Historia finalizada Romeo X Juliet

[sara-sara 0]

me encanta este capitulo (L)

un pocoo cortitoo jajaja peroo me gusta me gusta! sigue prontoo que siempre dejas con mucha intrigaa T-T

[Angelique 0]

Uouh! La fuga de Juliet y Romeo!! Kyah!! xD

''mordiendo con furia mi pálida piel'' En cuanto leí eso casi me levanto y me voy a la montaña a cantar la heidi! Dios! Romeo! Tienes que existir! jaja. Que buen capítulo, super bien narrado. Sigue pronto! Es la mejor historia que he leído nunca!.

[NatayaTahir 0]

Aquí os traigo un capitulo bastante cortito y creo que algo mediocre, pero mis musas se han largado dejándome en la estacada. Quizá ahora se esten emborrachando en algún antro de mala muerte, riéndose de mí.

Capitulo 40

Alguien se levantó de sopetón a la mañana siguiente, apagando con furia el despertador del móvil. Se frotó los ojos con paciencia, saboreando con los ojos el dulce sol que se abría paso por las rendijas de las persianas.

Su cabeza sabía de memoria el plan que había confeccionado con Juliet aquella misma noche. Estaba preparado para hacerlo, él vivía para hacer ese tipo de recados, aunque lo que más le gustara fuera el sonido del dolor o las quejas de sus víctimas.

-Será sencillo-se dijo y se cambió el pantalón del pijama por algo más adecuado-muy sencillo.

No bajo a desayunar, ya que su tarea era bien distinta. Antes de que alguien le viera, debía abrir la puerta cerrada de la vieja criada de Juliet, colarse en su interior y rescatar de una caja fuerte una llave y un papel con algún número delatador. Tal y como le había explicado ella, donde Nana guardaba las cosas importantes.

Se plantó delante de la puerta que la chica le había mostrado y antes de comenzar el arduo plan, se paso un par de veces la mano por el cabello. Solía hacerlo cuando sus nervios estaban a flor de piel y necesitaba algún medio para desahogarse.

En una habitación, justo en el piso de abajo, una muchacha esperaba ansiosa en la cama que Romeo hiciera posible el plan. ¿Y si no conseguía abrir la puerta? ¿Y si la caja de seguridad era demasiado segura y no conseguía abrirla? Confiaba plenamente en sus hazañas. Él le había dejado muy claro que en su, ejem, trabajo, aquellas tareas eran el pan de cada día. Abrir puertas con cerrojos imposibles, cajas fuertes con códigos de lo más extraños y alguna que otra cosa que no quiso mencionar y que ella sabía con total seguridad por donde iban los tiros.

Otra vuelta en la cama, cerrando los parpados con fuerza y dejando que la mente se quedara en blanco, al menos, por unos momentos de gran tensión, algo bastante difícil.

El joven no había tardado tanto en abrir la puerta cerrada (era demasiado fácil, incluso un inepto sin idea podría hacerlo) y tardó un poco más en hallar los números de la dichosa caja fuerte. Sin embargo, allí estaba la llave, enrollada con un papelito bastante nuevo donde ponía un número suficientemente largo para que fuera de algún lugar. Se lo guardó todo en el bolsillo del pantalón, cogió todas sus herramientas y salió disparado de aquella habitación, ya que había oído pasos.

Bajo las escaleras atropelladamente, de tres en tres y casi tropieza con el último escalón.

-Mantén la calma, idiota-se recriminó-llevas haciendo esto desde los 12 años.

A Juliet se le paró el corazón cuando él entró haciendo un gran estruendo, pensando que alguien le había pillado y ahora la acusarían a ella o vete a saber qué. No obstante, al verle allí plantado, con su envidiable seguridad y su porte casi aristocrático, con los mechones arremolinados en su frente y sus ojos de serpiente, fríos y astutos, supo que todo había ido bien.

-Lo tengo todo-musitó enseñándole la pequeña llavecita y un papel blanco con algo escrito.

-¿La llave y la contraseña de la sala de vigilancia? ¿Seguro que es la contraseña…?

-No había otra llave y este papel estaba enrollado aquí. Quien iba a suponer que la ancianita que te cuida sufre de pérdidas de memoria y tiene que ir apuntándolo todo-rió y se sentó en una silla-y que encima, te lo contaría a ti, a la que más le interesa escapar.

-Ya, pero yo no tengo la técnica para ir colándome en habitaciones cerradas e ir abriendo cajas fuertes como si fuera Tom Cruise en Misión Imposible-musitó ella y los dos se sonrieron.

-Bien, un tercio del plan se ha llevado a cabo con éxito. ¿Qué más queda?

-Robar un dvd de seguridad, de la noche anterior o la otra y cambiarle la fecha-se mordió el labio al no estar muy segura como harían todo aquél montaje. Romeo le adivinó el pensamiento y sonrió para sí mismo.

