nuevo capítulo Legacy Wolf - Capitulo 6: Los pequeños crecen

[Axorya 31]

 

Bienvenidos a mi legacy, la verdad es que ya he hecho tres pero tuve problemas con ellos (los que me seguían lo sabrán bien), pero espero que este me deje llegar a la decima generación. Este primer post será para poner información sobre el legacy en sí. Espero que os guste.

 

-El heredero o la heredera será elegido/a mediante votación, como este legacy se pondrá en dos sitios, se juntarán los votos de ambos sitios
-Los nombres serán puestos en orden alfabético comenzando con la "A" de la matriarca
-Todas las generaciones tendrán nombres estadounidenses o ingleses

 

 

 

 

 

 

Editado 9 dic 2016 por Axorya

[Axorya 31]

 

 

Os presento a Aarika Wolf, la vida de Aarika no empezó de la mejor forma, pero fue feliz. Cuando la chica nació, sus padres murieron a los pocos días en un accidente de coche, la pequeña Aarika sobrevivió al ser protegida por el cuerpo de su madre pero se había quedado huérfana en segundos, después de unas horas allí sola y con dos cadáveres a su lado, empezó a llorar por el frío que sentía. Una pareja joven que pasaba por allí, la escuchó y buscaron el sonido que les había llamado la atención, encontraron el coche tras unos arbustos y la chica pegó un grito al ver a Aarika llorando en el asiento trasero y a los padres de esta muertos, el hombre al volante y su esposa encima de la niña. Los dos jóvenes cogieron a la cría en brazos y llamaron a la policía y a la ambulancia. Cuando estos llegaron, los policías se hicieron cargo de Aarika, primero la examinaron en el hospital y cuando vieron que no tenía más familia que sus padres, la llevaron a un orfanato. Allí se pasó años y años, haciéndose amiga de todos los niños que vivían con ella, viviendo una vida feliz a pesar de la ausencia de unos padres biológicos, aún así sus compañeros de orfanato eran sus hermanos y los cuidadores y el director del centro eran sus padres, así que ella era feliz. Los años fueron pasando hasta que llegó su cumpleaños decimoctavo, el director le dijo que tenía que irse del orfanato porque ya era toda una mujer. Fue así como Aarika se despidió de todas las personas que dejaba en aquel sitio que había sido su hogar y se mudó a Sunset Valley.

Durante el vuelo a su nuevo hogar, estuvo hablando con varias inmobiliarias y una le dio una dirección donde había una casa para ella, ella se confió y con el poco dinero que había heredado de sus padres, pagó la casa y cogió la dirección que le daban. Al llegar, cogió un taxi… pero cuando llegó allí vio que sólo era un solar vacío. Llamó de nuevo a la inmobiliaria, pero ya no le respondían y entendió lo que había pasado… era todo una mentira en la que había caído y ahora no tenia forma de conseguir el dinero que les había dado.

Fue entonces cuando Aarika pensó que tenía que empezar a comportarse como toda una Wolf y empezó a buscar cosas con las que hacer una cosa y lo consiguió… no era algo demasiado grade pero al menos, tenía un sitio donde poder resguardarse. La verdad es que le daba pena verlo porque no tenía ni donde ducharse... pero la menos podría dormir y tendría algo que llevarse a la boca. Aarika era entregada a su familia, con dotes culinarias innatas, pulcra, con afán educativo y pulcra, pero la obra la había dejado con unos tristes 20 simoleones, así que debía buscar trabajo.

Como ella quería ser una chef con reconocimiento de cinco estrellas, ni corta ni perezosa fue a pedir empleo al bistro, primero les costó un poco aceptarla porque no sabían de donde venia, pero pronto la aceptaron y le dijeron que empezaría al día siguiente.

Al salir del bistro, estuvo hablando con algunas personas que estaban fuera del restaurante y hablando de sus aficiones, conoció a un chico Connor Frío. Este le dijo que era escritor y Aarika se emocionó porque le encantaba leer, aunque no era una rata de biblioteca. Él la invitó a su casa y allí de pie, en medio del pasillo empezaron a hablar.

¿Sabéis de lo que se dieron cuenta? ¡De que ya se conocían! ¡Si! Todo paso como si nada, Aarika le contaba sobre su vida, él la escuchaba maravillado hasta que ella nombró el nombre de su orfanato, entones  él pareció darse cuenta de algo.
-Espera, ¿el orfanato Siempre Felices? ¿Me lo estás diciendo en serio? - Dijo Connor mirándola a los ojos sin poder creérselo.
-Si, he vivido allí desde que era una bebé, hasta hoy que me he tenido que por ser mayor de edad... - Dijo ella pasándose la mano por el pelo.
-No puede ser... no pensaba que eras tu... Aarika... nos conocimos siendo niños... ¿te acuerdas? - Dijo Connor mirando a la rubia a los ojos. - Mi colegio me llevó de excursión al orfanato, tú fuiste a abrir la puerta con el director y allí me saludaste. Mi hermano se fue con los demás a conocer a todos tus compañeros, pero yo me quedé a tu lado. Estuvimos hablando durante horas... hasta que tuve que volver a casa, pero nos prometimos que volveríamos a vernos de adultos y ahora... - Connor se detuvo, sabiendo que Aarika lo había recordado.
-¡No puede ser! ¡CONNOR! - La rubia se tiró a los brazos del chico que la recogió con una sonrisa. - Pensaba que no volvería a verte...
Los dos chicos se fundieron en un abrazo que deseaban desde que eran niños, la promesa de volverse a ver se había cumplido.

Connor y Aarika empezaron a contarse las cosas que habían pasado desde que se habían separado.
-¿Te acuerdas de aquel chico que te dije que siempre me molestaba tirándome del pelo? - Dijo Aarika mirándolo a los ojos.
-Si, quise dejarle las cosas claras pero no me dejaste. –Dijo Connor mirando a los ojos de la rubia como nunca antes lo había hecho.
-Pues me dejo en paz cuando os fuisteis… me dijo que Jared le había dicho “si no dejas en paz a la amiga de mi hermano, te juro que volveré para hacértelo pagar” y desde aquel día me dejo en paz. – Dijo la chica sin poder dejar de reír.
-¡Jared es el mejor! No sabía nada de eso, está claro que sabía que eras importante para mí. – Dijo él sonriendo y mirándola con una mirada que no escondía demasiado.
-Connor… debo decirte algo… - Dijo la chica mirándolo sin dejar de sonreír.
-¿Qué pasa, Aarika? - Dijo Connor mirándola.
-Siempre me gustaste… cuando éramos niños y aunque sólo nos vimos una vez… me sentí atraída por ti… pero… ahora me he dado cuenta de que es algo más grande. – Dijo ella sonrojada.
-Aarika… estoy enamorado de ti desde que te vi siendo sólo un mocoso… - Dijo él sonriéndole.

-Entonces creo que… - Aarika no dijo nada más y se acercó a los labios del chico dándole el primer beso de ambos.
Connor no se lo esperaba, pero disfruto del toque de los labios de la rubia sin miedo… se había enamorado de Aarika cuando esta era una niña y ahora… no la iba a dejar escapar. Cuando se separaron, él la miro con el amor que sentía por la rubia.
-Sabes Aarika... yo… me gustaría decirte… - Connor se liaba con sus propias palabras.

