Publicado 7 feb 2016 Ya me queda poco para el final. Casi se me pasa poner la advertencia: +18 Yo de ti no entraría si eres menor de edad. No me hago responsable de las consecuencias que pueda ocasionarte (en caso de haberlas). Spoiler —Por qué tiene que ser tan difícil el amor... —¿Willow? —Deje de llorar, señor Willow. El sentimentalismo, no le va a librar del posible castigo. —¡¿Qué?!... ¿Qué castigo? —Emit, mira... yo... tuve que hacerlo, tu habrías hecho lo mismo —Ese no era su deber, señor Willow. —Bueno, seguramente no, no lo habrías hecho... porque eres tan frío como los plumbots que fabricamos. —Deje de faltarme al respeto y acompáñeme, Davinia quiere verle. —Eso, quiero hablar con Davinia... ella es una mujer sensata. —Hola, Benjamin. —Davinia, tengo una explicación... —¿De qué año es el residuo? —Es... de 1857, señora. —¿De tan lejos?, ah... tuviste un problema a la vuelta, es cierto... sabes perfectamente las consecuencias que puede ocasionar lo que has hecho, romper el continuo de la línea de tiempo, de esa forma tan drástica... —Si, señora... Verá, señora davinia, puedo explicarlo... —Fuiste tú mismo quien puso la norma de los residuos, es una de las reglas principales de tus portales temporales. No se pueden traer restos del pasado bajo ninguna circunstancia, y mucho menos a personas, por las consecuencias que pudiera ocasionar eso. —Lo sé, Davinia. —Hicimos la excepción para que buscaras a tu querida esposa, como pago por habernos aportado tanto con tus conocimientos. Sin embargo, no solo no la has traído, si no que... la has sustituido por otra, una a la que no conocemos. —Así es, señora. —¿Tienes algo que decir, Benjamin?. —Verás, yo... tuve un percance a la vuelta, acabé en 1857, conocí al residuo, se me hace raro llamarla de esa forma porque le he cogido cariño, y la chica estaba pasando un mal momento. Yo la ayudé a superarlo, y como digo, me encariñé con ella. Si me iba la dejaría sola, pero ya sabes cómo son los sims de esas épocas, es un tierno conejito indefenso... me partía el alma imaginar qué iba a ser de ella cuando me fuera. No había ninguna mujer sola en esa época, no quería que ella fuera la única. —Bravo, Benjamin, una historia muy conmovedora. —De las que a usted le gustan, señora Davinia. —Te dejaremos quedártela en sustitución de tu esposa. Pero, será la única excepción que haremos contigo. Ya no hay vuelta atrás. —No te preocupes, Davinia. No volverá a pasar nada parecido. —Señores. Me retiro a mi centro de operaciones. —Adiós, Davinia. Gracias por todo. —Adiós, Benjamin. —Vaya una excusa... —Cállate, Emit. —No entiendo por qué Davinia te lo perdona todo. —Porque tengo mano con las mujeres, sé llegar a su corazón. —Debes de producirle lástima. —Tú no sabes nada de mujeres, Emit. —No lo necesito. —Uhm... bueno, y de hombres tampoco. —¿De verdad crees tener mano con las mujeres, Ben?... con quién está ahora la que te rompió el corazón. —Vaya... Hola, Clarise —Que sexy... —Vamos a dormir ya, estoy muy cansada —Oye, qué te parece si lo hacemos acurrucados, me apetece abrazarte... —¿Has ido a hablar con tu jefa, Ben?. ¿Yo no tenía que estar aquí?... —No te preocupes, está todo arreglado. —Me alegro, Ben. —Clarise, me están dando ganas de besarte. —Estás especialmente guapa esta noche —Mejor quítate la ropa. —¿Por qué?. —Lo vamos a pasar bien, Clarise... —Tú, solo... déjate llevar —Vale. —Está siendo fantástico, ¿verdad Clarise? —Ha sido divertido, ¿verdad? —Esa... no es la palabra exacta —Te amo, Clarise. Te ayudaré a vestirte, estás un poco cansada. —¿O quieres que repitamos?... jeje... —No. Ya he tenido bastante por hoy. —Todo es nuevo para ti, dulce Clarise. A la mañana siguiente... —¿Qué vas a hacer hoy?, yo tengo que ir a un ensayo, no puedo pasar la mañana contigo, pero