-Un compañero de equipo es un hacker de cojones-indicó-una llamada y él nos hace el trabajo.

-¿De verdad? ¿Así sin más? ¿No pedirá algo?

-Pché, me debe un par de favores, el muy imbécil. Será un profesional con todo lo que sea ordenadores, pero es un incompetente en infiltrarse en sitios.

-Bien, pues llámale cuando tengamos el dvd y que haga lo que tenga que hacer-ella se incorporó de la cama e iba a salir para ducharse, pero él la agarró de la muñeca impidiéndole salir.

-Todo va a ir bien. Confía en mí-y él no supo porque había pronunciado aquellas palabras, ni porque el corazón le bombardeaba a tal velocidad cuando ella asintió y le dio un fugaz beso en los labios (¿desde cuándo era tan atrevida?), ni porque, al salir ella del cuarto se relamió los labios con cierta sonrisa que nada tenía que ver con la suya, retorcida e irónica. Gracias a Dios que no había un espejo por allí, puesto que si hubiera visto aquél gesto tan sensible y humano, hubiera tenido siete años de mala suerte, una mano sangrando y una gran preocupación en la mente.

PD: Tal vez todo lo de la fuga vaya muy rápido, porque no me quiero entretener mucho en ello.

PD2: Romeo se ha admitido a él mismo que le atrae mucho Juliet, sin embargo, eso no es lo mismo que admitir que está sintiendo algo más por ella, porque sería igual a admitir que se ha ablandado. Y él no quiere ser un sensiblero, aunque ya lo este siendo xD

[Beelz 736]

Oye que para ser corito no tiene nada de soso, al parecer una musa sigue en tu mente xD Bueno sigue cuando puedas

[sara-sara 0]

cada vez se pone más interesante :) te he dicho ya que me encanta la historia??

[Angelique 0]

Cortito pero especial!! Empieza ya la fuga! Yuhuuu! Una narración, como siempre, PERR-FECTA.

[sara-sara 0]

cuanto tiempo sin actualizar no?? QUIERO CAP YAA POR FAAA!

[NatayaTahir 0]

Siento mucho la espera de la próxima actu! La verdad es que me está costando horrores escribir, basicamente porque ando escasa de inspiración y últimamente mi insomnio hace efecto (junto con mi dolor de cabeza crónico, todo sea dicho xD). A ver si mañana acabo un capítulo y escribo otro dos más (si mis musas vuelven del Caribe, junto con mis ideas y las ganas de ponerse en faena) y actualizo. Deseadme suerte~~

[EverKris 0]

Hace unos dias empecé a leer tu historia desde el principio...

Solo puedo decirte una cosa:GUAU

Nunca pensé que una historia de los sims me pudiera enganchar taaaanto,es simplemente fantástica,tienes un talentazo...Además,los sims son guapísimos!

Aqui tienes a una nueva fan loca :) xd

[NatayaTahir 0]

Si señores! No es una ilusión, he actualizado después de mil años en sequía! No os espereis gran cosa, porque como ya dije, mi inspiración anda de vacaciones junto con mis musas. Aún así, ojala lo disfruteis!

Capitulo 41

Oía a lo lejos un grupo de música que intentaba ser de metal, con un cantante que berreaba y una guitarra que daba escalofríos por lo desafinada que estaba. El único que se libraba era el bajo, que más o menos controlaba la situación, junto con el teclista.

Sorbió de su vaso con cierto desdén, ya que el cristal no se hallaba del todo limpio y recogió el cigarro que había quedado muerto en el cenicero, dibujando formas extrañas con el humo que surgía de él.

Sus ojos, del color del humo de su cigarrillo, un grisáceo claro con ciertos matices oscuros, recorrían todo el antro en busca de una cara familiar. Hacía una maldita hora que lo esperaba y él odiaba esperar. Era el tipo de persona que llegaba siempre puntual, que le gustaba que la gente también lo fuera y odiaba estar ahí sin hacer nada, cuando podría estar aprovechando el tiempo.

Volvió a dar una calada de su cigarrillo, casi consumido y exhaló el humo echando la cabeza hacia atrás, con un toque sexy que a ninguna hembra del bar le pasó inadvertido.

-Hola-musitó una chica, tal y como le habían gustado a él. Pecho generoso, curvas vertiginosas y ligera de cascos-¿esperas a alguien?

Él la miró burlón, preguntándose si aquella zorra que lo contemplaba con cara de deseo tenía alguna neurona.

-¿Qué crees que hago, sino?-respondió ácidamente, tirando la colilla al suelo.

-¿Quieres que te haga compañía?-y se inclinó hacía él, dejándole el escote justo delante, dando a entender que era lo que buscaba.

