parecía hasta ese momento, pero como la amaba, luego se arrepintió y trató de resucitarla mediante un ritual que ella pensó que había fracasado, pero días más tarde Elvia volvió y así es como empezó la serie, con el regreso de Elvia del mas allá convertida en fantasma, porque la Elvia que nosotros conocemos es un fantasma. Lo que nunca sabríamos es si realmente es un fantasma con ganas de venganza, o si solo se trataba de la imaginación y la mala conciencia de Meredith que presa de la culpa padeció de un tipo de paranoia que le hizo creer que su amiga volvía para vengarse pero fue ella misma quién se suicidó presa de su propia paranoia, dado que la última escena de la serie iba a ser la de Meredith expirando su último aliento, estando completamente sola.

 

Y sin más me despido anunciando que no sé cuándo podré empezar otra serie de temática diferente, pero sobre la que ya he tratado en el pasado, aunque con un enfoque diferente al de la otra vez, el protagonista será un hombre, hasta ahora siempre he utilizado a figuras femeninas, ya es hora de trasgredir mis propios límites.