-Espera Connor, voy a ayudarte. Connor, ¿quieres salir conmigo? – Dijo Aarika recordando lo tímido e inseguro que Connor le había dicho que era.
- Si… ¡si, eso quería decir! Pues claro que quiero salir contigo, rubia. - Dijo Connor totalmente feliz.
Los dos se besaron y se convirtieron en una pareja oficial, pero los dos sentían que su corazón pedía mucho más, pero había llegado el momento de irse.
- Connor… mañana tengo que trabajar y quiero ir fresca… - Dijo la rubia y es que no quería separarse de él.
- Tranquila Aarika, ve a casa y descansa. Mañana nos vemos cuando salgas del trabajo. – Connor besó a su chica y la dejo ir.
Cuando Aarika llegó a casa vio que la universidad le había dejado un cubilete lleno de cosas, ella ya no iba a asistir pero pensó que en el futuro sus hijos, nietos y siguientes generaciones lo podrían usar y pensó que quedaría bonito como decoración en la casa que tenía por ahora.

Pero como le había dicho a Connor tenía que descansar, así que comió algo, hizo un pis y se metió en la cama… tenía ganas de empezar a trabajar y el reencontrarse con Connor le había hecho feliz.

Parece que a Aarika le ha ido muy bien en su primer día en Sunset Valley, ha encontrado trabajo, tiene una pequeña casa en la que resguardarse y se ha encontrado con alguien de su pasado que se ha colado en su vida… ¿qué pasará a partir de ahora? ¿Conseguirá Aarika ser la chef que tanto ansía? ¿Será Connor el padre de sus hijos? Todo esto y más en el siguiente capítulo.

HE AÑADIDO EL ARBOL GENEALOGICO Y LOS HEREDEROS EN EL PRIMER POST

Editado 1 dic 2016 por Axorya

[Necromántica 28]

Hola! que pena la historia del accidente. Pero has situado muy bien en ella a Connor me ha gustado el giro de la historia! Después de tanto tiempo se encuentran y eso hará que la vida de Aarika sea un poco más amena después de la estafa con el solar! sigue así!

[Axorya 31]

hace 8 horas, Necromántica said:

Hola! que pena la historia del accidente. Pero has situado muy bien en ella a Connor me ha gustado el giro de la historia! Después de tanto tiempo se encuentran y eso hará que la vida de Aarika sea un poco más amena después de la estafa con el solar! sigue así!

¡Hola Necromántica!

La verdad es que esa historia es muy triste, pero dio el comienzo a una buena vida para ella. Me encanta que te haya gustado la forma en la que se han unido las historias de Aarika y Connor. Ya verás como Connor ayuda a que Aarika pase una vida mucho mejor en Sunset Valley.

La verdad es que el primer día de Aarika había comenzado bien, pero eso de desayunar helado sentada en la taza del váter… pues no es que fuera muy glamuroso. Aún así, necesitaba una ducha y Connor le había dicho que en el gimnasio había duchas gratis y eso hizo, desayunó, se vistió y se fue corriendo al gimnasio… bueno, quien dice corriendo dice en taxi, que aquí la señorita vive en la parte más alta de Sunset Valley, si entre dos de las familias más ricas de toda la ciudad, pena que ella no tenga el mismo dinero que ellos.

Cuando Aarika se metió en las duchas y el agua caliente se le caía por encima, pensó que aquello era la gloria y es que no tener una en casa lo hacía todo mucho más pesado. Aún le quedaba mucho tiempo para ir a trabajar y no quería volver a casa, además Connor estaba ocupada arreglando cosas de ser autónomo y no sabía que podía hacer, por lo que se fue al parque.

Al llegar allí, se encontró con un chico rubio y cuando se puso a jugar a tirar penaltis, él se le unió y acabaron riendo y jugando, conociéndose un poco más aunque la rubia no podía dejar de pensar en su chico y en lo bien que se había sentido la noche anterior. Pero poco después, llegó la hora de ir a trabajar y allí se presentó, la verdad es que el trabajo no era tan malo y es que lo mejor es que Jared, su cuñado, trabajaba con ella y nada más verla, le dio un abrazo de oso y le dijo que estaba encantado de tenerla de cuñada, cuando salió de trabajar era ya de noche, pero Connor le había dicho que quería verla después de trabajar y lo llamó, pero este le dijo que la quería ver en su casa. Ella ya había hablado con Jared en el trabajo y este le dijo lo que su hermano le había comentado y ella tenía claro lo que quería hacer.

Cuando la rubia llegó a la casa de los Frío su novio la recibió y después de unos besos y arrumacos, Aarika quería tirarse a la piscina.
-Connor… no puedo aguantar más, desde ayer… hay algo que deseo hacer y no quiero detenerme. - La chica se puso de rodillas mientras que su novio no entendía nada, pero entonces sacó una cajita y le enseñó un gran anillo. – Connor Frío, ¿quieres casarte conmigo?
La cara de Connor era un poema, pero la respuesta estaba clara.
-¡Claro que quiero, Aarika! ¡Te amo desde que éramos niños, tonta! – Dijo él dejándose poner el anillo y besando después a su chica.
Los dos estaban encantados de poder estar prometidos, pero había algo que parecía tener preocupado a Connor y no quería escondérselo a su ahora prometida.
-Escucha Aarika sabes de mi timidez y mi inseguridad, y te amo, pero no quiero tener una gran boda. Sólo quiero una pequeña ceremonia con nosotros dos. - La cara de Aarika era la demostración de que haría de todo por él. - ¿Quieres casarte aquí y ahora? Nada especial, solos tú y yo. - Dijo el chico temiendo la reacción de ella.
-Pues claro que si, tonto. Por ti lo haría todo, nos casamos ahora tal y como estamos y comenzaremos nuestra nueva vida juntos. - Dijo ella mirando a su chico.

-Yo, Connor Frío, te quiero a ti, Aarika Wolf, como esposa y me entrego a ti, y prometo serte fiel en la prosperidad y en la adversidad, en la salud y en la enfermedad, y así amarte y respetarte todos los días de mi vida. - Dijo él mirándola a los ojos y poniéndole el anillo en el dedo y ahora era el turno de ella.
- Yo, Aarika Wolf, te quiero a ti, Connor Frío, como esposo y me entrego a ti, y prometo serte fiel en la prosperidad y en la adversidad, en la salud y en la enfermedad, y así amarte y respetarte todos los días de mi vida. – Dijo ella mirándolo también a los ojos y poniéndole el anillo en el dedo y sellaron su ceremonia intima con el beso que los convertía en marido y mujer.

Fue así como Connor se despidió de la casa en la que vivía con su hermano y se mudó con su chica, sabía lo de la enana casa donde ella vivía, pero la amaba y juntos conseguirían convertirla en un hogar decente. Con lo que Connor trajo al hogar, no pudieron hacer muchos cambios, pero hicieron la casa un poco más grande y pudieron comprar una cama de matrimonio, una ducha y una encimera, una nevera y un fregadero para lavar los platos, pero no dio para más. Aún así sabían que todo mejoraría con el tiempo.