Dos semanas atrás se hubiera ido con ella al lavabo sin pensárselo dos veces. Dos semanas atrás se la hubiera cepillado sin compasión en un diminuto espacio, jadeando como un poseso. Dos semanas atrás hubiera disfrutado con aquél par de gemelas que enseñaba sin pudor. Sin embargo ahora su cabeza y su cuerpo solo respondían a un estimulo con nombre y apellido, suaves cabellos indomables y unos ojos color miel con los que se ahogaba y a la vez se derretía.

-Lo siento, mi amigo debe estar al caer-respondió de forma correcta, intentando no herir los pocos sentimientos que tuviera.

Ella lo pilló enseguida y musitó un leve “tú te lo pierdes”, para ir a parar en una mesa próxima, ligando con otro pobre desgraciado.

No le gustaba nada aquél ambiente, a rebosar de mujeres con destinos crueles, hombres carentes de futuro y bandas juveniles que no sabían tocar. Negó con la cabeza y encendió otro cigarrillo, hasta reconocer a lo lejos una figura que conocía.

-Ya era hora, capullo-saludó cuando el otro chico se sentó.

-He tenido problemas-se excusó pobremente.

-Ya, tu madre te ha confiscado otra vez las revistas porno, ¿no?-y rió al recordar que una vez le ocurrió aquello.

-Eso solo me pasó una vez, te recuerdo. Nada que ver, mi novia me ha encontrado con otra. Creí que no volvería hasta tarde y en fin…

-¿A quién se le ocurre llevarla a casa?-le tiró todo el humo a la cara para después mostrar una sonrisa burlesca, propia de Romeo.

-No estamos aquí para discutir que hago bien y mal-carraspeó un poco y pidió una cerveza al de la barra-y bien, ¿qué coño quieres?

-Uhh, míralo que mayor, soltando tacos-imitó a su acompañante y también pidió una cerveza-necesito un favor.

Lo miró incrédulo, para después pellizcarse en la mejilla y confirmar que el mismísimo Romeo, el témpano de acero, que nunca se dignaba a pedir nada de nadie, ahora se arrastraba (bueno, quizá no tanto) para pedirle a él un favor, al pobre chico informático del que siempre se reía.

-No, no es un sueño-respondió el rubio irónico-es real.

-¿Quién eres y donde está el rubio pretencioso que conozco?

-Aquí delante, ¿es qué no lo ves?-un camarero sirvió dos jarras de cerveza fría, con una limpieza más que cuestionable.

-¿Y qué me das a cambio?

-¿Acaso no recuerdas quién te ha salvado el culo en dos ocasiones?

Él moreno se atragantó con el contenido de la jarra, la depositó en la mesa, limpiándose con la manga del suéter.

-Está bien, tú ganas, como siempre. ¿Qué quieres?

Romeo buscó algo en su chaqueta y sacó un Dvd corriente, con una fecha escrita con permanente negro. El informático lo cogió, sin apartar la mirada del objeto, intentando resolver el gran misterio.

-¿Qué diablos hago con esto?

-¿Meterlo en tu ordenador y hacer magia?-contestó sarcásticamente ante tal pregunta estúpida e hizo que el chico sonriera. Romeo decía “hacer magia” cuando trataba con los ordenadores.

-¿De qué tipo de magia hablamos?-se guardó el Dvd en la bolsa que llevaba con él y cruzó las manos, haciendo una V invertida con sus brazos.

Romeo le explicó lo que necesitaba, diciéndolo que debía cambiar la fecha que aparecía en el video por otra, dentro de dos días. El muchacho asintió, afirmando que aquello era extremadamente fácil y que mañana por la mañana lo adquiriría, totalmente renovado. No preguntó para que necesitaba aquél video, sabiendo de sobras a que se dedicaba ahora, pero también sabía perfectamente que el hombre que lo miraba sin mirarle realmente no soltaría ni prenda.

-Mañana a las 8 aquí. Y por favor, se puntual-dijo con un tono amenazador, recogiendo sus cosas y marchándose del garito, con aquél aire entre seguridad y altivez, con pasos marcados.

-Perfecto, encima me toca a mí pagar.

PD: Gracias Cova por hacerme al "amigo" infórmatico de Romeo! No tiene nombre, aunque en los sims le he bautizado como Simon xD

PD2: Romeo solo es agradable con Juliet =3

[NatayaTahir 0]

Capitulo 42

Si alguna vez rumié que el diccionario tendría una foto mía junto alguna palabra jamás pensé que sería la de nerviosa. Y es así como estaba realmente, hecha un manojo de nervios (frase hecha con mi bello rostro, también). Daba vueltas por toda la habitación, sin apartar la mirada de la maleta, con el corazón intentando una fuga inmediata por mi boca. Me senté en una silla y respiré hondo, dándome ánimos cuando ni siquiera estaba realmente segura de todo lo que comportaba mi huida.

