Historia cancelada A Y A, CAPRICHOS DEL DESTINO. DIARIO DE AMANDA.

[sandru25 0]

como siempre un capitulo estupendo,cada dia me gusta mas esta historia.Estoy deseando de ver el cambio de amanda.Estuvo genial este capitulo

Muchas gracias por tu comentario , no sabes cuanto lo necesitaba ya jeje me empezaba a desesperar de ver como otras historias tienen muchos comentarios menos la mia y me rallo pensando que no gusta y estoy perdiendo el tiempo para nada sobretodo cuando el ultimo capitulo que he subido de ambos diarios es uno de los que mas me he currado y mas ilusion le he puesto para que sea especial y os guste, pensaba que se comentaria mas aunque ya he visto que ultimamente hay muy poco movimiento por el foro en general, supongo que siendo epoca de examenes es normal. De todos modos me alegra saber aunque solo sea con tu opinión que vale la pena. Casi seguro que el lunes actualizare el diario de Amanda (con video) así que no os haré esperar mucho para verlo . Besitos.

[Diablilla 5]

Sadru no te preocupes.

Hay gente que lee pero no comenta.

Yo me he estado leyendo todos los capitulos,pero no me ha dado tiempo a comentar.

Yo estoy segura que tu histo la sigue mucha gente solo que no comentan Xd.

Por cierto el ultimo capi ha estado muy chulo

[sandru25 0]

Sadru no te preocupes.

Hay gente que lee pero no comenta.

Yo me he estado leyendo todos los capitulos,pero no me ha dado tiempo a comentar.

Yo estoy segura que tu histo la sigue mucha gente solo que no comentan Xd.

Por cierto el ultimo capi ha estado muy chulo

Vaya pues muchas gracias por comentar y por tu tranquilizador mensaje. Espero que realmente sea así. Gracias por seguir mi historia, me alegra mucho saber que te sigue gustando.

[Patri 1]

Buen capitulo Seguro que Amanda esta guapisima.Bueno tengo ganas de leer el segundo capi.Besitos sandru25

[sandru25 0]

Gracias por el comentario Patri, no os hago esperar mas y aqui esta la segunda parte del capitulo, espero que os guste.

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No dejaba de mirarme de arriba de abajo, con la boca abierta aún.

Amanda: Hola Arturo.

Arturo: (Silencio)

Juanjo: Arturo hijo, estás alelado, que te están esperando. Ay qué hijo tengo… yo me voy a la cocina ayudar con la cena, que os lo paséis bien.

Amanda: Gracias, lo haremos.

Juanjo: Y ya sabes a qué hora tienes que llegar, ni un minuto más.

Arturo: Ni uno menos.

Amanda: Vaya si hablas y todo, ¿estás bien?

Arturo: Sí… sí… tranquila estoy bien. Es que estás… estás…

Amanda: ¿Estoy…?

Arturo: Lo siento, no sé ni que decir, me has dejado sin palabras. Estás tan… diferente.

Qué bien, me he pasado la mañana probándome trapitos, gastándome el dinero en ropa, zapatos y maquillaje, pasándome casi dos horas arreglándome para estar… ¿diferente? ¡No me jodas! Se supone que debería estar deslumbrante no diferente. ¿Qué le pasaba? Se quedó alucinado cuando me vio, ¿Por qué sus reacciones y sus palabras no iban igualadas? Esperaba que fuese cosa de timidez sino menuda me esperaba.

Arturo: Siento haberte hecho esperar.

Amanda: Tranquilo no llevaba mucho.

Arturo: Menos mal. Los chicos me pasaron a buscar esta tarde para ir a los recreativos y se nos hizo un poco tarde jugando al póquer.

Amanda: ¿Los chicos pasaron a por ti?

Arturo: Sí, me pilló por sorpresa pero me gustó mucho su visita, la tarde estuvo bien.

Amanda: Pues qué bien, no sabía nada, ni que supieses jugar al póquer tampoco, espero que por lo menos ganases.

Arturo: ¿Lo dudabas?

Amanda: La cara que se les debió quedar, sobretodo a Lucas que no le gusta perder ni a las chapas.

Arturo: Bonita moto. ¿Y este garaje es vuestro?

Amanda: No, que va, lo tiene mi madre alquilado para guardar la moto ya que me la robaron una vez.

Arturo: Vaya, creía que era un pueblo tranquilo y seguro.

Amanda: Y lo es, pero siempre está la excepción que rompe la regla, y más cuando vienen turistas.

Arturo: Pues menos mal que la pudiste recuperar.

Amanda: Pues sí, ¿estás listo? Nos vamos.

Arturo: Listo.

Amanda: Pero agárrate fuerte a mí hombre que no muerdo, a ver si te voy a perder por el camino.

Arturo: Falta de costumbre de ir en moto.

El ir en moto fue la escusa perfecta para romper el hielo y que Arturo me abrazase aunque noté que estaba algo nervioso, no me abrazó muy fuerte aunque tampoco fui muy deprisa como para dar pie a ello ya que no corro nunca con la moto, y nada más llegar enseguida me soltó.