Mientras que Aarika iba dentro de casa, Connor se quedó pagando las facturas como buen patriarca en el que se había convertido. El nuevo patriarca de la familia era un hombre distraído, nada coqueto, solitario, rata de biblioteca, bueno y con un deseo de toda la vida que era ser autor profesional. Connor traía consigo unas cuantas verduras y frutas que pusieron en la nevera, un ordenador portátil y un libro de embarazos... ¿eso era una indirecta, querido Connor?

Pero la noche de bodas no se hizo esperar, Connor y Aarika acabaron el día de su boda intima como debían y parecía que eso les unía mas, al día siguiente fue Aarika quien acudió al buzón mientras Connor se dedicaba a hablar con su hermano por teléfono. El mismo que les había enviado un cuadro felicitándoles por la boda, se notaba que esté estaba feliz por su hermano pequeño y guardaron el cuadro para cuando tuviesen más sitio y poder ponerlo en el futuro cuarto de un hijo porque era un cuadro infantil.

Pero Connor tenía otra idea en la cabeza, así que sin pensárselo mucho se hizo un cambio de look (bendito CAS) que su mujer aprobó por completo. Aquel mismo día les llego la noticia de que eran tíos, Claire Ursine la ex-novia de Jared había sido mama de una niña llamada Constanza, que obviamente, era hija de Jared. Ellos dos no querían volver juntos, pero él podría ver a la niña siempre que quisiese.

Pero aquel día, Aarika se empezó a poner enferma y lo primero que hizo Connor fue mandarla a la cama y meterse con ella para darle calor, así se estuvieron hasta que se durmieron y la joven Aarika descansó, pero algunas horas después de dormirse, tuvo que levantarse e ir corriendo a vomitar... ¿aquello era por qué la cena le había sentado mal o por qué estaba enferma?

[img=http://i.imgur.com/b23qFGr.jpg]

Pero nada de eso, con el pasar del día y de más vomitonas que preocuparon mucho a Connor, Aarika se dio cuenta de que estaba embarazada... ¡la segunda generación de la familia Wolf venía en camino! Quiso contárselo a Connor pero este se había ido a reparar unas tuberías en un restaurante y la noticia tendría que esperar.

Cuando Connor llegó a casa, Aarika estaba radiante y con el nuevo modelito que su cuerpo se había puesto solo al saber que estaba embarazada. Él notó que algo pasaba con sólo verla.
-¿Qué ocurre, cielo? - Dijo Connor mirando a su esposa.
-Verás Connor, poco después de que te fueses al restaurante... me he levantado extraña y es que... ¡ESTOY EMBARAZADA! - La voz de Aarika estaba llena de alegría y exultante de felicidad.
-¿Qué? ¿Voy a ser padre? ¿Cómo, cuándo? - Connor había sido pillado por sorpresa, pero estaba feliz.
-Creo que el como ya lo sabes, pavo. ¿No estás feliz? - Dijo Aarika con miedo a que no quisieses el bebé.
-¿Bromeas? ¡Me has hecho el hombre más feliz del mundo! - Dijo él cogiendo a su esposa y besándola con ansias. - Además, me han dado un poco de dinero por arreglar las tuberías y he querido comprar unas cosas.
Connor había comprado una cocina para que Aarika pudiese cocinar las cosas que tanto deseaba, además de una mesa y una silla para él, ahí puso su ordenador para poder seguir escribiendo.

Parece que la vida de Connor y Aarika como marido y mujer va mejor que nunca y ya se acerca la segunda generación. ¿Qué nacerá, nene o nena? ¿Cómo les ira la vida de casados con un bebé? ¿Lograrán conseguir sus metas? Todo esto y más en el siguiente capítulo.

[Mila8088 5]

Que bien que ya llega la nueva generación YEY

[Axorya 31]

On 2/12/2016 at 20:45, Mila8088 said:

Que bien que ya llega la nueva generación YEY

Siii, aquí llega la nueva generación, gracias por seguirme <3

Desde el anuncio del embarazo de Aarika, Connor sabía que tenía que empezar a escribir, quería que su esposa y su primer hijo o hija tuvieran una casa decente en la que Aarika y él pudiesen empezar su legado y donde sus herederos pudiesen seguir con él. Así que aquella mañana, nada más despertarse y desayunar los gofres que su mujer había hecho, se puso a escribir una nueva novela de no-ficción.

Obviamente, una de las primeras personas en ser avisado del embarazo fue Jared, quien se volvió loco al saber que iba a ser tío. Papa y tío en poco tiempo, eso era lo mejor que le había pasado nunca. El futuro tío llamaba cada día a su hermano y cuñada para saber cómo iba todo y a veces, se quedaba hablando con Aarika preguntándole como iba su sobrino o sobrina. Pero Connor estaba tan inspirado que aquel mismo día acabó su primera novela y aquello les darían unos ahorros para ir pasando y así él daba sus primeros pasos para cumplir su sueño.

Si algo se tenía que decir de Aarika es que era un culo inquieto y no sabía quedarse quieta, estaba ya muy gordita, quizás a punto de estar a punto de dar a luz, pero nada, aquella mañana se dijo que quería conocer más recetas y se fue tan pancha a la librería. ¡Menos mal que no se puso de parto en la tienda!

Los días iban pasando y el nuevo miembro de los Wolf parecía no querer llegar nunca, pero una noche… Aarika se levantó con el dolor de las contracciones y mientras que ella gritaba por el dolor, Connor parecía… pues… tener el baile de san vito para que nos vamos a mentir.
-¡AAAAAH! Connor deja de quedarte ahí como un pasmarote y llévame al hospitaaaaaaal. – Gritó Aarika por el dolor, pero intentando no matar a su marido.
-Pero… si yo… ¡vale, vale, ya te llevo! – Dijo Connor rápidamente al ver la mirada asesina de su esposa.
Fue así como Connor pidió un taxi y el matrimonio fue a conocer a su primogénito, el primer hijo de los Wolf llegaba al mundo.

Tras un parto bastante tranquilo y las horas en las que tardaron en ver cómo estaban madre y bebé, llegó al mundo un precioso niño al que llamaron Ben y que nació bajo los rasgos, valiente y genio. Al llegar a casa se dieron cuenta de que no tenían dinero ni siquiera para una cuna, por lo que tras hablarlo decidieron que por mucho que les molestase, tendrían que vender el cuadro que les había regalado Jared por su matrimonio que les iban a dar 2.000 simoleones para poder mantener a Ben, pero aprovecharon para adecuar un poco más la casa y así empezar a hacerla más acogedora.

No pudieron hacer mucho, pero al menos agrandaron un poco la casa, le compraron una cuca cuna a Ben y aislaron el baño, así no tendrían que sentir los olores que producía el váter, aunque también pudieron comprarse una mejor ducha porque la otra sólo daba agua helada. Estaba claro que la vida con Ben iba a ser de locos, pero necesitaban dinero para la casa y los cuidados futuros del bebé, así que tras descansar un poco, Connor se puso a escribir una nueva novela, esta vez de ficción. Eso sí, Connor estaba muy pero que muy inspirado, de nuevo acabó la novela en un día y ascendió a escribiente de poca monta.

