Publicado 25 ene 2013 Con lo romantico y precioso que estaba quedando todo, que seguro que iba a follar salvajemente en el cielo mientras volaban va y aparece Helena para aguar la fiesta...Pues nada, espero que en el siguiente capitulo Jensen recoja energía celestial o algo así y le perfore el pecho y le deje un bonito agujero =') PD: Me encanta el continuará =3 Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 25 ene 2013 Yo al pricipio con en el Continuará no me fijé que el chico miraba abajo y creía que era Slender xDD Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 26 ene 2013 Oioioioioioiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii pero qué cuquiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiis! jajaja Y la Helena... ¬¬ ¡Jo, es que siempre lo dejas en lo mejooor! ¿Es que no tienes corazón! ¿Eh, eh? xDDD ¡Sigue prontooo! Me apetece ver un poco de sangre... muahahaha Pero que no sea de Jensen, ¿eh? Que aquí la única que se carga a "tó quisqui" soy yo, ¿eh? jajajaja No, en serio, sigueee Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 27 ene 2013 (editado) Antes de nada me voy a disculpar porque es un capítulo demasiado corto y las fotos no son lo mejor que haya hecho. Así que no me matéis porfis :3' Capítulo 18 Truenos Como acto reflejo, Jensen se colocó delante de Kesley a modo defensivo. Sus alas ya no estaban. La chica lo notó nervioso, tenso. Estaba totalmente inmóvil, parecía incapaz de poder mover un solo músculo. No obstante fue el primero en hablar. -Helena, déjala. – Pidió con un hilo de voz. Sabía muy bien de lo que Helena era capaz, al igual que también sabía que si ella lo quisiese podría terminar con los dos con tan solo un chasquido de dedos. Pero no lo haría. La rubia estalló en una estruendosa carcajada, parecía divertirse con la escenita que estaban montando. -Vamos, Jensen. No lo retrases más. Las órdenes son las órdenes, y están para cumplirlas. Muévete un poco hacia un lado… no quiero freírte a ti también. – Sonrió con malicia. Le encantaba imponerse ante los demás, ser la jefa, la mandamás. Le gustaba que le temiesen mientras jugaba con los rayos que era capaz de invocar, pocos ángeles sabían manejar el tiempo como ella. Kesley observaba paralizada a Helena. Sonriente, con los ojos azules clavados directamente en los suyos. No la perdía de vista ni para pestañear. Kesley sacudió la cabeza, ¿Qué estaba pasando con ella? No era una debilucha, no necesitaba que nadie diese la cara por ella. No podía tener miedo. Ya había vivido muchas cosas antes, el terror había desaparecido de su vida. Apartó a Jensen a un lado y dio un paso hacia Helena. Estaba decidida a plantarle cara aunque fuese un acto suicida. -A ver, “Helena” – Pronunció su nombre arrastrando cada letra, como si le diese asco. - ¿Qué rayos quieres? Necesito que alguien me lo explique de una vez. ¿Qué he hecho? ¿He sido mala? ¿Le he robado el peluche a la niñita? – La rabia la obligaba a decir las cosas sin pararse a pasar en las consecuencias. “Kesley, basta. No lo empeores.” Segunda vez que escuchaba la voz de Jensen en su cabeza. Continuaba pidiéndole que se relajase, que no diese más baza. Pero no quería. -¿Te ha comido la lengua el gato? ¿O ha sido tu putillo? – Continuaba Kesley. -Mi putillo, dice. – Rio Helena. – Creo que es lo único que compartimos tú y yo. El putillo. – remarcó esa última palabra. A pesar de la poca luz que había allí arriba, Kesley pudo ver la vergüenza en los ojos de Jensen. Incluso creyó descubrir lo que parecía rubor. El corazón le dio un vuelco. Había creído que entre Helena y Jensen no había nada, ya lo había descartado hacía tiempo. No podía ser cierto, pero la expresión de los ojos del chico lo delataba. -¿A quién le han comida la lengua ahora? – Preguntó la rubia saboreando sus palabras. “Kes, no le hagas caso.” -Llévame a casa. – Dijo ésta fríamente. No quería oír nada más. Ahora mismo la presencia de Helena le importaba lo mismo que la de una mosca pisada en el suelo. “Kes…” -¡Qué me lleves! - Exigió. -¿A dónde quieres