Cuando llegamos al burguer ahí estaban ya esperándonos, el chofer de Yolanda corre más que yo jeje

Le dije a los chicos que nos contaran que tal les había ido la tarde por los recreativos, Arturo nos explicó la metedura de pata de Lucas, cuanto nos hemos reído a su costa, es un caso perdido.

Clara: ¿Y que Lucas les has ganado en algo?

Toni: Que va, no ha podido con nosotros en nada, no era su día.

Lucas: Pero que dices, si os he dejado ganar.

Yolanda: Ya, ya… no te lo crees ni tú.

Arturo: Al futbolín hemos quedado empatados Toni y yo, pero al póquer he ganado con diferencia.

Lucas: ¡Pero si sólo hemos hecho una!

Toni: Sí, y nos ha metido un palizón que no veas, hasta al viejo que estaba jugando con nosotros.

Lucas: Nada nada que quiero la revancha a ver si puede conmigo.

Arturo: Cuando quieras y donde quieras, estaré encantado de volverte a ganar.

Al fin nos trajeron la comida, en ese burguer hacen bocadillos muy buenos. Yo me pedí la hamburguesa de pollo que me cojo siempre igual que Lucas, Arturo y Toni la hamburguesa super especial de la casa, Clarita un Frankfurt y Yolanda un biquini.

Mientras terminábamos de cenar improvisamos pasar por el karaoke antes de ir al Rainbow para hacer un poco de tiempo ya que tan pronto aun no hay mucho ambiente por allí, de ese modo también dábamos tiempo a Braulio, el chófer de Yolanda, a que pasara a recogerles puesto que el karaoke esta a dos manzanas de allí y podemos ir andando perfectamente. La disco pilla bastante más lejos.

El karaoke tiene dos salas especiales que se alquilan para fiestas y celebraciones privadas pero si no tienen ninguna quedan disponibles para el público. Hoy por suerte no estaban ocupadas y nos cogimos una. Clara quiso cantar una canción con uno de los chicos pero a Toni no le apetecía y a Lucas tampoco aunque Yolanda logró que cambiara de opinión advirtiéndole de que no le dejaría copiar mas los deberes mientras esperan a que nosotros lleguemos en el autobús. Cuando terminaron la canción Clara intentó convencer sin éxito a Arturo para que cantase una conmigo pero pidiéndoselo yo y al no haber nadie más que nosotros en la sala no me pudo decir que no.

“Colgando en tus manos” de Carlos Baute y Marta Sánchez empezó a sonar.

No canta mal del todo, tiene una voz muy bonita. Ambos nos dejamos llevar mucho por la preciosa canción. Han sido dos minutos muy bonitos y muy especiales.

Clara y Yolanda no hacían más que mirarnos embobadas como cuando ves el final de un cuento de hadas. No puedo quitarme ese momento de la cabeza. Cierro los ojos y me parece estar viviéndolo de nuevo.

Cuando el chófer de Yolanda pasó a por ellos Arturo y yo nos fuimos para el Rainbow. Aparqué la moto en el parquin y fuimos para la entrada.

Allí estaban ya esperándonos.

Toni: Que Arturo ¿te esperabas así el Rainbow?

Arturo: No me lo había planteado la verdad. ¿Se llama así porque la fachada es de colores?

Toni: Espera verlo por dentro.

Amanda: Habéis llegado muy rápido.

Yolanda: Braulio ha cogido un atajo por otro camino.

Amanda: Ya me parecía a mí.

Clara: ¿Entramos o que?

Lucas: Eso que parecemos panolis aquí fuera.

Entramos al local que como de costumbre estaba custodiado por el musculoso portero pero como ya nos conoce no nos pide el carnet

Nos dirigimos a la barra y mientras Clara hablaba vete a saber de que con Arturo yo le contaba a Yolanda todo lo que las dos hicimos por la mañana, los trapitos que vimos, los zapatos… todo eso.

Al cabo de un rato fui al baño, no aguantaba más la meadera.

Cuando salí también estaban ahí Clara y Yolanda, para que después digan que si las chicas vamos en pareja al baño. No es que vayamos, es que nos encontramos.

Sin embargo el que ambas estuvieran allí no parecía una coincidencia, enseguida me imaginé que aquello era un momento CCCF, confidencias cotilleos chicos fuera.

Amanda: ¿Clara tú estás segura de que la chica de quien te habló Arturo soy yo?

Clara: Pues claro que estoy segura.

Amanda: Pues yo por más que lo pienso no lo tengo nada claro, tengo muchas dudas.

Clara: Dudas… dudas… así te va. ¿No has visto la química que había entre vosotros cuando cantabais? Si nos habéis puesto la piel de gallina y los pelos de punta.

Yolanda: Ha sido verdaderamente mágico.

Clara: Que más prueba quieres hija, tienes que pasar a la acción.

Amanda: ¿A que acción sino muestra ninguna señal?