La pasión del matrimonio era insaciable y se podía ver siempre que estaban juntos, cada noche después de acostar a Ben, Connor y Aarika daban rienda suelta a la pasión. Algo que con un bebé en casa… pues no se sabía muy bien como podía acabar. Aún así, Ben era un bebé tranquilo que no daba demasiados problemas y dormía casi todo el día.

Cuando faltaba sólo un día para el cumpleaños de Ben, Aarika empezó a vomitar de nuevo y no quiso adelantar acontecimientos, pero eso la llevaba a tiempo atrás… cuando sólo eran Connor y ella. Las nauseas se siguieron repitiendo durante todo el día, Connor se preocupó por ella… él la amaba con todo su corazón y no quería que le pasase nada. Así que después de su enésimo vomito, se acercó a ella.
-Aarika cariño, ¿qué te ocurre? ¿Estás bien? – Dijo Connor acercándose a su esposa visiblemente preocupado
-No te preocupes amor, estoy bien seguramente algo me ha sentado mal. Llevo con nauseas todo el día. Seguro que pronto me siento mejor. – Dijo Aarika abrazándolo con ternura.
-Eso espero, mi vida. Gracias por darme ese regalo que ha sido Ben, contigo y con él soy la persona más feliz del mundo. – Dijo Connor cogiéndola del mentón y besándola con todo el amor que sentía por ella.

Aquella misma noche, Aarika supo porque estaba con tantas nauseas… ¡estaba de nuevo embarazada!
-¡Oh dios mío! Esto… vale, no me esperaba estar de nuevo embarazada, hace poco que tuve a Ben… espero que Connor no se asuste con todo esto… aunque es muy feliz con Ben, seguro que quiere otro bebé, por mi parte… no me importa, siempre he querido tener una gran familia y seguir con el legado. Esperaré a que Connor despierte para darle la noticia. – Dijo Aarika tocándose el vientre… eso de tener un nuevo bebé en camino la hacía muy feliz.

Ben empezó a llorar en aquel momento y la rubia fue corriendo a ocuparse de su hijo, no quería que Connor despertase, estaba trabajando muy duro para conseguir darles todo lo que su hijo y mujer precisasen. Aarika le cambió el pañal sucio y empezó a jugar con él.
-¿Sabes Ben? Pronto tendrás una hermanita o un hermanito y tú serás el hermanito mayor. – Dijo ella haciendo carantoñas al niño.
-Gugagu. - Ben hablaba en su idioma de bebé, un idioma que sus padres no controlan pero que les provoca más de una sonrisa.

Cuando Connor despertó, Aarika esperó hasta que se pudo duchar y ya estaba totalmente despierto y le soltó la noticia.
-Connor cariño, ya sé porque tenía tantas nauseas… - Aarika se tomó un respiro mientras veía a su marido, mirándola preocupado. - ¡Estoy embarazada de nuevo!
La cara de Connor fue de sorpresa total, aunque se le notaba feliz.
-¿De verdad? ¿Vamos a ser papás de nuevo? – La felicidad que sentía le hacía hablar tan rápido que a Aarika le costó entenderlo.
-Si, Connor… no sabes lo que me alegra tu reacción, pensaba que no querrías al bebé… - Dijo ella admitiendo lo que sentía.
-Pues claro que lo iba a querer, tonta. Te lo dije, eres el amor de mi vida y no te cambiaría por nada. Además, quería tener otro hijo contigo. – Dijo él sonriéndole.
Llamaron a Jared para darle la noticia y tras unas bromas del futuro tío, estuvieron hablando de cosas triviales. Pero algo más pasaba aquel día, el pequeño Ben pegaba el estirón y se iba a convertir en un infante. Los dos padres estaban ansiosos y no podían esperar más, Aarika ya le había preparado una tarta y estaban preparados para ver crecer a su hijo.

La vida de los Wolf se vuelve más caótica por momentos. ¿Cómo será la casa con un infante y ese bebé en camino? ¿Volverá al trabajo Aarika o Jared aún tendrá que ser quien dé las noticias de los embarazos de Aarika en el trabajo? ¿Cómo crecerá Ben? ¿Será rubio como mama o sacará el color de pelo de papa? Todo esto y más en el siguiente capítulo.

HE MODIFICADO EL ARBOL GENEALOGICO EN EL PRIMER POST

[Axorya 31]

 

 

Era hora de que Ben creciera y las ganas de sus padres iban en aumento, así que Aarika fue a coger a su bebé y lo llevó hasta la tarta.
-¡Vamos mi bebé, hay que crecer ya! - Dijo la orgullosa madre con su hijo en brazos, para después soplar las velas por él.
Ben fue dejado en el suelo por su madre y pronto todas las estrellitas que envolvían a todos los sims al crecer lo rodearon y dio el estirón convirtiéndose en un infante monísimo.

Al final, había salido rubio como Aarika y los ojos, bueno juzgad por vosotros mismos. Ahora sí que sus padres se iban a centrar seriamente en su educación, porque querían que pasase a la siguiente etapa con todo bien aprendido. Ahora sí, tendrían que comprar unas cosas más.

Tras la compra de las cosas que necesitaba Ben, se quedaron de nuevo en números rojos, pero al menos sabían que podían cuidar de su hijo y del que venía en camino, Connor y Aarika eran felices con Ben y con el bebé que venía en camino ya fuese niño o niña y sabían que Ben sería un gran hermano mayor. En una tarde, Aarika se esforzó en enseñar hablar a Ben y lo consiguió, aquel niño estaba sacando su rasgo de genio a relucir y era muy inteligente y es que aunque Aarika estaba embarazada, eso no la frenaba a la hora de esforzarse en su hijo, mientras Connor había empezado a escribir una novela dramática que Braulio De La Soledad le había pedido. Y todo iba sobre ruedas hasta que…

Aarika se puso de parto justo cuando acababa de estar un ratito con Ben y se iba a acostar… ¡el nuevo Wolf venia en camino! Esta vez Connor solo tuvo un momento de pánico y rápidamente, llamó a un taxi que los llevase al hospital mientras que llamaba a un canguro para Ben. El canguro llegó rápido y pudieron llegar al hospital antes de que el bebé asomase la cabeza.

Tras un parto bastante tranquilo y las horas en las que tardaron en ver cómo estaban madre y bebé como había pasado con Ben, llegó al mundo Caleb Wolf un niño que había nacido bajo los rasgos le encanta estar al aire libre y disciplinado, llegaba el segundo descendiente de los Wolf, tras unas horas de chequeos extras, el nuevo bebé salía del hospital con sus orgullosos padres. Ben con la ayuda de sus padres aprendió a usar el orinal y es que se estaba convirtiendo en todo un genio y su rasgo se acrecentaba cada día más, pero Connor y Aarika eran dos padres que daban la vida por sus hijos que querían lo mejor para ellos y siempre estaban pendientes de ellos.