La ira de mi padre, todo el personal buscándonos, el inminente despido de mi adorada Nana…pero también había cosas buenas, como la sonrisa torcida de Romeo, sus besos, sus caricias, nuestros cuerpos…

-¡Basta!-grité con la mano puesta en la parte izquierda de mi pecho-basta.

-¿Lista?-preguntó aquella voz que tan bien reconocía, abriendo la puerta precipitadamente.

-Creo que sí-me mordí el labio y eché un último vistazo a mi cuarto. Toda mi vida se resumía en aquél pequeño cubículo, las paredes me observaron como si fueran mi madre, alegrándose al verme crecer. Las ventanas reían cuando les hacía cosquillas con alguno de mis dedos, dibujando sobre el vaho del cristal. Mi cama siempre me explicaba historias lejanas para hacerme olvidar donde me hallaba y la poca libertad que poseía, limpiándome las lágrimas con sus suaves sabanas blancas. Los libros sabían de memoria el recorrido de mis ojos al leerlos, como también conocían la textura de mis manos al pasar de página.

Amaba aquél diminuto ambiente que siempre consideré mío, de mi propiedad. Amaba el paisaje que se veía por las ventanas, amaba leer sin descanso, sentada en la alfombra en forma de corazón que olía a soledad y a buenos ratos, sin embargo, amaba por encima de todas las cosas el recuerdo de mi primer beso, que ahora quedaría recluido entre aquellas paredes con cuadros, que se emocionaban al verme y lloraban conmigo.

-Si-musité mientras trazaba en mi rostro lo que creí una sonrisa nostálgica-estoy lista.

Y agarrando la maleta, cerrando la puerta por última vez de lo que fue mi habitación, no pude evitar sentirme triste, un poco desconsolada.

No obstante la serenidad que veía en los ojos de Romeo, su firmeza al andar, consciente de lo que estaba a punto de hacer, su leve sonrisa burlesca y su mano cogida a la mía (cosa que me sorprendió) hizo que todos aquellos sentimientos se disiparan y pudiera alcanzar a ver una luz lejana, pero bastante cercana como para alumbrarnos. Porque quería un futuro, porque quería ver el mundo real con mis ojos, notar la arena caliente en la planta de mis pies y escuchar en directo las olas de mi apreciado mar. Y sobre todo, deseaba por encima de todo estar a su lado, que me tomara de la mano como en ese instante hacía y me sonriera a su manera mientras me miraba. Porque estaba enamorada de él, aunque fuera frío y distante, borde y petulante, con un ego tan grande que no cabía en su persona. Porque le quería de esa forma y de ninguna otra.

Así que cuando una suave brisa acarició mi cabello al salir de mi hogar por primera vez por la puerta delantera, giré la cabeza y vi la fachada de mi casa, del lugar que me había acogido sin reservas, evitando que percibiera o conociera el mundo que se extendía allí afuera, deseoso de aceptarme.

-¿Crees que lo echarás de menos?-preguntó Romeo, aún cogiéndome la mano, observándome.

-Un poco-sonreí-he estado aquí toda mi vida y creo que, 18 años no son pocos.

Él asintió, tirándome de mí para que volviera, casi corriendo por el jardín delantero hasta llegar a un automóvil estacionado un poco lejos de lo que había sido mi hogar. Romeo me guardó la maleta, junto a la suya, para después abrirme la puerta y hacer que entrara. Acto seguido se montó él en el asiento del conductor.

-Nadie se ha dado cuenta de nuestra huida-dijo poniendo el coche en marcha, lo cual hizo que me agarrara al asiento.

-Es la primera vez que montó en un auto-expliqué al ver su ceja encarada.

-Bien-se acercó a mí, clavando sus pupilas en mis ojos y súbitamente sentí mis mejillas arder. Cogió lo que pensé que era el cinturón de seguridad y lo paso por mi cuerpo, lentamente, remarcando a veces mi figura-así nos evitamos problemas.

El coche se puso en marcha, alejándose y desdibujando mi prisión, mientras yo le echaba un último vistazo y me despedía de la vieja Juliet, la chica que había estado viviendo allí durante 18 largos años, sin salidas, sin libertad, asfixiada en su propia soledad. Despidiéndose del príncipe solitario y dándole la bienvenida a la plenitud, observando por el rabillo del ojo a mi preciosa serpiente plateada.

PD: Si, sé que he ido un poco rápido con la huida, pero como ya dije, no me apetecía mucho entretenerme en ello.

Editado 24 feb 2010 por Hinata_Nione

[Beelz 736]

Pues esta bastante bien >.< sigue pronto que aquí me tienes como otro fan

[Lenne 0]

Woow, perfecto como siempre, no me canso nunca de tus actualizaciones, siempre traen algo sorprendente <3.