Yolanda: Dale tiempo mujer, el chico ha salido un poco tímido.

Clara: Utiliza tus armas de mujer, lánzale tú las señales entonces, a ver si viendo algo se anima.

Amanda: ¿No has visto cómo voy vestida hoy? que todos los tíos se me quedan mirando. Qué más tiene que ver.

Yolanda: ¿No ha dicho nada cuando te ha visto?

Amanda: Si, claro que ha dicho, que estoy DIFERENTE. ¿os lo podéis creer? Se me queda mirando media hora boquiabierto e inmóvil y solo me dice que estoy diferente.

Clara: No seas tan exigente hija, si se ha quedado tan pasmado es que no le has dejado indiferente y eso es lo importante. Amanda: Espero que tengáis razón…

Nos pedimos unos cócteles y nos sentamos para estar más tranquilos ya que la barra empezaba a llenarse.

Amanda: ¿te apetece bailar?

Arturo: ¿Bailar? Mmm no.

Amanda: Venga será divertido, anímate.

Arturo: No me gusta bailar ni se me da nada bien, prefiero los toros desde la barrera.

Amanda: Como quieras.

Amanda: A ver dónde vamos el fin de semana que viene que tenemos algo muy importante que celebrar.

Arturo: ¿Algo muy importante?

Lucas: Claro, la paliza que te voy a meter en el póquer.

Arturo: Tú me meterás una paliza en el póquer pero yo te voy a ganar jugando al póquer chaval.

Clara: Los mayores estamos hablando en serio Lucas, eres peor que un niño pequeño.

Arturo: ¿Y que se tiene que celebrar?

Lucas: Eso, ¿que es eso tan serio que se tiene que celebrar?-dijo con tono entre burlesco e irónico-

Toni: El cumple de Amanda tonto que es el jueves.

Lucas: ¿Ya? ¿Otra vez?

Amanda: Si Lucas, tengo la extraña manía de celebrarlo una vez al año.

Lucas: Que ya lo sabía tonta, como se me va a olvidar.

Hablando un poco de mi cercanísimo cumple y de la fiestecita que iba a montar en casa me quedé sin bebida así que fui a la barra a por otra.

Allí me encontré, o mejor dicho me encontró a mí, una desagradable sorpresa. Julio, el chico con quien estuve tonteando hacía unas semanas y al que dejé plantado por pesado. No solemos salir de fiesta en verano cuando no están los chicos ya que no les hace mucha gracia por si nos pasa algo porque no pueden protegernos. Son muy protectores pero en el fondo eso me alaga, son tan monos… El caso que una noche nos apetecía salir y pensamos que tampoco se iban a enterar. Fue entonces cuando le conocí. Parecía muy simpático. Me sacó a bailar y nos pagó todas las copas de la noche. Quedamos al día siguiente en el parque. Allí nos intercambiamos los números de teléfono y nos pagó un montón de chuches, patatas, refrescos, chocolatinas y revistas. Sin embargo resultó un pesado, no hacía más que hablar hablar y era un egocéntrico. Habíamos quedado de nuevo en el Rainbow a la semana siguiente pero no acudí. Tampoco le llame ni respondí sus llamadas. Creí que nunca más le vería ya que estudia fuera. Parecía absurdo pero en vez de pasar de mí por ignorarle ahí estaba recriminándome mi actitud. Parece que a parte de pesado y egocéntrico también era tonto.

Julio: Así que solo me utilizaste para pagarte a ti y a tus amigas vuestros caprichitos.

Amanda: No no no, nosotras no te pedimos nada eh, tu quisiste comprarnos, eso es problema tuyo.

Julio: ¿Por qué no acudiste a la cita?

Amanda: No pude, me salió un compromiso ineludible.

Julio: ¿Por qué no me llamaste?

Amanda: Perdí tu número.

Julio: ¿Y porque no contestaste mis llamadas?

Amanda: No sabes pillar las indirectas bien directas o que.

Julio: Ahora ya no puedes escapar de mí. Tenemos una cita pendiente y vas a cumplirla.

Amanda: Tú estás loco, ni en tus sueños voy a salir contigo.

Julio: Tú vas a salir conmigo porque lo digo yo y punto.

Amanda: Punto seguido porque yo te digo que no, y punto final.

Julio: ¡¡Eh que haces!! ¡¡Estás loca!!

Toni: ¿Algún problema con la chica?

Amanda: No te metas Toni, ¡y tú olvídame, plasta insoportable!

Julio: Eso Toni, tú no te metas que nadie te ha llamado.

Toni: Me meto porque me da la gana.

Julio: ¿Acaso eres su novio o qué?

Toni: No, soy su amigo ¿y qué?

Amanda: ¡Déjanos en paz!

Julio: Té dejaré en paz cuando me des una buena razón por la que no podemos salir juntos.