La suerte que tenían con Caleb  es que era un niño muy tranquilo y que no daba demasiada guerra, así también podían ocuparse de Ben y es que el niño no sentía celos de su hermano menor, es más, les preguntaba a sus padres cuando podría empezar a jugar con su hermanito que ya tenía muchas ganas. Connor había enseñado un poco a caminar a Ben y después, fue Aarika quien acabó con el trabajo, la verdad es que el niño era todo un genio y aprendía con facilidad, incluso con los libros que le leían sus padres. Los días pasaban rápido y el matrimonio era tan unido que en el barrio se habían ganado la fama de fieles y todo el mundo sabía que ellos no miraban a otros que no fueran su esposa o su esposo, eso era un matrimonio como dios mandaba. El problema de tener cosas baratas es que se estropeaban con facilidad, pero para eso estaba Connor que arreglaba las cosas con una facilidad que daba gusto.

Pero el cumpleaños de Caleb había llegado y ahora serían dos los infantes que habría en casa, cosa que asustaba un poco a sus padres, pero tenían ganas de ver cómo sería Caleb. Así que Aarika volvió a coger a su hijo en brazos y con su padre animándolos, ella sopló las velas por el bebé y los dos progenitores esperaron el cambio del benjamín de la familia.

Parecía que el miembro más joven de la familia se parecía más a papa y es que casi era una copia de Connor, los dos hermanos habían salido con colores diferente de pelo y era divertido ver el cambio que había en cada uno. Aunque había que admitir que Ben era clavadito a su madre y Caleb se parecía más a su padre.

Tanto Aarika como Connor sabían que Aarika volvería a trabajar aquel mismo día, así que ella estaría menos horas en casa y que sería Connor quien tendría que cuidar de los niños. Por eso, mientras ella y Ben dormían, él se ocupaba de enseñar hablar a Caleb, lo cual le costaba un poco, pero se empeñaba y el niño también por lo que poco a poco pudieron ir mejorando. Aarika se fue un poco nerviosa a trabajar porque llevaba mucho tiempo sin ir, pero se calmó cuando Jared la llamó para recordarle que él estaría allí, sí, había sido cosa de Connor, ya que este le había enviado un mensaje para que calmase a su esposa. Y era verdad que no tenía de que preocuparse, porque al salir del trabajo había sido ascendida a Comerciante de especias… no había nada mejor que el trabajo duro para conseguir ascender y conseguir más dinero.

Pero nadie se había olvidado de que aquel día Ben cumplía años y pasaba a la etapa de niño, haciéndolo un poco más independiente. Fue Aarika de nuevo quien sacó la tarta y cogió a Ben en brazos para llevarlo hasta la tarta para que apagase las velas.
-Vamos pequeño, ahora hay que soplar con fuerza y apagar las velas. – Dijo Aarika acercando a Ben a las velas.
-Shi mami. - Dijo el pequeño soplando y apagando las velas con ayuda de su madre.

Ben creció siendo un niño precioso con el rasgo recién adquirido de atlético, algo que parecía irle muy bien con los otros dos que tenia. Pero estaba claro que un niño traía más cosas consigo, pero Aarika y Connor estaban preparados para llevar a cabo todo lo que fuese.

Con lo que habían conseguido con el ascenso de Aarika se podían permitir agrandar un poco la casa y ponerle una cama a Ben, pero nada más que eso porque aun no podían permitirse una habitación para los hermanos. Aun así, Caleb seguía aprendiendo todo lo que le enseñaban sus padres y aunque no lo hacía tan rápido como su hermano hacía todo lo que podía.

Ben era un niño tan bueno que sus padres decidieron escuchar una de sus peticiones y con los pocos ahorros que tenían se decidieron a comprarle una mesa de actividades para que pudiese jugar a gusto. Y Ben pronto demostró que le encantaba jugar con ello y rápidamente demostró subir rápidamente sus habilidades jugando. Y cuando se puso a jugar al ajedrez con el ordenador de su padre, empezó por el nivel 4 en Lógica gracias a la caja de clavijas con la que jugó siendo un infante. El que parecía tener muy mala suerte con sus relaciones era Jared, Connor siempre estaba recibiendo llamadas de su hermano para decirle que se había enamorado, que estaba saliendo con alguien o que había cortado esa relación, el hombre no encontraba su media naranja. El primer día de Ben había ido de maravilla y le habían pedido un trabajo sobre el supermercado y cuando salió del colegio, el niño no cogió el autobús y fue corriendo a informarse.

¿Cómo le irá a Ben en su etapa de niño? ¿Hará amigos en la escuela? ¿Sus padres les darán un hermanito o hermanita a Caleb y él? ¿Cómo les irá a sus padres en sus respectivos trabajos? Todo esto y más en el siguiente capítulo.

 

HE MODIFICADO EL ARBOL GENEALOGICO EN EL PRIMER POST

 

Editado 7 dic 2016 por Axorya

[Axorya 31]

Connor sabía que trabajando en casa era quien más tenía que ayudar a los niños, así que cuando Ben llegó del supermercado, se puso a ayudarlo con los deberes y se mostró rápidamente que aquel niño era todo un genio, los acabó rapidísimo. La carrera de Aarika iba viento en popa porque aquel día fue ascendida a Cortadora de verduras.

Pero aquel día, Aarika estaba un poco más seria de lo habitual y la razón era simple, cumplía años y se iba a convertir en adulta, algo que no le hacía especial gracia. Pero su marido e hijo mayor le dieron la sorpresa de haberle encargado una tarta de fresa y arropada por ambos se dispuso a soplar las velas y así se convirtió en una adulta hecha y derecha.

La verdad es que no había cambiado demasiado, se decidió a seguir con el peinado que había llevado siempre y lo único nuevo que tenía eran esas arruguitas que le habían salido, pero aunque Ben era un genio y un buen chico, parece que también era un culo inquieto porque en el colegio los habían llevado de excursión al teatro y tuvieron que decirle que se estuviese quieto o que guardase silencio, pero se lo había pasado de maravilla.

A Aarika le dieron una paga bastante buena en el día de la nieve y gracias a eso pudieron hacer una reforma a la casa que pudo poner la habitación de los niños y la de los padres separadas, algo que se necesitaba, aunque la cocina seguía en el salón/comedor y aún no tenían una mesa para comer, pero todo al tiempo.

Aun así, con Aarika hecha toda una adulta, Connor no sentía nada extraño, la seguía amando cada día más y sólo tenía ojitos para ella, fue aquella noche estando en la cama cuando sus dos hijos estaban ya dormidos que Aarika le dijo a Connor una cosa que sentía desde que había pasado a adulta.
-Connor, no quiero que salgas corriendo después de esto… pero… - La rubia no sabía cómo seguir y es que no quería asustar a su marido.
-¿Qué pasa, Aarika? Va dímelo, no me asustes. – Dijo él acariciándole la mejilla.
-A ver… es que… desde que me he convertido en adulta… quiero tener otro bebé… - Dijo ella con miedo a la reacción de su marido.
-¿Sólo eso? ¿Tenías miedo por eso? –Dijo él mirándola a los ojos, ella asintió mordiéndose el labio. – Venga aquí señorita Wolf que vamos a cumplir su deseo. – Al terminar de decir eso, Connor la cogió y la empezó a besar como si no hubiera un mañana.
Así fue como ambos progenitores fueron en busca de su tercer hijo gracias al deseo de la fundadora del legado.