[sara-sara 0]

pfff... que tus musas se han ido?? puues alguna te tiene que quedar eh? está increeible! me ha gustado mucho espero que no tardess tanto para la proxima!

[Cova 124]

Buenos días, princesa!

Volvi de mis vacaciones, asi que volvere a inspirarte con mis "strictis" tan sexys que te hago

Queremos mas Cyril (al menos yo, hahaha)

Siempre tuya,

Cova.

[NatayaTahir 0]

Si, lo sé, lo sé. He tardado siglos en actualizar, pero no he estado en casa últimamente y ya sabéis mi pequeño problema con mis musas (Cova, eres una musa de pacotilla, como Elena ¬¬). Bueno, no me lio más porque seguro que estais impacientes por leer!

Capitulo 43

Estaba embelesada observando todo el conjunto de sombras nocturnas desde el interior del coche. Era la primera vez que se subía a uno y no se había mareado en ningún momento, se hallaba demasiado ocupada aprendiendo de memoria las figuras desdibujadas que pasaban por su lado. Romeo no había abierto la boca en todo el viaje, dejando a su acompañante disfrutar de las vistas. Encendió la radio para que el silencio se evaporara y así prepararse mentalmente para lo que iba a suceder a continuación.

Reconoció su casa al momento, casi a las afueras de aquella ciudad. Paró el coche delante y Juliet lo miró sin entender nada.

-Es mi casa-indicó-vamos a hacer una parada.

Asintió despacio, incapaz de comprender porque Romeo necesitaba ir a su domicilio. Quizá quería coger algo de ropa o tal vez dinero. Con una amabilidad inusual en él, le abrió la puerta e hizo que saliera del coche.

-No hace falta coger tus pertenencias-le dijo cuando ella iba hacía el maletero.

Le siguió hasta que abrió la puerta y la hizo pasar a ella primero. Avanzó un par de pasos, hasta ver que dentro había tres personas, dos desconocidas y una que ya conocía a la perfección.

-¿Smily?-preguntó confusa. Aunque aquello no fue lo que más le impactó, que estuviera su mejor amiga allí era lo menos importante. Un chico se abalanzó sobre ella, estrujándola entre sus brazos. Ella se quedó quieta, rígida ante el contacto de una persona desconocida.

-¡Juliet!-exclamó su nombre alto y claro en su oreja. Tuvo que reprimir un grito, mientras que empujaba a aquél muchacho con delicadeza. Que supiera su nombre no le hacía ninguna gracia.

-¿Quién…quién eres?-le miró por primera vez a los ojos, de un marrón dorado iguales a los suyos. Su cabello también era idéntico y había jurado que la sonrisa que le brindaba aparecía en su rostro de vez en cuando.

-Será mejor que nos pongamos cómodos-sugirió una chica rubia, sentada en una silla lejana.

-Es mi hermana-le susurró Romeo-Vainille, Vainille Jean Brown.

Juliet ya se había dado cuenta de ese detalle al verla. Eran prácticamente iguales, como gemelos, aunque los ojos de Vainille repiqueteaban con amabilidad y no con frialdad.

-Siéntate aquí-le indicó el chico castaño-¡Eres exactamente como te imaginaba!-le dijo, mientras se sentaba a su lado.

-¿Te conozco? Y ¿qué haces aquí, Smily? No entiendo nada-su lado más racional, el que a veces la controlaba, le chillaba repetidas veces lo que su corazón realmente deseaba escuchar. No podía ser verdad que aquél muchacho castaño fuera su…no, imposible.

-Nos conocemos-aseguró él-mi nombre es Cyril, Cyril Lucian Doyle.

Y tras escuchar la última palabra, la que coincidía perfectamente con su apellido, el mundo entero se le vino abajo, sintió un puñetazo en alguna parte interna de su cuerpo, mas no desfalleció. Su hermano. Tenía un hermano. Un hermano perdido por ahí, del cual nunca le habían hablado, y que ahora se mostraba frente a ella, con el rostro preocupado por cómo le estaba afectando aquella noticia tan…bueno, tan revolucionara para su mente.

-¿Eres mi…?-respiró profundamente, reteniendo las ganas de salir corriendo y tragó saliva-¿…mi hermano?-preguntó al fin con un murmullo casi inaudible.

-Si-le confirmó con una voz pesada, grave, con atisbos de una ansia que no se imaginó.

-Mi hermano-musitó contemplando el suelo fijamente-mi hermano…

-¿Quieres un vaso de agua?-le ofreció con gentileza la hermana de Romeo.

-Por favor.