Amanda: Pues no podemos salir porque… porque…

No sabía que decirle, estaba pensando alguna escusa convincente cuando de repente me sentí cariñosamente rodeada por unos brazos. No sabía quien era, no había visto acercarse hacia nosotros a nadie, sin embargo un escalofrío recorrió mi cuerpo y un cosquilleo invadía mi estómago. Sonreí sin saber aún de quien se trataba pero con la intuición y el fuerte deseo a la vez de que fuera la única persona que yo deseaba que fuese.

Arturo: ¿Por qué tardas tanto cariño? Me tienes abandonado. ¿Bailamos?

Amanda: Sí, claro.

Amanda: Creí que los toros te gustaban desde la barrera. –dijo irónica-

Arturo: No me lo recuerdes, es lo primero que se me ocurrió.

Amanda: Jejeje Pues ha estado bien, le dejaste sin palabras.

Arturo: No te rías anda, a ver si opinas igual después del bailecito, menuda vergüenza.

Amanda: Venga no puedes ser tan malo, tu déjate llevar por la música, lo importante es divertirse y no estás solo, estamos juntos en esto.

Arturo: Parezco un pato mareado cuando bailo, aunque por lo menos lo voy hacer con la chica más guapa del local.

Amanda: ¿Me estás piropeando?- dijo alagada-

Arturo: Solo trataba de consolarme, era un simple comentario.-tratando de disimular-

Amanda: Ah, vaya, pues que lástima.-contestó con segundas-

Arturo: ¿Lástima?

Amanda: Era un simple comentario. –dijo en tono irónico-

Amanda: ¡Ves como no lo haces mal exagerado!

Arturo: ¿Seguro que no me estás tomando el pelo?

Amanda: Claro que no, lo digo en serio, me lo estoy pasando muy bien.

Arturo: Me alegro, yo tengo que confesar que también.

Mientras bailábamos pude oír a Clara, que estaba con Lucas bailando en las tarimas, como le gritaba algo al dj, aunque no pude oír el que. De repente la música pasó del típico chumba chumba a una preciosa balada. No se porque me daba que acababa de averiguar el mensaje de Clara al dj. Arturo y yo nos quedamos un poco cortados ante tan espectacular cambio musical.

Arturo: Bueno mejor paramos ¿no?

Amanda: No, ¿Por qué?

Arturo: ¿Quieres bailar esto?

Amanda: ¿Y porqué no?

Arturo: Porque esto si que no lo he bailado nunca y te aseguro que tus pies se pueden arrepentir mucho.

Amanda: Venga exagerado que seguro que no me pisas tanto, además yo tampoco lo he bailado nunca así que puede que estemos empatados a pisotones.

Arturo: Bueno si es algo nuevo para lo dos… y te hace tanta ilusión… pero que conste que te lo advertí.

Arturo: Pues parece que no lo hacemos tan mal.

Amanda: Ya te dije que solo hay que dejarse llevar por la música. ¡Au!

Arturo: Lo siento, eso me pasa por hablar.

Amanda: Tranquilo, valen la pena.

Arturo: Estás haciendo que está noche me lo pase muy bien, lástima que ya quede poco.

Amanda: Bueno otra semana más aunque espero que no me tenga que pelear con nadie para que me saques a bailar…

Arturo: Ya veremos como te portas.

Amanda: Que tonto eres.

Arturo: Creo que esta música no gusta mucho.

Amanda: La canción es preciosa, ¿por qué lo dices?.

Arturo: Pues porque tenemos toda la pista para nosotros solos.

Amanda: Son todos una panda de sosos, no saben lo que es bueno.

Arturo: Pues sí, a ver una vueltecita… que eso lo he visto en una peli.

Amanda: Si al final vas a resultar un buen bailarín, hasta llevas rato sin pisarme.

Amanda: Gracias por quitarme de encima al pesado ese.

Arturo: No está bien hacer enfadar a tu medio hermano, ya veremos si a él se le olvida tan rápido, porque se mosqueó bastante, pero a mí no me lo agradezcas, es lo menos que puedo hacer por ti, vi que lo necesitabas y no lo dude. Somos amigos ¿recuerdas? puedes contar conmigo para lo que sea.

Amanda: Muchas gracias, ya sabes que tú también. Espero que el precio que has tenido que pagar por sacarme de la barra no haya sido muy alto.

Arturo: ¿Alto? Creo que ahora mismo soy el chico más afortunado que hay aquí.

Amanda: ¿Eso que es? ¿Otro simple comentario?

Arturo no me contestó a esa pregunta, solo me sonrió, aunque realmente no era una pregunta de la que esperase contestación ya que más bien la hice en sentido irónico puesto que la respuesta era bastante evidente. No hacíamos más que mirarnos fijamente y sonreírnos. La magia del karaoke de la que hablaba Yolanda estaba presente ahí, solo que esta vez era silenciosa. Podía sentir encima de mí la mirada de mis dos buenas amigas, sin embargo no me importaba, ni eso ni nada, sólo me dejé llevar por el momento y trate de relajarme y disfrutar lo máximo posible.