Parecía que la nueva distribución de la casa ayudaba a Connor a escribir, pronto acabó el libro que Braulio le había encargado y además ascendió pasando a ser Mecanógrafo sensacionalista, eso quería decir que sus obras valdrían mas y tendrían más dinero. Eso a Connor lo alegraba porque poco a poco podía cumplir su sueño, cuanto más valiesen sus obras, más dinero tendrían en la familia y antes podría llegar él a su sueño.

Pero parecía que la llegada del tercer Wolf de la segunda generación se confirmaba, Aarika no paraba de vomitar aquel día, pero no quería adelantarse ya que llevaba unos días haciendo experimentos con las comidas y no quería hacerse ilusiones, todos sabían que los experimentos que llevaban comida… no siempre podían salir bien. Lo mejor es que Connor no dejaba de escribir y eso lo hacía mejorar, lo cual podía traer más dinero a la familia.

A los dos hermanos les encantaba estar juntos cuando  Ben jugaba con los bloques su hermano iba corriendo a estar con él, aunque al pequeño le gustaba más rechupetearlo todo. Pero a Ben no le importaba la baba se podía secar y a él le habían dicho que tenía que cuidar de su hermanito y lo hacía con agrado. Es más, Ben le contaba las cosas que hacía en el colegio y esas cosas y Caleb lo miraba embelesado.

¡Y se confirmaba! El tercer o la tercera Wolf venia en camino, Aarika sabia por fin que estaba embarazada, ¡su nuevo sueño se iba a cumplir! Desde aquel momento llamó al trabajo para avisar de que estaba embarazada y le dieron la baja por maternidad, Connor vio que se acercaba la hora de ir a trabajar y entró en la habitación.
-¿Aarika? Cariño, ¿qué no vas a hoy a trabajar? – Dijo él al verla.
-No cariño… ¿te acuerdas que te dije que quería tener otro hijo? – Dijo ella mirándolo a los ojos y sonriendo sin poder dejar de hacerlo, estaba muy feliz.
-Claro que sí, no me digas que… - Connor quería que aquello que pasaba por su cabeza fuese verdad.
-Si Connor, ¡vuelvo a estar embarazada! Vamos a ser padres por tercera vez. - Dijo Aarika riendo y se abrazaron con una gran alegría.

Pero esa no era la única alegría del día, aquel día era el cumpleaños de Caleb y se convertiría en un niño, ya dejaría de despertar a su hermano con sus llantos y juntos podrían jugar juntos más de lo que hacían ahora. Esta vez fue Connor quien cogió a Caleb y lo llevó hasta la tarta, allí soplaron los dos juntos, apoyados por Aarika y Ben los dos habían estado deseando ver crecer al más pequeño de la familia, por el momento.

Caleb creció con el rasgo frugal y siendo un niño guapísimo, muy parecido a su padre. Ahora había que hacer modificaciones en casa, pero no querían pensar lo que iba a pasar cuando llegase el nuevo miembro de la familia… se iban a volver locos, aunque lo amarían igual.

Y así quedó la habitación de los hermanos cuando quitaron la cuna de Caleb y le pusieron una cama, pero también se estiraron un poco y les compraron un cofre para sus juguetes… sus padres querían a sus hijos con locura y no querían que les faltase de nada. En ese embarazo, ambos padres querían una cosa diferente, Aarika quería tener otro niño pero Connor quería una niña, ¿Quién ganaría?

Y de pronto una mañana, los gritos de Aarika comenzaron de nuevo, el tercer Wolf venia en camino y no tenía intención de llegar tarde, por una vez en su vida, Connor mantuvo la calma, llamó a un taxi y se fueron volando al hospital, alguien quería llegar y como hemos dicho no iba a esperarse porque sus padres no se lo esperasen.

Y por fin, después de muchas horas y chequeos médicos, llegaba al mundo Dakota Wolf, la primera niña de los descendientes de Aarika y Connor. (¡SI, POR FIN! MI PRIMERA NIÑA EN UN LEGACY T.T) La niña nació bajo los rasgos virtuosa y buena, aquella iba a ser la princesa de la casa. Esta vez había ganado Connor, al volver a casa su hijo mayor les tenía una noticia, siendo tan joven había decidido que su sueño iba a ser convertirse en cirujano de fama mundial.

¿Cómo será la vida con la pequeña Dakota en casa? ¿Se llevará bien con sus hermanos? ¿Se convertirá en la princesa de la familia? ¿Querrán sus padres aumentar más la familia? Todo esto y más en el siguiente capítulo.

HE MODIFICADO EL ARBOL GENEALOGICO EN EL PRIMER POST

 

Me estoy pensando seriamente lo de dejar aquí el legacy, ya llevo dos capítulos donde nadie me comenta y eso desmotiva un poco... Pero me esperaré unos días si no veo cambios, el legacy wolf se quedará así, espero no tener que dejarlo.

[Necromántica 28]

No dejes el legacy!!!! es que no me meto toddos los días pero yo creo que si que te sigue gente! No se me da pena, pero haz lo que a ti te apetezca, si no te gusta jugarlo o editarlo como veas, a mi me gusta leer los legacys de todos!

Me ha encantado llegar y encontrarme la vida de la segunda generación, los 3 hijos, los ascensos, mejoras en las casas! Además me gusta mucho que no sean sims 4 porque hay infantes, hay estaciones, en fin, cositas que dan mucho juego y que se echan en falta.

Ánimo! Sigue con el legacy o déjalo, lo que importa es que estes contenta y juegues, que no sea una obligación.

 

 

[Axorya 31]

hace 4 minutos, Necromántica said:

No dejes el legacy!!!! es que no me meto toddos los días pero yo creo que si que te sigue gente! No se me da pena, pero haz lo que a ti te apetezca, si no te gusta jugarlo o editarlo como veas, a mi me gusta leer los legacys de todos!

Me ha encantado llegar y encontrarme la vida de la segunda generación, los 3 hijos, los ascensos, mejoras en las casas! Además me gusta mucho que no sean sims 4 porque hay infantes, hay estaciones, en fin, cositas que dan mucho juego y que se echan en falta.

Ánimo! Sigue con el legacy o déjalo, lo que importa es que estes contenta y juegues, que no sea una obligación.

Muchas gracias por tus palabras Necrómantica. La verdad es que disfruto jugando con esta familia, haciendo las fotos y demás. La verdad es que me gustaría que si me sigues, comentasen más, pero sabiendo que tu estás ahí, me gusta el seguir con el legacy en este foro.

La verdad es que ha habido muchas cosas en pocos capitulos, ahora veremos como avanza la cosa en la familia Wolf. La verdad es que si, en los Sims 4 se echan en falta muchas cosas, tienen otras, pero los infantes y esas cosas de Los Sims 3 se echan en falta.