Se bebió el vaso en menos de un segundo, haciendo que se atragantara. Tosió un poco, notando las palmadas de Vainille en la espalda. Aún no lo acababa de asimilar, aunque él estuviera allí delante de ella, con sus mismos ojos, cabellos y sonrisa. Era imposible que su padre le hubiera ocultado algo tan importante como la existencia de un hermano. Y ahí es cuando comenzó a formular preguntas sin descanso. ¿Por qué su padre no le había dicho nada al respecto? ¿Por qué Cyril no había crecido con ella? ¿Estaría también su madre viva? ¿Qué hacia viviendo con la hermana de Romeo? ¿Y Smily? ¿Qué pintaba ella en todo el jaleo? ¿Era aquello una broma de mal gusto? Suplicaba que así fuera.

-Hay una explicación para todas esas preguntas que te estás formulando-le dijo Cyril sacándola de sus razonamientos.

-¿La hay? ¿Una explicación lógica y coherente?

-Por supuesto que la hay-y la miró de arriba abajo, sonriendo tristemente-somos muy similares. Excepto por las pecas, por lo demás…

-Ya lo creo-intervino por primera vez Smily-cuando vi a Cyril por primera vez supe en seguida que se trataba de tu hermano.

Juliet la miró sin verla, intentando digerir todo aquello y él “cuando vi por primera veza Cyril…”Siendo su amiga y conociendo la identidad de su hermano, ¿por qué no le había contado nada? ¿Por qué?

-Bien, Juliet. Prepárate, creo que lo que vas a escuchar no te va a gustar mucho.

[NatayaTahir 0]

Capitulo 44

Todos estaba en tensión, con los ojos fijos en la pareja que permanecía sentada en el sofá. Vainille había ido a preparar un poco de café, para ganar energía y ahuyentar el sueño. Romeo se mantenía apoyado en una pared, junto con Kaori. Cyril carraspeó un par de veces y comenzó su relato.

-Nuestra madre me explicó todo lo que sé y lo que te voy a contar ahora a ti. Nunca deseo casarse con nuestro padre, puesto que estaba enamorada de otro hombre, no obstante, sus padres la habían emparejado con el hijo de una mafia rival. Es muy común por estas ciudades unir a los hijos para unir mafias y así obtener más poder-inspiró aire y prosiguió-como si fueran de siglos pasados. Bueno, nuestra madre no ansiaba casarse con el hombre que llamamos padre. Pero tuvo que hacerlo, renunciando a su primer amor, que ella consideró el verdadero.

-Era una mujer de cuerpo débil y casi siempre acababa con fiebre en una cama, sin poder moverse durante semanas e incluso meses. Sin embargo, nada de esto le impidió quedarse embarazada de un hombre por el cual no sentía nada, ni tan siquiera respeto. Todos los médicos le dijeron que era mejor que abortase, que no me tuviera, pero no renunció a mí, creyendo firmemente que sería el objeto perfecto con quien derramar todo el amor que la consumía por dentro. Además, debía darle a nuestro estimado progenitor un heredero y si no servía para tener hijos, le caería la desgracia de ser repudiada, siendo una vergüenza para todo el mundo-miró a Juliet y le agarró la mano firmemente, sin titubear-tras un embarazo difícil, junto con un parto peor, nací yo, el heredero varón que tanto anhelaba nuestra familia.

-No recuerdo mucho sobre mis primeros pasos, pero sí recuerdo como nuestra madre se le hinchó la barriga cuando cumplí los cinco años, como me contaba que de ahí dentro saldría un hermanito o hermanita para jugar conmigo-una sonrisa nostálgica surgió de sus labios y miró a Juliet con estima-mi pequeña hermana, Juliet Clarette Doyle.

Ella, lentamente procesaba la información que escuchaba relatar a la persona que ahora debía nombrar “hermano”. Aquella palabra aún estaba muy lejos de sonarle real, a pesar de que Cyril estaba allí con ella, agarrándole la mano para que no desfalleciera. En un lugar recóndito de su mente todavía quedaban resquicios de que todo aquello era una broma cruel, muy cruel. Eso o era un sueño. Y pensar que creyó seriamente que al despedirse de su encierro todo iba a ir mejor…

-Sin embargo-la voz cambió a un tono más ensombrecido, triste-nuestra madre descubrió muy pronto tu destino. Él mío era transparente, claro, era el heredero de todo. Me casaría con alguna chica de alguna familia poderosa y así expandiríamos el “reino”. Nuestra madre no estaba de acuerdo con aquello, no quería pensar que su pequeño, su hijo primogénito se convirtiera en una persona tan horrible como su esposo. Así que cuando descubrió que te había prometido con un hombre mayor con tan solo 2 años, decidió ponerse en marcha y modificar el rumbo de nuestro destino. Tardó un año en planearlo todo, confiando ciegamente en su sirviente más fiel-tragó grueso y dirigió la vista al suelo, perdido en palabras que su progenitora le había relatado tantas veces-pero este la traicionó y le contó todo a…

-Padre-musitó Juliet, que había ido perdiendo el color del rostro poco a poco.

-Exacto.