Estaba realmente a gusto, abrazada a él, sintiendo su olor, con sus brazos rodeándome y tan juntos los dos. Solo tenía un poco de pena de que el momento ya llegaba a su fin, tanto la canción como la noche, traté de disfrutar hasta el último segundo y coloqué mi cabeza sobre su hombro dejándome llevar cada vez más por el momento.

Desgraciadamente la canción se terminó y volvimos a la barra donde estaban nuestros amigos tomándose la última. Me dirigí a mi amiga Clara y le susurré al oído.

Amanda: Te voy a matar, pero GRACIAS.

Arturo y yo nos tomamos también la última copa, insistió en invitarme.

Nos despedimos de los compis y nos fuimos a casa.

Dejamos la moto en el garaje y nos paramos delante de la puerta de casa.

Amanda: ¿Te lo has pasado bien?

Arturo: Mucho, ha sido una noche genial.

Amanda: Así que vas a querer repetir.

Arturo: Lo estoy deseando, y más si la semana que vine se celebra tú cumple, habrá que pensar un buen plan.

Amanda: Tenemos toda la semana por delante para ello.

Amanda: Aunque… si te animas a cantar y a bailar conmigo… no me importaría repetir la noche de hoy.

Arturo: No te acostumbres… no te acostumbres… lo de hoy ha sido porque creo que la super especial esa llevaba alguna seta alucinógena de esas o algo.

Amanda: Jejeje ¿qué dices?.

Arturo: Pues eso, que me lo he pasado muy bien pero yo no acostumbro hacer esas cosas, canto fatal y bailo como un pato mareado. Entiéndelo, es protección, por el bien de la humanidad.

Amanda: Te voy a colgar en la frente un cartel que ponga exagerado, ahí con mayúsculas y todo.

Arturo: ¿Exagerado yo?

Amanda: Si, y mucho. Has cantado bastante bien, Lucas lo ha hecho peor.

Arturo: Si bueno, eso es verdad jeje

Amanda: Y has bailado como un pato pero sin estar mareado.

Arturo: ¿Y eso es bueno o malo? No se si tomármelo como un alago o como un insulto

Amanda: (Bostezo)

Arturo: ¿Te aburro?

Amanda: ¡Que dices tonto! Es que tengo sueño.

Arturo: Si bueno yo también estoy algo cansado. ¿ves como no es bueno bailar tanto?

Amanda: Si claro eso va a ser, seguro que no tienen nada que ver el montón de patadas y puñetazos que le metiste esta mañana al pobre saco.

Arturo: ¿Me estuviste mirando como entrenaba?

Amanda: Eh… yo… ¡No! Solo te vi de refilón –dijo tratando de disimular-

Arturo: Bueno será mejor que me vaya.

Amanda: Sí, estás a punto de pasar el minuto de más que no podías pasar.

Arturo: Mi padre habla mucho pero ahora mismo estará sobando.

Nos quedamos mirando como bobos, callados, en un momento de esos que en las pelis son mágicos y los personajes empiezan a acercarse lentamente hasta que se besan tiernamente. Sin embargo estaba empezando a ser algo extraño. Hubiese sido el broche final e ideal a la preciosa noche y, aunque lo hubiese deseado, parece que él no pensaba lo mismo. ¿Quizás era la timidez de nuevo, o no le había lanzado suficientes señales? Supongo que será mejor así, yendo despacio y disfrutando más cada momento.

Sin embargo la noche debía terminar de manera bonita, me resistía a un simple hasta mañana o buenas noches. Todas esas frases de cordialidad me parecían pocas así que mientras le decía que descansara me acerqué a él le di un beso en la mejilla.

Creo que le pillé un poco desprevenido ya que solo balbuceo tembloroso un sí. Espero que vaya tomando nota de las señales y sirvan para algo. No hace nada que nos hemos despedido y ya estoy deseando estar con él de nuevo. Es tan simpático, divertido, agradable, humilde y parece tan sensible y tierno aunque a veces vaya de duro... Creo que Amanda Montero está empezando a enamorarse de su nuevo vecino.

CONTINUARA... MUY PRONTO

Editado 18 may 2009 por sandru25

[monivict 0]

El capitulo estuvo genial y Amanda guapisima,vaya cara que puso arturo,fue buenisimo igual q el video,me encanto

Estoy deseando de ver el siguiente capitulo cada vez esta mas interesante.

Cuando pongas a descargar el supermercado preguntale a diablilla o patri como se descarga prque yo no tengo ni idea,nunca he empaquetado nada para ponerlo a descargar y seguro que ellas lo saben mejor que yo.besitos :)

[Patri 1]

Muy buen capitulo Tengo muchas ganas de que Amanda o Arturo se digan ya la verdad!!