ir? – Preguntó Helena arqueando una ceja. – Tu camino se ha acabado. Espero que lo hayas disfrutado. Sin más, elevó el puño en el aire apretándolo con todas sus fuerzas. Cientos de rayos comenzaron a relampaguear en el cielo neoyorquino sin rastro de nubes. A medida que la mano subía los rayos eran más fuertes. Kesley retrocedió asustada, si daba un paso más caería al vacío. -No te acerques. – Dijo seca al ver que Jensen se acercaba para ayudarla. -Pero… -Replicó él. -No. – Lo cortó. -Ya vale de tonterías, hasta otra Kesley. – Helena sonrió y echó el puño elevado hacia delante. En ese mismo instante, un rayo se desprendió desde el cielo para precipitarse sobre Kesley. Lo último que vio antes de dejarse caer hacia atrás fue a Jensen tratando de alcanzarla con la mano, pero era demasiado tarde. Sentía la fuerza del viento rozando su piel, el cabello revoloteando por encima de ella. Cerró los ojos. No quería saber lo que le quedaba antes del impacto contra el suelo. Dicen que cuando estás a punto de morir, justo en los últimos segundos, los recuerdos de tu vida pasan por tu cabeza igual que una película de fotos. Una tarde con la familia, una excursión al campo, tu canción favorita. Pero lo único que Kesley pudo escuchar fue el sonido de su cuerpo rompiendo el aire entremezclado con cientos de gritos de Jensen que no podían dejar de sonar en su cabeza, y su imagen. La última visión que había tenido de él justo antes de caer. Finalmente todo ensordeció. Editado 27 ene 2013 por SoniiaV Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 27 ene 2013 Wooooooooooow ¿Y ahora le saldrán las alas a Kesley? Chan chan chan ¿Y serán negras? Chan chan chan Pues menudo angelito la Helena, no? Menos mal que no es demonio, que si no.... Ojú! Y lo de Jensen y Helena... Más le vale que sean EX! Porque si no.... Katanaaaa xD Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 27 ene 2013 Ay ay,pues yo creo que Jensen y Helena son hermanos xP Sii alas negras♥♥♥ !! Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 27 ene 2013 Eso...quizá ahora le salgan las alas a Kes o venga a buscarla la pelirroja (que son de la misma raza xD). Tengo ganas de ver que pasa ya en el siguiente T_T Helena es un autentico angelito, sisi =') Y entre Jensen y ella...Bueno, entiendo que a Kes le haya sentado mal. A mí también me pasaría lo mismo si el tio que me gusta se ha liado o está liado con una tia que quiere matarme =) Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 27 ene 2013 Es verdad,la pelirroja! *---* rubios vs pelirrojas ...ejem... Ale ale,la pelirroja ,Kesley y Helena. Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 27 ene 2013 Ostras que no habia leido. Pues si, es muy corto, hija de fruta. El próximo mas te vale hacerlo mas largo, y no dejarnos asi ¬¬ Vamos a ver las alas de Keeeeeeeeeeeeeeeeeees! :DD Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 27 ene 2013 Qué cortito! Malvada T_T Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 28 ene 2013 Ya avisé que sería corto xD Intenté alargarlo pero no tenía mucho a donde así que así se quedó. A ver si saco un ratito esta semana y pongo más :3 Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 28 ene 2013 Cierto, si la Helena llega a ser demonio telita XDDD ¿Qué hizo Kesley? ¡Quiero saberlooooo! T_T Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 1 feb 2013 ¡Amoh hija! Queremos mas Kesley,mas Jensen,y mas Promises! :) Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 1 feb 2013 Estoy de parón indeterminado xDDD Ni ideas, ni inspiración, ni mano. A ver si a partir del lunes me pongo a ello T.T Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 2 feb 2013 ¡Vamos, vamos! ¡Si tienes a un personaje nuevo al que darle caña! Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 2 feb 2013 Por favor, cúrate bien esa mano!!!! Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 18 feb 2013 Aiiii que maravilla de historia!!!! Y las fotos están tan curradas!! Y narras genial. No podría gustarme más. Ahora... Kes sacará sus alas negras y le plantará cara a la niñata puta de Helena. ¡Maldita cría! Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 5 abr 2013 (editado) No tenía pensado seguir, pero bueno, un capi más.. xD Capítulo 19 La guerra Jensen permaneció allí parado, sin saber que hacer ni poder pronunciar una sola palabra. El cuerpo de Kesley se iba haciendo más pequeño a medida que caía hasta finalmente desaparecer. El joven estaba seguro que no llegaría a tiempo para salvarla por muy veloz que fuese o muy desarrolladas que tuviese sus capacidades, la había perdido definitivamente. Una vez más. -¿Estás contenta? –Espetó con furia a Helena, que permanecía sonriente. - Es lo que querías, ¿No? ¡Pues ya lo has conseguido! Parecía estar a punto de darle un buen derechazo en la cara a la chica, pero se contuvo. No serviría de nada, ya no. Al fin y al cabo, era lo único que le quedaba. Se llevó las manos a la cara como si así pudiese eliminar el dolor de la pérdida. Solo quería pegar patadas, gritar, acabar con todo. Desatar sus aún desconocidos poderes y terminar con el mundo. Sí, eso es lo que quería. Pero no, sabía que no podía, que debía esperar a su siguiente oportunidad. Deslizo sus manos desde la nuca hasta la altura de las orejas tirando del pelo para tratar de mitigar su rabia. La malvada sonrisa de Helena desapareció al percatarse de que el chico estaba realmente dolido. Avanzó un paso hacia él extendiendo el brazo con la intención de consolarlo, pero enseguida se dio cuenta de que era una mala idea y lo dejó caer. -Oye Jen… - Las palabras salían de su boca de modo que casi parecía una disculpa, pero se quedaron en eso: Casi. – Sabías que esto iba a pasar, siempre pasa. ¿Cuántas veces han sido ya? ¿Tienes que continuar intentándolo para siempre? ¿No sería más fácil que dejases de aparecer en su vida? -Cállate. – murmuró él. -Siempre va a acabar así, Jensen. Por muchas veces que la encuentres, por muchas veces que lo intentes. –Hizo caso omiso al comentario del chico, quería continuar con su discurso.- Vosotros solos os habéis metido en este lío. Iniciasteis la guerra, y ahora estáis en medio de ella. Sois el signo de la rebeldía. Algunos os apoyarán, son pocos y cobardes, así que simplemente callan y hacen lo que los demás dicen. Siguen la corriente, los demonios son malos. – vaciló al pronunciar la palabra demonio, y la repitió con desprecio. – Demonios. Lo sabes de sobra, sabes como son. Muchos de nosotros han muerto en sus manos. -¡He dicho que te calles! – Gritó él lleno de rabia. Sentía como la sangre hervía en su interior recorriendo cada arteria de su cuerpo. No era capaz de tranquilizarse, y Helena no ayudaba. - ¡No! ¡Joder, no! – Estalló la chica. Comenzaba a impacientarse. – Mira, Jensen. Tú y la… bueno, el demonio ese, habéis roto las normas de todo. Desde luego no es la primera vez que ocurre, muchos ángeles y demonios se enamoran, pero se queda en eso. Y los pocos que intentan seguir adelante son eliminados. -Y así funciona. El progreso en nuestro mundo no es algo válido. – Continuó Jensen, se sabía el sermón de memoria de tanto escucharlo. - ¡Pues no, Helena! ¡Déjate de demonios o ángeles! ¡Somos lo mismo! Iguales. -Sabes que no. – Hizo una pausa esperando una mala respuesta o un guantazo, pero solo obtuvo silencio. -¿Por qué no la olvidas ya? – Trató de sonreír. Debía calmarlo. – Jen, no puedes seguir luchando por lo imposible. Terminarás consumiéndote. Y yo… - sus ojos azules brillaban como el reflejo de la luna en el mar, en cualquier momento se pondría a llorar. -No la voy a olvidar, Helena. – Dijo él cortante. - ¿No te cansas de hacer siempre lo mismo? Ahora lloriquearás para darme pena, y terminarás diciendo que me quieres. Lo sé de sobra. ¿Cuántas veces van ya? ¿Setenta? -Pero es cierto. – Helena no pudo contener más las lágrimas. – No entiendo porqué no la olvidas. Ellos dejarán de venir a por ti, y nosotros a por ella. Podréis ser felices, con otras personas. Conmigo… El viento pareció amainar. Tan solo los acompañaba una cálida brisa, lo que quería decir que Jensen