-Entonces, ¿cómo logró escaparse? ¿Por qué tú estuviste fuera y yo encerrada? ¿Por qué me mintieron?-preguntó siendo más veloz su lengua que su cerebro.

-Madre intentó escapar con los dos, no obstante, ese maldito cabrón-no pudo reprimir la palabrota-la amenazó con asesinar a su primer amor.

-¿No había renunciado a él?

-Eso no significa que no siguiera amándole como hacía. Ella misma me dijo que padre siempre estuvo furioso con ella por ese tema, porque no conseguía sacarse a ese hombre de la cabeza, a la persona que nunca dejó de amar, para poder quererle a él, aunque fuera un poquito-dio un largo suspiro, cargando de algo que Juliet no supo identificar y le apretó la mano.

-Pero aún así…si tú te fuiste con ella, significa que siguió adelante… ¿no?-y ahí se sintió traicionada por su propia madre, por la mujer que había arriesgado su débil salud para que naciera, porque la había abandonado a su merced, siendo prisionera durante largos 18 años, con su futuro ya firmado con tan solo 2 años de edad.

-No la odies-le suplicó Cyril al ver como su rostro se transformaba en una mezcla de rencor y desdén-ella quiso llevarte también, pero no lo logró. Estuvo toda su vida culpándose por ello, por resignarse a no salvarte.

Juliet se mordió el labio, gesto que no le paso desapercibido a Romeo y supuso que estaba nerviosa o incomoda, hasta que vio como sus ojos adquirían un brillo acuoso.

-Basta por hoy-musitó ella, deshaciéndose de la mano de su hermano que la tenía cautiva-mañana, cuando haya asimilado todo, podrás seguir-se levantó del sofá y miró a su amiga-y tu ya me revelarás porque conoces a Cyril.

Notando los ojos de todos los presentes puestos en ella, salió de la casa para aventurarse al jardín trasero y así poder pensar mejor en todo lo que aquella noche le había revelado.

Cansada, descubriendo que su vida se resumía en parte en una gran mentira y que su madre la había condenado a ese lugar llamado hogar, conviviendo día tras día con una soledad inmensa que le carcomía por dentro, sin atreverse a ir a buscarla, se dejó vencer por la impotencia y su espalda resbaló por toda la pared, hasta quedarse sentada en el suelo, abrazada a ella misma con cierta lagrima lamiendo su mejilla.

[NatayaTahir 0]

Capitulo 45

No sabía con exactitud cuánto tiempo había transcurrido desde que estaba allí, hecha un ovillo, dándome fuerzas a mi misma, mientras luchaba por retener mis lágrimas en mis ojos, donde debían estar. ¿Para qué llorar por algo pasado? ¿Para qué malgastar energías? No atinaba a describir todos los sentimientos que componían mi interior en aquél instante, clavándose como cuchillos de acero en mi corazón, desgarrándome la razón. Mentira, era lo único que lograba entrever entre todo el revoltijo de sensaciones.

-No debería haberme escapado-concluí agotada, indispuesta a pensar más.

-Espero que estés bromeando-musitó una voz cerca de mí, y me giré para verle allí de pie, recostado en la pared, serio.

-¡Qué susto me has dado!-exclamé con la mano en el pecho-no vuelves a hacer eso.

-No es culpa mía que no hayas notado mi presencia.

-No es culpa mía que seas silencioso como una serpiente-suspiré, tornando mi vista al césped. Mis ganas de discutir eran nulas.

No replicó nada, para mi total asombro y de verás que se lo agradecí. Aunque su aparición había hecho que me sintiera más protegida, más segura.

-¿Estás bien?-susurró inaudiblemente y me sorprendí al ver que estaba, en cierta manera, preocupado por mí.

Respiré hondo, sacudiéndome la ropa fui levantándome poco a poco hasta encontrarme con su mirada, de un gris oscurecido por la poca luz nocturna. Intenté leerla, concentrada en saber que pensaba y adiviné que si estaba preocupado y también, ansioso aunque no entendí porque.

-Tras descubrir que tengo un hermano mayor, que mi padre me mintió al decir que mi madre había muerto en mi parto y que ella misma me abandonó cual juguete roto para no volver a buscarme, diría que estoy bastante entera-respondí un poco irónica, ocultando las terribles ganas de llorar, de pellizcarme para confirmar que aquello era solo una pesadilla y que no tenía fuerzas para seguir escuchando a Cyril.

Y en ese momento en el cual me mostraba fuerte, prohibiéndome a mi misma el agua que amenazaba con salir de mi lagrimal en cualquier momento, Romeo se acercó a mí con paso perezoso y me rodeó con sus brazos, estrujándome contra él con fuerza. Acarició mi cabeza con su mano enorme y varonil, impregnando toda mi ropa de su particular olor, ese aroma que siempre hacía que renunciara a mi mente y mis sentimientos fluyeran sin control. Y así, agarrándome a su camisa con un temblor que odié, lloré sobre su pecho, al principio con leves sollozos hasta aumentar los quejidos y hacer que mi garganta se destrozara por cada grito lastimoso que surgía de ésta. Él me apretaba cada vez más, besando mi frente, mis cabellos castaños, hasta que me calmé un poco y me retiró para poder contemplarme.