Pero bueno,veremos en el proximo capitulo.Besoss

[sandru25 0]

Gracias por los comentarios, me alegro que os haya gustado el capitulo. Monivict estoy teniendo algunos problemas, esta tarde cuando entre en el juego espero poder solucionarlo gracias a la ayuda de psusenas y a ver si puedo empaquetar el supermercado, de momento tengo que intentar no perder a los personajes y su casa o me da algo. Ahora voy a actualizar el diario de Arturo, la segunda parte del sabado, el domingo lo tengo medio listo asi que supongo que el lunes podre subir el de Amanda y el miercoles o asi el de Arturo, ya lo siguiente depende de como solucione el problema con el atasco en el super pero espero poder arreglarlo pronto y bien y no hacernos esperar mas de lo normal ya que ahora es cuando empezara la cosa a ponerse poco a poco interesante, hasta ahora ha sido un poco mas "tranquilo" ya que era para conocer un poco a los personajes, su personalidad y sus rutinas. Saludos.

[monivict 0]

Gracias por los comentarios, me alegro que os haya gustado el capitulo. Monivict estoy teniendo algunos problemas, esta tarde cuando entre en el juego espero poder solucionarlo gracias a la ayuda de psusenas y a ver si puedo empaquetar el supermercado, de momento tengo que intentar no perder a los personajes y su casa o me da algo. Ahora voy a actualizar el diario de Arturo, la segunda parte del sabado, el domingo lo tengo medio listo asi que supongo que el lunes podre subir el de Amanda y el miercoles o asi el de Arturo, ya lo siguiente depende de como solucione el problema con el atasco en el super pero espero poder arreglarlo pronto y bien y no hacernos esperar mas de lo normal ya que ahora es cuando empezara la cosa a ponerse poco a poco interesante, hasta ahora ha sido un poco mas "tranquilo" ya que era para conocer un poco a los personajes, su personalidad y sus rutinas. Saludos.

Espero que arregles pronto el problema y que no sea nada importante para poder seguir disfrutando de la historia, que bien que se ponga mas interesante el argumento pero aun asi esta genial la historia.besitos

[Diablilla 5]

Que buen capitulo Sadru,amanda esta brillante guapisima!!!!!!!!!

Me ha encantado ^^ espero que arregles esos problemillas que ya tengo ganas de ver el siguiente capitulo

[sandru25 0]

Me alegro que te haya gustado Diablilla y Monivict. Los problemas ya los tengo solucionados gracias a Mari y Psusenas. Gracias a ellas no he perdido ni la casa ni los personajes, solo los aprendizajes y las amistades pero nada comparado con lo otro. Ya puedo seguir avanzando con la historia, así que subo otro capitulo mas, este ya lo tenia medio hecho cuando me paso lo del atasco, las fotos que estoy haciendo ahora son las del siguiente capitulo de este diario, aun así, me gustaria dedicar muy especialmente este capitulo a Mari y Psusenas, mis grandes salvadoras, gracias a las cuales esta historia no se ha tenido ni que cancelar ni que aplazar.

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La noche de ayer estuvo genial, fue tan especial… me dormí recordando de nuevo los buenos momentos: el karaoke, cuando me libró de Julio, el baile lento… pensé tanto en esas cosas que termine soñando con el pero no recuerdo el que, menuda rabia, solo se que debió ser muy bonito porque me he despertado muy contenta y feliz. Tampoco era para menos, hacia un día muy bueno, con mucho sol y los pájaros cantando.

Los domingos en mi casa son días de culto al cuerpo. Hacer ejercicio, masajes, cremas, mascarillas, depilación, potingues, manicura… A mi todas esas cosas no me van, se las dejo para mi madre y mi hermana

Ambas empiezan el día poniéndose sus trajes de aerobic rosa y siguiendo en la tele los aburridos ejercicios que manda la chica de “Ponte en forma con alegría”. Después siguen con todo lo demás, un completo ritual de belleza.

Yo me limito a pedalear por gusto y placer en mi bici estática.

No podía dejar de volver a pensar en mi vecino cuando de repente le vi con su padre en el jardín. Parecía que se iban a poner a jugar a básquet, y efectivamente no me equivoqué. No pasó mucho tiempo hasta que Arturo se percató de mi presencia y me saludo gritándome un buenos días y saludándome con la mano. Le devolví el saludo de la misma manera.

No podía dejar de mirarle. De vez en cuando él también dirigía su mirada hacia mi balcón en mi busca. Estaba muy contenta de verle de nuevo, sin embargo eso no era bastante, me sentía un poco vacía, mi corazón necesitaba más, así que baje. No se percato de mi presencia, estaba a punto de tirar la pelota a la canasta y no quise molestarlo así que no dije nada.

La pelota entró dentro y no pude evitar ponerme contenta y aplaudir provocando así que se percatara de que yo estaba allí. Se alegró de verme y se dirigió hacia mí.

Arturo: Ei! ¿Espiando a tu vecino por segunda vez? Eso no esta bien, chica mala.

Amanda: ¿Espiando? ¿Por segunda vez?

Arturo: Sí, no disimules, ayer boxeando la primera y ahora la segunda.

Amanda: Ayer te vi de casualidad creído y ahora has sido tú el que no me ha visto, yo no me he escondido.

Arturo: Que no disimules que te he pillado jeje es broma, a ver si aun te vas a enfadar.

Amanda: ¿Por eso? Que poco me conoces.