me gustaría. —No lo sé, Ben. —Pilla el monorraíl aéreo, y plántate en algún sitio al que te apetezca ir... —Hola... estoy muy nerviosa, Ben me ha dejado sola esta mañana, no sabía a dónde ir, y como solo conozco este sitio... al menos he conseguido llegar —¡Si!, muy bien hecho, Clarise. Aquí estarás de maravilla. —¿Cómo te llamabas? —Abel. —Ah, vale... —Pobrecita Clarise, tan perdida, en un lugar desconocido... cómo puede dejarte sola... —Tiene un ensayo. —Bah, yo no cambiaría un ensayo por un rato en tu compañía, Clarise. —Él tiene que hacerlo, es importante para su trabajo. ¿Por... por qué nos quedamos aquí, abrazados?... —Ya estamos adentro, espera que me desperece... no he dormido en toda la noche. —¿Abel, Puedo ir al aseo?. —Venga, Clarise... Yo te sostengo la mochila propulsora mientras... —No puedo hacerlo si estás tú aquí. —Son las costumbres del siglo XXI, Clarise. Meamos delante de la gente. —Ben nunca me habló de eso... —Se le olvidaría. —Hoy pareces contenta, Trina. para lo que sueles ser tú. —Estoy emocionada por la presentación de Ben. Quiero que llegue ya el día. —Pero si no queda ya nada, faltan menos de 3 días. —Clarise, no te resistas, Ben es un idiota, le ha roto el corazón a muchas mujeres... ¡muack, smuuuack, uhmmmmuack!... ¿estás cómoda? —¡Hola Moly!. —Estas mascotas virtuales serán un bombazo. Continuará... Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 8 feb 2016 Me alegra que ben quiera a Clarise pero no me gusta nada la actitud de Abel. Espero que Clarise no se deje violar porque eso es lo que pretende Abel. Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 9 feb 2016 Penúltimo capítulo, con el próximo ya termino: Spoiler —Te he echado mucho de menos, Ben. Te necesito. —Romina, vengo agotado... —Sé cómo puedes relajarte. —¡Quítate de encima!, es la segunda vez que he hablado contigo, ¡¡déjame!!... —¿Por qué huyes, conejito?, no se va a comer Ben todos los filetes, sabe que tiene que repartir... —¡Quita!... ¡¡Socorro!!... —¿Qué ha sido eso?... ¡¿Quién hay en el baño?!... —¿Clarise?, ¿qué pasa ahí dentro? —¿Abel?... —Hola Trina. —¿Qué pasa, Abel?. —Yo solo acompañaba a la gatita de Ben al aseo. —Te conozco lo suficiente, Abel... —¡Como para decirte, que te metas las manos en el culo!... —La iba a compartir contigo, Trina. —Y luego la cabeza en el retrete. —Hola, Clarise —¿Has venido de visit...?... ¿Clarise?... —Adiós, Clarise. —¿Por qué no te arrimas, Ben?.. —¡Aparta!. —¿Has venido para eso, Romina?. —Si, me sentía muy sola... me apetecía verte. ¿Cuál es el problema? —Estoy comprometido. —Bueno, eso no significa nada, una canita al aire no es para tanto.... —¡¡Clarise!!... por favor, espera, a dónde vas... —¿Es otra de tus amiguitas? —Ya no lo es, no es lo que parecía... por su parte si, pero por la mía no —De verdad, Clarise, ya sé que estábamos desnudos... pero no pasó nada. —Ella vino... creo, creo que me vio salir del ensayo y me siguió hasta aquí, estaría necesitada... pero yo la aparté y no pasó nada, ni siquiera nos besamos. —Ya... —Ben, déjalo, te creo —Pero ya no importa, hay cosas que... siento que... no consigo adaptarme, no puedo acostumbrarme. No sé lo qué me pasa, hay algo que... —Solo llevas 2 días, deja que pase más tiempo —Yo haré lo posible para que te adaptes, Clarise, conmigo será como si siguieras en el siglo XIX. —Tú no puedes controlarlo todo, tonto... —¿Qué te parece si nos damos un baño relajante para calmarnos? —Hoy no estoy para tonterías, ben. —¿Qué quieres decir?, ¿consideras una tontería pasar un rato romántico conmigo?... —No estoy para baños —Te amo, dulce Clarise... —Ves como era relajante —Ben... prefiero ir a la cama. —¿Por qué?, si aquí puedes hacer lo mismo... —Tu amigo, Abel... me acosó esta mañana en la bañera. —Sabes qué, Clarise... vamos