también se estaba calmando. No sabía que decirle a Helena. Era cierto, él también la quería, pero no como ella lo hacía. Cuando la única persona a la que realmente quería con todo su corazón le era arrebatada tenía que buscar consuelo en algún lugar, y ese lugar siempre era Helena. Una especie de refugio, sabía que era totalmente artificial, que en realidad ella se alegraba de su muerte, pero no tenía otro lugar. Su motivo para querer acabar con Kesley no era solo por las órdenes que recibía. La odiaba. La odiaba por robarle a Jensen, por aparecer una de tantas veces y hacer que él se levantase de su lado y huyese dejándola sola. -Creo que ya hemos hablado sobre esto… - murmuró el chico. – Helena, te quiero, pero no así. Eres como una hermana, mi mejor amiga, no entiendo porque te comportas así. Deberías apoyarme. -Sabes que te apoyaré en lo que sea. – Hizo un esfuerzo por tragar su saliva y continuó: - Pero no en esto. Como no la dejes acabarás con nosotros. Él sabía que eso era cierto. Que la guerra entre ángeles y demonios era culpa suya por tentar las leyes no escritas de ambas razas. Todos sabían que el amor interracial estaba prohibido, cientos de casos eran conocidos al año, pero eran aniquilados sin un juicio previo. Sin dar tiempo a una explicación. Si algo tenía claro era que no estaban abiertos a ello. Pero por fin, después de tantos años alguien se había atrevido a desafiarlos y plantarles cara. Un descendiente de Apolo y una hija lejana de Hades. La guerra había comenzado. -No hay un nosotros. – contestó él en un susurro. Editado 5 abr 2013 por SoniiaV Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 6 abr 2013 Ya te lo dije... La historia es tan romántica...!! Luchando siempre por su amor en cada "vida" nueva... *recurriendo a un pañuelo, toda desconsolada* ¿Y ahora qué? En verdad esperaba que a Kesley le salieran las alas... ¿Aun hay esperanza o habrá que empezar de cero? Chan chan chan ¡POR LO QUE MÁS QUIERAS, SIGUE LA HISTORIA! Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 6 abr 2013 Tengo pensado seguirla pero no sé si podré colgarla, las fotos darán bastante trabajo y no estoy segura de que valga la pena... ya veré que hago. Gracias Aída Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 6 may 2013 Capítulo 20 Mucho tiempo atrás -No podemos hacerlo, es imposible. Todo juega en nuestra contra. – Nathaniel hizo un esfuerzo tremendo para digerir lo que él mismo estaba diciendo antes de continuar. - Lo mejor es que lo dejemos. Que no volvamos a vernos. Todo ha sido un error. Cada palabra que escupía golpeaba su corazón como un martillo haciéndolo añicos, pero era el único modo de poder continuar con su vida y ambos lo sabían. Los ángeles y los demonios tenían prohibido relacionarse, y más aún del modo en que ellos habían conectado. Sus antecesores estarían enfurecidos. -No vuelvas a decir eso. –Le susurró Genevieve entrelazando los brazos con la espalda de su amado. – Me dan igual las reglas. Me da lo mismo lo que piensen mis ancestros. Me importa nada lo que los demás digan. Te quiero.Era casi incapaz de contener las lágrimas, pero sabía que si tomaba esa decisión debería ser fuerte y mantener la serenidad por siempre. -¿Estás segura? – preguntó él separándola y mirando a los rubíes que tenía por ojos. -Completamente. Un trueno resonó en la distancia iluminando el cielo nocturno e instantáneamente millones de gotas de lluvia comenzaron a martillear con ira el suelo. Eso solo podía significar una cosa, los otros estaban cerca. Y furiosos. Podrían correr y esconderse durante algún tiempo, pero no por siempre. Ambos lo sabían, en cuanto los encontrasen todo terminaría. Cuando les pusiesen las manos encima la muerte sería la mejor de sus opciones.Otro estallido en la lejanía, y gritos. No estaban muy lejos, pero aquellos alaridos y quejidos indicaban que los ángeles y los demonios se habían encontrado en algún punto no muy lejano. Esto les concedería algo de tiempo para huir. Quizá serían sólo unos minutos, una hora como mucho, por eso no podían