Arturo: ¿Y que haces aquí? Si no es mucho preguntar y se puede saber. No me di cuenta de que dejases la bici. ¿Ya te cansaste?

Amanda: Pues sí la verdad, eso de pedalear y no moverte del sitio es un poco cansino jeje

Arturo: Ni que lo digas, yo por eso prefiero salir a correr, me gusta más, ves la calle, la gente, el aire te toca la cara… es muy distinto. Tienes que probarlo.

Amanda: Puede que algún día.

Arturo: Pues si quieres te apuntas con mi padre y conmigo y así no vas sola, nosotros vamos todos los domingos por la mañana, mi padre como es un viejete no corre mucho así que no te costara pillar el ritmo.

Juanjo: Oye guapo que te he oído, a ver si vas a hacer 100 flexiones…

Arturo: Que era broma.

Amanda: Que malo eres.

Arturo: Menos de lo que parece. –dijo guiñando el ojo-

Amanda: ¿Y después de correr un partidito?

Arturo: Pues sí, teniendo la cancha pues porque no, nos hemos animado aunque yo apenas he jugado y no soy muy bueno pero ya aprenderé, para pasar el rato y hacer algo de deporte ya está bien.

Amanda: ¿Puedo apuntarme?

Arturo: ¿Te animas?

Amanda: Si, puede ser divertido, si te atreves vaya, quizás tienes miedo de que te gane.

Arturo: mmmm no se no se.

Amanda: Así hago ejercicio que me va bien, prefiero eso que la dieta de la alcachofa.

Arturo: ¿No estarás con esas tonterías en la cabeza no?

Amanda: ¿Qué tonterías?

Arturo: Con la obsesión por el cuerpo y el peso.

Amanda: ¡¿Que dices?! Ni de coña.

Arturo: Ah bueno, me dejas mas tranquilo, mira que estas muy flaquita… aun vas a caer enferma, te voy a tener que invitar muy a menudo a comer a mi casa para que las comidas de mi madre te pongan fuerte.

Amanda: Que va, si yo hago mucho ejercicio pero después me como unos bocadillos así de grandes.

Arturo: Jeje y después el exagerado soy yo…

Empezamos a jugar los tres a ver quien metía más la pelota. Ciertamente a Arturo no se le da muy bien pero a mi tampoco.

Juanjo me enseñó unas cuantas técnicas y realmente me sirvió de mucho. Arturo estaba muy pendiente de mí, no dejaba de mirarme.

Lo estábamos pasando muy bien cuando de repente oí una voz muy familiar, mi querida hermanita. Ya estaba ahí metiéndose de nuevo donde no la llamaban.

Felicia: Hola Arturo, hola vecino.

Juanjo: Hola.

Arturo: Hola Felicia, ¿que tal?

Felicia: Que bien os lo estáis pasando, ¿puedo unirme?

Juanjo: Claro, cuando más seamos más bien lo pasaremos.

Felicia: Podríamos hacer una competición por parejas.

Juanjo: Eso es genial, buena idea.

Felicia: Pues venga Arturo, tú y yo juntos ¿vale?

Juanjo: ¿Que os parece mejor una competición entre vecinos? –dijo tras ver las caras poco entusiasmadas de Arturo y Amanda-

Amanda: Me parece bien.

Arturo: Si, mejor, mas interesante, bien pensado papa.

Juanjo: Pues no se habla más. Rojas contra…

Arturo: Monteros.

Juanjo: Pues eso, Rojas contra Monteros.

Felicia: Bueno. –dijo sin gustarle la idea pero con resignación-

Mientras ellos lanzaban Felicia y yo les abucheábamos para desconcentrarles. Con Juanjo no nos daba resultado, es bastante bueno, con Arturo el pobre si que nos servía de más. Me daba un poco de palo pero no me apetece que Felicia sepa nada de que me estoy enamorando de él, prefiero que no lo sepa por el momento, así que no me quedo mas remedio que abuchearle para despistar.

Sin embargo parece que eso a él poco le importaba porque en vez de hacer lo mismo cuando nos tocaba a nosotras, nos animaba. Me ha dado la sensación de que a Felicia por cumplir porque conmigo lo hacia con mas entusiasmo. Su padre en cambio analizaba mi juego para ver si aprendía bien las técnicas que me había enseñado y seguía dándome consejos.

Cuando se hicieron las doce tuvimos que parar porque ellos se tenían que ir. Juanjo quiso terminar el partido cuando íbamos empatados y propuso para otro domingo otra competición para ver quien ganaba definitivamente. También me dijo que practicara mas el movimiento del tiro, ciertamente me hace falta.

Felicia: ¿No te parece mono?

Amanda: ¿Quién? – dijo disimulando-

Felicia: Arturo, ¿quien va a ser? ¿su padre?, yo creo que le gusto, no dejaba de mirarme y de sonreírme.

Amanda: No deberías hacerte ilusiones, quizás te equivoques.

Felicia: Que va, le gusto, estoy segura, y tarde o temprano será mío, ya lo veras. Me voy que se me hace tarde para el baño de algas del mar nórdico y la mascarilla de aguacate.