-Eso está mejor-me dijo y borró todas mis lágrimas, desperdigadas en desorden, esparcidas por toda mi mejilla, con sus labios fríos al tacto. Y cubrí mis ojos con las tinieblas, donde depositó un beso en cada parpado y sonreí.

-Gracias-musité aún con los ojos cerrados-gracias.

Un suave beso se implantó en mis labios. Nada tenía que ver con los antiguos besos, que eran brutos y posesivos. Este era dulce, dócil, donde no me exigía nada, donde me lo otorgaba todo. Acunó mi cara con sus firmes manos, besándome con una calma exquisita, haciendo que cada latido de mi corazón suspirara por él, que nombrara su nombre. Cuando se retiró, poco a poco, abrí los ojos y él sonrió. Pero no una sonrisa altiva o burlesca, de medio lado, sino una sonrisa autentica, sincera, feliz. Por primera vez le veía sonreír de aquella forma tan plena, tan infantil y mi pecho se hinchó con una paz serena que hizo que me olvidara de todo.

-Es hora de irse a dormir-anunció, cogiéndome de la mano por segunda vez en lo que iba de noche y asentí, risueña.

Entonces me pregunté qué importancia tendría el ayer si lo que realmente importaba era el hoy, el vivir el presente. ¿Qué más daba si mi madre no hubiera ido a mi rescate? Si hubiera escapado con ella, no conocería a Romeo y mi vida no hubiera resultado ser tan llena, porque gracias a él quería seguir hacia adelante, porque le amaba y solo ansiaba que él me respondiera de la misma forma intensa y pasional que yo guardaba en mi interior.

PD: Oooooh~~

[Cova 124]

OOOOOOOOOOOOOOOOOIX

Yo creo que es la primera vez que me cae minimamente bien Romeo (y ya tiene merito eeh...)

y bueno, yo teniendo un hermano asi, ni me quejaba (Comparado con el idiota que tengo en casa.. )

AH! Y no soy una musa de pacotilla!

Pasa que...ya no te inspiran mis strictis como antes, nose que debere hacer ahora.. T^T

PD: CYYYYYYYYYYRIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIL VEN CONMIGO AMOOOOOR (L)

Siempre tuya,

Cova :3

[sara-sara 0]

OOOOOOOOOOOHHHHHHHHHHHHH!!!!!!

romeo se a vuelto un sensiblero totaall! jajajajajaaj pero me encantaa!! poorr fiiin se va descubriendo toooda la verdad!

[neala 0]

Ooooohh ajajaa xd aver si actualizas mas seguido mujer que ahora esta todo interesante 77 me a gustado mucho ;D

[Vampire 6]

Me acabo de unir! Me encanta la hist! Eres una profesional jeje! Quisiera pedirte que por favor pongas a descargar los personajes y los escenarios estan muy bien elaborados! Todo en la historia es hermoso! La trama, la redaccion, los ambientes el elenco todo es perfecto! Se nota que te has dedicado!

[NatayaTahir 0]

Dios, llevo sin pasarme por aqui minimo un mes! UN MES! Bueno, se que me odiareis mucho (yo tambien me odio a mi misma) pero sinceramente, no he tenido mucho tiempo para actualizar, y cuando tenia tiempo libre me daba un poco de pereza (la inspiracion se va con el estres...T_T). Prometo actualizar pronto! (espero que la semana que viene pueda), sin embargo, ahora me tengo que concentrar en selectividad y todo ese rollo aburrido de estudiar, estudiar, estudiar y acabar con un paro al corazon a causa de los nervios.

Sinceras disculpas a todos aquellos que me leeis y esperais una actualizacion, seguro que despues de tanto tiempo me habreis mandado a tomar.....lejos, muy lejos. LO SIENTO!!!!

[sara-sara 0]

Lo cierto es que ya pensaba que no ibas a volver a escribir por aqui!! jaja peroo se te perdona!

naah.. ya enserioo!! no pasa nada! yo te entiendoo... tambien tengo este año la selectividad y creo q me voy a volver loca! no he visto tanto examen junto en toda mi vida!y creo que no exagero eh? es agobiante y muuuuuy estresante! peroo... es lo que toca! asique no te preocupes! cuando tengas tiempo actualizas ( si puede ser prontito mejor )

[EverKris 0]

Tranquila,que te perdonamos,los estudios son lo primero :)

Pero actualiza prontito,que nos tienes aquí en vela xdd

Ah,y mucha suerte con la selectividad!