desaprovechar ni un solo segundo. Probablemente ahora mismo a pocos kilómetros estaría desarrollándose una batalla campal llena de sangre y dolor. El chico deslizó su mano entre los húmedos cabellos de Genevieve despertándola del shock. -Tenemos que irnos. -Claro. – Susurró ella no muy segura. No podía sacar de su cabeza la imagen de toda su familia sufriendo por culpa de sus caprichos. Si no habían muerto ya posiblemente los condenarían por su culpa. Pero ya no podía hacer nada. Debía ser fuerte.Soltó todo su dolor en un último suspiro y recompuso las formas como pudo. En silencio, ambos echaron a caminar en sentido contrario a los relámpagos. El bosque estaba más silencioso de lo habitual, tan solo se podía oír la batalla en la distancia. Sin parar de caminar, Genevieve soltó la pregunta que había estado comiéndole le cabeza tanto tiempo. -¿Quién ha podido hacerlo? Quiero decir… nadie lo sabía, entonces ¿Quién dijo lo nuestro a los altos cargos? ¿Quién nos… denunció? – La última palabra la pronunció arrastrándola con asco. Tanto en el mundo de los ángeles como en el de los demonios, la denuncia era la peor de las faltas hacia un compañero.La respuesta de Nathaniel no llegó hasta unos metros más adelante. -Helena. -Esa… puta. Sus ojos comenzaron a brillar más intensamente de lo que habituaban, pero no era su dulce mirada de siempre, sino una fría y distante, cargada de odio. Al mismo tiempo sus cabellos comenzaron a crear ondas en el aire que recordaban a las llamas de una hoguera, era casi como si pudiese emitir luz propia. El odio y la repugnancia corrían por sus venas, haciéndola sentir casi incapaz de controlar sus poderes. -Debes tranquilizarte, nunca te había visto así. Harás que nos descubran, Gen. – Él solo trataba de calmarla, pero esto solo hizo que se enfureciese más. Un terrible viento huracanado se levantó de la nada a su alrededor y el ambiente parecía cargar con al menos diez grados más. Resultaba tan asfixiante que a Nathaniel le costaba respirar. A pesar de eso solo pudo sonreír. – No sabía que me hubiese enamorado de un demonio tan poderoso.Genevieve le devolvió la sonrisa con un empujón cariñoso e instantáneamente todo volvió a la normalidad. Simplemente eran ellos de nuevo. De la mano, luchando contra el mundo. El impulso de besarlo y agradecerle todo lo que había hecho por ella simplemente se quedó en eso, no tenían tiempo que desaprovechar. -¿Fue ella? – preguntó Geneviene casi sin aire de tanto correr. Habían parado junto a un riachuelo para beber un poco y tomarse un respiro. Si continuaban a aquel paso caerían inconscientes y los atraparían. -Sí. – Admitió Nathaniel. – Lo siento, Gen. No creí que ella…-No importa, no es culpa tuya. – Sorbió un poco de agua y le sonrió. – Esto de no poder usar nuestros poderes para huir es un asco, podríamos estar ya en medio del Sahara. Aunque mejor… prefiero ir a París. Nunca he estado, ¿No te gustaría? -Gen, si usamos la magia nos encontrarán, lo sabes. -Lo sé. Déjame soñar. Nathaniel le sonrió. -¿Siempre será así a partir de ahora? – Preguntó ella. -No, tranquila. Serán unos minutos.No había sido Nath quién le contestó. Ni siquiera había sido un chico. Ambos se dieron la vuelta para contemplar a aquella chica bajita con cabellos de plata que tantos problemas les había dado. -Helena. – Susurraron ambos al unísono. -Me llamo. – Contestó ella con una sonrisa fría. – Nath, te dije que mirases bien con quien te juntas. Encima de ser un… demonio - acompañó la palabra con un gesto de asco – es tan tonta que crea un huracán de la nada en medio del bosque. ¡Y no solo eso! Desde donde estaba pude ver un halo rojo alrededor. Y estoy hablando de kilómetros de distancia. Patético. – Hizo un gesto con la mano provocando una oleada de vientos que lanzaron a Genevieve por el aire hasta que encontró un árbol contra el que golpear. -¿Por qué, Helena? ¿Por qué lo haces? – Preguntó Nathaniel tratando de mantener la calma, aunque ver a Gen siendo golpeada de aquel modo se lo ponía difícil. -Es mi deber. Tú sabes que lo que haces