a ir a la cama. —¿No te sorprende lo que acabo de decir? —Clarise, esta es Anuska. La mandé aquí, a la habitación, para que no creyeras que estaba haciendo algo con ella, si la veías al llegar. Pero, ahora que estáis aquí las 2 juntas... ¿por qué no hacemos un trío, chicas?. —Tu amiga no parece muy contenta con la idea. —Anuska, ella solo es tímida. —Basta con meterla a una bañera, y será toda nuestra. No puede resistirse a un buen baño. —¡¿Por qué haces esto, Ben?!... —¿Se te ha enfadado?... —No sé, quizás vaya a esperarnos en la bañera —Es muy joven, ¿verdad? —No me creerías si te dijera su edad. —Oh, Ben... olvídate de ella, vamos a hacerlo ya. —¿Y luego qué?... Anuska, no me supones ningún reto. Solo quería darle celos. Continuará... A Merchedj le gusta esto Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 12 feb 2016 Y por fin... el último capítulo. —Clarise, amor mío, mi dulce Clarise... —Déjame, voy a vestirme, necesito dar una vuelta. —¿A dónde vas a ir?, a estas horas. —Necesito pasear, vuelve con la tal Anuska. —No, amor mío, la he mandado a su casa. Lo del trío, no lo decía enserio. Solo estaba furioso por lo que me has contado de esta mañana, pero encontraré la forma de hacérselo pagar al cerdo de Abel. —Pensaré en ello. —Hola, señorita... —Buenas noches, es usted muy educado. —¿Está sola?. Tiene unas manos muy finas y sexys, ¿permite que le acaricie con ellas?. —¿Qué?... no, yo... no esperaba algo así de un plumbot... —Estoy hecho para darte amor, preciosa. Puedo adaptarme a todos tus deseos, ¿quieres un masaje?, deja que te abrace... —¿Qué tal el paseo?, aparte de corto... —Ben, ya he visto suficiente, estoy decidida. Este mundo, no es para mí. —Clarise, si lo haces, me despedirán. Piénsalo bien. Antes preferirían que te hubiera matado. No puedes volver ahora, le contarás todo a personas de tu generación. —Pues diles que lo has hecho. —Lo siento... —Has sido el amor de mi vida. —¡Adiós Ben!.Gracias por todo. —Hogar, dulce hogar. —Parece que he tenido suerte... ha salido bien. 3 Años después... —No volví a ver a Ben, no supe nada de él, después de que regresé a Midnight Hollow. No estoy segura de si alguna vez lo amé, aunque supongo que él si lo sigue haciendo, pero espero que no me guarde rencor por irme y que eso le haya costado el despido. Le estoy muy agradecida por haberme regalado una experiencia tan fantástica. Igual que él, yo también rehíce mi vida. Ahora soy la primera mujer escritora de Midnight Hollow. Aquí es donde tengo que estar, donde quiero estar. Supongo que seremos incapaces de olvidarnos uno del otro, siempre recordaremos esa experiencia. Gracias a él he aprendido que lo que no me mata, me hace más fuerte. Absorbí toda su fuerza, la suficiente para llevar las riendas de mi vida. Ahora he encontrado mi camino. Tengo un camino, entre los libros. A veces también me acuerdo de Marmelade. Esa es la parte que menos me gusta de la historia. No sé qué fue de ella, desde que me fui con Ben. Supongo que a estas alturas, estará casada y habrá tenido hijos. Su madre la habrá forzado. Mi vida ahora es muy tranquila, encerrada entre estas paredes. Haciendo lo que realmente me gusta, imaginar, escribir novelas, leer sobre otros mundos. Pero ahora soy feliz. Claro que, de vez en cuando... me sigue apeteciendo hacer alguna locura... —Parece que no hay nadie... FIN. Que alegría, poder terminar una historia. A Liyah and Merchedj les gusta esto Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 13 feb 2016 Clarise ha tomado una buena decisión al volver a su casa. Ese lugar no era para ella al igual que a mí misma no me gustaría vivir para siempre en Oasis Landing. Me alegra que haya encontrado su camino como escritora y que sea feliz. Share this post Link to post Compartir en otros sitios