¡Seguiré con el legacy! Porque me has dado las fuerzas que necesitaba para seguir adelante ^^

 

Con el dinero que iba entrando en casa, se podían ir haciendo reformas y es que la cocina y la nevera ya no eran lo de antes y las comidas tenían unos sabores raros, así que se gastaron algunos simoleones en poner unas mejores. No eran las mejores que habían en el mercado, pero eran las que se podían permitir en aquel momento.

Aun así, las cosas no acababan ahí porque aquel mismo día, la familia tenía dos nuevos cumpleaños, Connor se iba a convertir en adulto y Ben iba a convertirse en todo un adolescente. El primero en hacer el cambio, fue Connor teniendo en cuenta lo bien que había quedado su mujer, él esperaba tener la misma suerte. Así que arropado por su esposa y sus dos hijos mayores, ya que Dakota dormía en su cuna, sopló las velas para convertirse en todo un adulto.

¿Soy yo la única que piensa que Caleb es una copia de Connor? Porque si nos fijamos bien a pesar de las arrugas, Connor le ha pasado buenos genes a su hijo mediano. Pero Connor se apartó rápidamente para que Aarika pudiese coger el siguiente pastel para Ben y que este pudiese crecer.

Eran las primeras velas que Ben soplaba por sí solo y estaba ilusionado de verdad, primero esperó que toda su familia estuviese lista y se dispuso a soplar las velas. Ben estaba listo para pasar a la adolescencia, sabía lo que quería y sabía que lo iba conseguir porque no iba a dejar de luchar.

Ben creció convirtiéndose en un guapísimo adolescente con las hormonas alborotadas y que había adquirido el rasgo entregado a su familia. ¿Quién me apoya en que Ben se parece a mami? Pero ahora que los dos cumpleañeros ya habían cumplido, era hora de empezar el día, aquel día Ben y Caleb no iban al colegio, pero mientras sus padres dormían, se rompió el ordenador y Ben se dispuso a arreglarlo y empezó por el nivel 3 de manitas gracias a los bloques que había deseado de pequeño.

Parecía que Ben estaba encantado de ser hermano mayor porque cuando Dakota empezó a llorar, rápidamente corrió a darle el biberón y a procurar que no le faltase de nada, era todo un hermano mayor. Pero además, se apresuró a apuntarse a una actividad extraescolar optando por el club de estudio, sabiendo que eso le ayudaría. Pero entonces optó por mirarse lo de la universidad que sus padres tenían allí desde antes de su nacimiento.

Ben sacó muy buenas notas en tecnología y educación física, pero la que él necesitaba que era ciencia y medicina había sacado 183 sobre 400, se informó sobre que tenía que mejorar y las habilidades eran ciencia, jardinería y pesca, por lo que no se lo pensó un segundo y quiso mejorar en todo eso. No sabía porque tenía que aprender todo eso si él quería ser cirujano, pero no iba a cuestionar lo que decían los de la universidad.

Pero aquel día antes de que Ben y Caleb se fuesen al instituto y al colegio, era el cumpleaños de la pequeña de la familia y todos querían verla crecer, fue Connor quien cogió a la pequeña y la llevó hasta la tarta para soplar por ella. Tras hacerlo, los dos mayores se fueron pitando al colegio y los orgullosos progenitores esperaron para ver crecer a su pequeña.

Dakota creció siendo una infante preciosa y sólo hay que verla para ver que el pelo lo ha sacado de algún antepasado de sus padres y que tiene unos ojos hermosos, la verdad es que va a ser la princesita de la familia. Sus hermanos se enamoraron de ella cuando volvieron del colegio y después los progenitores ayudaron a sus hijos con los deberes, lo hacían siempre y es que no querían que bajasen sus buenas notas, además a Ben le habían dicho que pronto seria el baile de graduación y aún no tenía a nadie con quien ir.

Dakota tenía su propio carácter y hacía las cosas cuando quería aún siendo una infante, pero cuando su familia se ponía a enseñarle algo, ella ponía toda la atención y aprendía poco a poco. Aarika fue a trabajar, fue ascendida a probadora de ingredientes, parecía que el sueño se acercaba más y más.

El día de la fiesta de graduación de Ben llegó y el chico estaba como un flan, la limusina lo fue a buscar y entró al baile detrás de su prima Constanza quien lo abrazó y besó cuando vio que era él. En el baile las cosas se sucedieron una detrás de otra, Ben se odió por haberle pedido un baile a su compi de clase. Su amorcito no sólo le dijo que no, además se burló de él delante de todo el mundo. Todos le dijeron que su foto de promoción era alucinante, él esperaba que tocasen su canción favorita. Ben tuvo la peor visión de su vida… ¡una llama con tres ojos! Una chica llamada Renée Tavera le confesó a Ben que le gustaba un montón. Ben se puso tan contento que no se le borraba la sonrisa de la cara y eso no era lo mejor, es que además habían empezado a salir juntos.

Había llegado el cumpleaños de Caleb, aquel día el mediano de la familia se iba a convertir en todo un adolescente como su hermano mayor. El pequeño esperó a que su madre sacase su tarta de la nevera y fue corriendo a soplar las verlas, estaba deseoso de crecer y su familia lo sabía.

Caleb creció siendo un adolescente bastante guapo con el rango amante de los gatos, ahora había más hormonas revolucionadas en la familia. El chico no sabía que quería hacer aún con su vida, pero decidió hacer lo mismo que había hecho su hermano.

Hizo la prueba de aptitud para la universidad, a ver que le salía, porque no tenía ni idea de que hacer y quizás eso le daba una idea… ¿Quién sabia? Pero ni siquiera eso le daba una idea, así que tendría que seguir pensado y descubrirlo por el mismo. Dicho y hecho, ayudando a su padre a arreglar el ordenador, Caleb descubrió que quería ser El manipulador, su familia lo aceptó porque es lo que él deseaba y les valía.

Ben despertó y quiso ver a Renée, necesitaba saber de ella y estar a su lado, además, estaba preparado para hacer algo que no había hecho la noche anterior. Cuando Renée llegó empezaron a hablar y a coquetear, pero cuando ella menos se lo esperaba, Ben se lanzó a hacer algo que no se había atrevido en el baile, se lanzó y le dio el primer beso de ambos. Aquella pareja parecía iba en serio. Connor consiguió el título de Autor de ediciones de bolsillo y es que él también estaba camino de su sueño. Y ese no fue el único ascenso de la noche porque cuando Aarika salió de trabajar había sido ascendida a cocinera de línea. Poco a poco, las cosas en casa se iban mejorando y es que la familia ya tenía 5.020 simoleones ahorrados y eso sólo podía seguir creciendo.

¿Cómo irá la vida de los Wolf? ¿Serán sólo tres los hermanos? ¿Pedirá Dakota un hermanito o hermanita a sus padres? ¿Será Renée la madre de los hijos de Ben? Todo esto y más en el siguiente capítulo.

HE MODIFICADO EL ARBOL GENEALOGICO EN EL PRIMER POST

[Axorya 31]

Parecía que el tiempo no pasaba para la pareja de progenitores Wolf, ellos se seguían amando de la misma manera y eso lo demostraron una manera cuando sus hijos mayores ya se habían ido al cole y Dakota dormía en su cuna, ellos aprovecharon para demostrar el amor que sentían. La verdad es que no pensaban en tener otro hijo, pero tampoco es que no lo deseasen.