está mal. Ella no debería existir. – Agitó de nuevo la mano creando una nueva ráfaga de aire lanzándola una vez más contra el mismo árbol. El golpe fue de tal magnitud que algunas ramas cayeron al suelo. – Podemos arreglarlo, salvarte. Decir que todo era un plan tuyo. Tan sólo hay que matarla. Vivirás. El chico echó la mirada atrás donde Genevieve se hallaba tirada, con la espalda apoyada contra el tronco del árbol. Hilos de sangre cubrían su clara piel minutos antes inmaculada. Su pelo estaba hecho un revoltijo, pero no mostraba la vida de hacía un tiempo. Simplemente era un cabello pelirrojo más, desarreglado y lleno de ramitas y hojas marrones. La miró a los ojos, tan brillantes como siempre, pero esta vez parecían reflejar algo diferente, algo que nunca antes había apreciado en ellos… miedo. Miedo por él, por los suyos, por ella misma. Miedo de lo que Helena pudiese hacer, o quizá de lo que ya había hecho. Además era sabido que acabar con la vida de un demonio rebelde aportaba al ángel el poder suficiente para tumbar cientos más. -¿Y si me niego? – Contestó él al fin. -Ambos moriréis. -No puedes conmigo. – Murmuró Genevieve tratando de erguirse. Una punzada de dolor en el hombro izquierdo la hizo soltar un quejido, pero no fue suficiente para detener sus pasos hacia el frente. – No tienes ni idea de lo que soy capaz, angelucha sin vida. -Gen… para. – Nathaniel trató de detenerla, pero la fría mirada de la chica lo obligo a volverse atrás. En cuestión de segundos el halo rojizo volvió a rodear el cuerpo de Genevieve y sus tirabuzones ondeaban en todas direcciones. Un huracán de llamas fue formándose a su alrededor hasta los diez metros de alto. Acarició las inmensas paredes con las yemas de sus dedos. No la quemaba, al contrario, su tacto era frío y seco. Sonrió. Helena retrocedió un paso asustada. Tenía razón, no la creía capaz de albergar tanto poder. Pocos podían disfrutar siquiera de la fuerza del viento, y sólo los más afortunados alcanzaban más. -Tú… tú…. ¿Cómo…? – Se llevó las manos a la cabeza, por primera vez dudaba. Y la duda era muestra de debilidad. Entonces cayó en la cuenta de algo y también sonrió. No solo eso, comenzó a reír a carcajadas, como si fuese incapaz de parar. -Mierda, Gen. ¡Para! – Gritó Nathaniel saliendo del shock. Pero era tarde, ya estaban rodeados. Demonios a un lado, ángeles al otro. Ya no podían huir. La demostración de poderes de Genevieve los había condenado. La agarró con fuerza de las manos, entrelazando sus dedos con los de ella. Ambos sabían que no les quedaba ni un aliento de vida. -Prométeme una cosa, Nath. –Suplicó ella con los ojos empañados por las lágrimas. – Prométeme que nunca me dejarás, que estaremos juntos siempre. -Siempre. Entonces cientos de luces fruto de la ira de sus compañeros se lanzaron sobre ellos provocándoles la muerte, tiñendo el arenoso suelo de carmín. Y finalmente, sus cuerpos se transformaron en cenizas que el viento se encargó de barrer. Todo había terminado. Continuará Muy ñoño el capi, lo sé. Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 6 may 2013 Por fin Actu!!! =D (yo llevo 5 "viñetas" de kyle, a ver si sigo). Pues me dan pena Nath y Gen, pobres. Que les dejen ser felices. Maldita Helena, tio. Puta celosa, ojala se muere entre terribles sufrimientos =3 Me gusta la última parte de tiñendo el arenoso suelo de carmín. Y finalmente, sus cuerpos se transformaron en cenizas que el viento se encargó de barrer. Continue usté. Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 6 may 2013 .__. Genevieve es retrasada. Share this post Link to post Compartir en otros sitios
Publicado 6 may 2013 (editado) Gracias por comentar SIN OBLIGACIÓN :3333''' Y gracias a Jensen por la aprobación. Espero ansiosa por Kyle..! Pd: De este capi es de donde saco el título, por si a alguien se le pasa :3 Y más gracias Cova por comentar sin ser obligada, pero tú si de verdad. I love you, y tus criticas a mis protas también las loveo. Editado 6 may 2013 por SoniiaV Share this post Link to post Compartir en otros sitios