Ben había hecho una nueva amiga en el instituto se llamaba Vesta Mae-Sekemoto, los dos se llevaban bien y esta le había invitado a su casa después de clase, se pusieron a hacer juntos los deberes y al parecer se llevaban mucho mejor de que lo que muchos podían pensar. El que estaba yendo muy bien en sus estudios era Ben ya que había sacado matricula, algo que quería mantener y de lo que sus padres estaban muy orgullosos. Y Aarika volvió con un ascenso bajo el brazo, había sido ascendida a chef repostera, cada vez estaba más cercana a su sueño.

Y llegó un día que todos esperaban, Dakota iba a convertirse en niña y todos querían verla crecer, Aarika cogió a su hija que estaba en la cuna y la llevó hasta la tarta, su padre y sus dos hermanos pequeños empezaron a vitorearla y a animarla, hasta que la pequeña ayudada un poco por su madre sopló las velas.

Dakota creció siendo todo lo guapa que su familia esperaba, además de obtener el rasgo artística, parecía que la pequeña de la familia tiraba por la rama artística, pero el futuro para trabajar aún estaba lejos. Pero con el paso de etapa, había que hacer cambios en la casa.

Como tenían algunos ahorros de los últimos ascensos, decidieron hacer la casa más grande, pudieron separar la cocina y el baño y arriba pusieron las camas, pero los ahorros no dieron más de sí y se terminaron antes de poder hacer las habitaciones, al menos todo estaba más ordenado y la cocina tenía el destripador de ingredientes que le habían dado a Aarika en el trabajo por su ascenso.

Pero aunque la cosa iba muy bien y nos les importaba a todos dormir en la misma habitación hasta que se pudiesen poner paredes, Aarika se despertó a medianoche y no le dio tiempo a bajar la baño cuando vomitó en medio de la habitación, estaba claro que algo no le había sentado bien, ¿no? Pero limpió el vomito y se volvió a la cama, pensando que algo le había sentado mal. Pero los vómitos no cesaron en toda la noche.

Pero no, parecía que no le había sentado nada mal… ¡estaba embarazada de nuevo! Parecía que la celebración del aniversario de bodas había dado unos frutos que nadie se esperaba. Entusiasmada, reunió a toda la familia y les dio la buena noticia, su marido la abrazó besándola con el amor que jamás había dejado de sentir por ella y sus hijos… bueno, primero se quedaron mirándose los unos a los otros, pero después pegaron un grito de alegría que bien se daba a entender que estaban felices por tener a otro hermano o hermana dentro de muy poquito. Pero Ben no lo estaba pasando bien últimamente, Renée lo había llamado diciendo que ya era joven-adulta y al decirle que a él aún le quedaban algunos días, ella le colgó y no lo había vuelto a llamar… eso lo tenía preocupado y aunque se centraba en sus estudios y ya hacía dos días que estaba en el cuadro de honor… eso no le hacía olvidar lo que había pasado con Renée. E hicieron una llamada a Jared para felicitarle, este ya había pasado a la etapa de anciano.

Pero de pronto, cuando Aarika salía del baño dejando a Dakota duchándose, rompió aguas y gritó avisando a Connor de que el nuevo miembro de la familia venia en camino. Este se puso un poco de los nervios y lo quiso hacer todo a la vez, llamó a un taxi, gritó a sus hijos mayores que cuidasen de su hermana y se fue con su esposa hasta el hospital, ya tenía ganas de ver que era su cuarto hijo.

Después de unas cuantas horas de parto y gritos por parte de Aarika, llegó al mundo la nueva integrante de los Wolf, Elizabeth que había nacido bajo los rasgos torpe y odia estar al aire libre… si, nos había salido una joya… esperemos que no se mate accidentalmente durante su vida.

Pero con la llegada de Elizabeth hay que hacer cambios en la casa como no hay mucho dinero, se hacen dos dormitorios y es que a los hermanos no les molesta compartir cuarto con su hermana pequeña. Dakota estaba encantada con su nueva hermana y le pidió a sus padres que la inscribiesen a ballet para poder así enseñarle a su hermana cuando creciese. Y Connor había recibido el titulo de escritor por encargo.

Pero Dakota era una niña muy observadora, que no dejaba pasar una y había visto que su hermano mayor tenía una cara mustia desde hacía unos días y ni corta ni perezosa se acercó a él abrazándolo.
-Tete, ¿qué te pasa? Estás muy triste desde hace unos días y estás muy feo cuando te pones de esa forma. – Dijo Dakota mientras le daba uno de esos abrazos enormes que a él le encantaban, pero Ben sonrió por esa forma de hablar de su hermana.
-Nada, nada Dakota. Cosas de mayores… - Dijo el chico suspirando y espachurrando a su hermana entre sus brazos.
-¡No empieces como papa y mama! ¡No soy pequeña, Elizabeth es pequeña, yo no! – Dijo la pequeña refunfuñando ante las palabras de su hermano.
-Bueno vale, no te sulfures enana. ¿Te acuerdas de que te dije que tenía novia? - La niña asintió con la cabeza, Ben estaba asombrado se lo contó cuando era una infante y no esperaba que se acordase. - Pues hace unos días que se convirtió en joven-adulta y cuando le dije que aún me faltaban unos días… me colgó… - Ben sintió como de nuevo se le caía el alma a los pies.
-¿Y qué? Eso no quiere decir nada, tete. Ella quizás no quiere molestarte hasta que acabes el instituto, además te queda muy poco para graduarte y podrás estar con ella, pero después de ir a la universidad. - Dijo la pequeña quedándose tan ancha y dejando pensativo a su hermano, quizás la enana tenía razón… si él amaba a  Renée ¿por qué se tenía que dar por vencido?

Pero cuando tuvieron un poco de dinero, decidieron hacerle una habitación a Dakota y ponerle un horno de juguete con el que ella se mostró encantada. Además de poner una mesa en el comedor para poder comer todos juntos y no de pie o sentados frente al ordenador, en la ducha o en el váter.

Y tal y como había dicho su hermana, el cumpleaños de Ben llegó y todos se arremolinaron a su alrededor en la pequeña cocina para verle convertirse en joven-adulto. La verdad es que Ben tenía ganas de crecer para llamar a Renée y darle la noticia.

Ben se ha convertido en un joven-adulto muy, muy guapo y que ahora tiene el rasgo cotorra, parece que este chico no ha tenido más que rasgos buenos, esperemos que deje algo para sus hermanos.

¿Cómo le irá a Ben en su nueva etapa? ¿Le habrá esperado Renée? ¿Seguirán con su relación o Ben tendrá que buscar el amor en la universidad? ¿Se echará novia el joven Caleb? Todo esto y más en el siguiente capítulo.

HE MODIFICADO EL ARBOL GENEALOGICO EN EL PRIMER POST

[Necromántica 28]

Ben corre a hacerse mayor eh? hahaha, me encanta que quiera ser cirujano. los vas a llevar a la universidad? se puede en el reto legacy? molaría mucho. Todo parece ir bastante bien en general, estaré pendiente de la siguiente entrega!