¿Será infantil y caprichosa? no me lo puedo creer, ahora se le ha antojado Arturo, y encima se cree que es correspondido. Pues lo lleva claro, yo le llevo más ventaja, Arturo es mucho hombre para ella, me gusta mucho y no estoy dispuesta a perderle por un antojo suyo. Todos los momentos que estoy viviendo a su lado son muy especiales para mi, y no quiero que terminen sino todo lo contrario, cada día quiero más, cada día necesito más esos momentos con él, a él.

Me senté en el columpio sin dejar de pensar en las palabras de mi hermanita. Tenia que hacer algo, dar un paso más. De momento sabemos que nos gustamos aunque no porque ninguno de los dos lo hayamos dicho sino por una tercera persona. Quizás debía decírselo o pedirle una cita. Podría aprovechar la escusa de mi cumpleaños o quizás la cita que tenemos pendiente para hacer los deberes.

Estaba dándole vueltas a eso en mi cabeza cuando de repente vi que salía de casa con sus padres.

Arturo: ¿Aun estas por aquí?

Amanda: Sí, no tenia ganas de encerrarme en casa con el buen día que hace. Y vosotros, ¿Dónde vais tan elegantes?

Arturo: Ah pues ya ves, mi madre que le gusta disfrutar los domingos del día de fiesta y la familia y nos vamos a comer a un restaurante, así se libra de la faena de la cocina y descansa y sale por un día.

Amanda: Eso esta bien, nosotras somos más del sábado cuando salimos de tiendas porque pillan lejos de casa, los domingos lo dedican hacer ejercicio, masajes y ponerse potingues.

Arturo: ¿Tú no?

Amanda: Ah a mi no me hace falta, yo ya soy perfecta, no puedo mejorar más.

Arturo: Pues sí, tienes razón.

Amanda: Era broma Arturo, lo decía de coña, yo simplemente paso de esas cosas, me conformo y asumo lo que tengo y lo que soy, además no tengo a nadie para quien tomarme tantas molestias.

Arturo: Bueno, de todas formas, a mi me parece que no tienes nada que mejorar.

Amanda: Tu padre se ha puesto muy elegante, ¿siempre se arregla tanto?

Arturo: Sí, vamos a restaurantes finos, mi madre es muy tiquismiquis con la comida. Además les gusta arreglarse un día que pueden lucirse sobretodo mi padre que se pasa la semana con el uniforme.

Amanda: Pues tu madre también se ha puesto muy guapa, ni la había conocido con el cabello suelto, le queda muy bien, parece mucho mas joven, debería soltárselo más.

Arturo: Pues como tu, también deberías soltártelo más, te queda mucho mejor.

Amanda: Lo tendré en cuenta. –dijo medio alagada-

Arturo: ¿Bueno y de mí no vas a decir nada? ¿No te gusto o que?

Amanda: Solo hace cinco días que nos conocemos y ya es la segunda vez que me preguntas eso. –dijo irónica-

Arturo: Y tu la segunda vez que no me respondes –contesto con tono burlesco-, pero te lo preguntaré más a tu gusto, ¿estoy guapo y elegante o no?

Amanda: Pues la verdad que estas… muy… diferente. – dijo riéndose -

Arturo: Diferente eh, te voy a denunciar por plagio si vuelves a decirlo, esa idiotez es mía, solo a mi se me ocurre contestar eso.

Amanda: ¿Y que debería de haber contestado según tú?

Arturo: Tú no se, eso tú sabrás, yo que estabas impresionantemente espectacular –dijo tímidamente-

Amanda: Vaya o te quedas corto o te pasas –dijo riéndose de nuevo- pero gracias exagerado. Te estás poniendo rojo.

Arturo: No es cierto.

Amanda: Sí, si que lo es, te estas poniendo rojo.

Arturo: Pero eso es por el calor.

Amanda: Eso va a ser.

Arturo: Pues sí, y no me llames exagerado, lo digo en serio, estabas guapísima de verdad.

Amanda: Vaaaaale, gracias, tarde, pero me vale. Tú también estas muy guapo con esa ropa tan fina, me dejaste impresionada cuando te vi, te sienta realmente bien y ayer también estabas muy guapo, me gustó mucho la camiseta de la guitarra.

Arturo: Pues ya me la pondré otro día.

Amanda: ¿Y a que restaurante vais?

Arturo: A los cinco sentidos creo que se llama.

Amanda: Buena elección, es muy bueno, uno de los mejores de la ciudad, os gustara.

Arturo: ¿Has estado?

Amanda: Sí, los padres de Yolanda celebraron uno de sus cumpleaños allí. Te recomiendo los canelones de pavo y champiñones, están de muerte, y el pollo con almendras y canela también esta para chuparse los dedos.

Arturo: Pues muchas gracias, tomo nota, ¿y algún postre en especial?

Amanda: Si te gusta el dulce cualquiera te gustará.

Arturo: Pues bueno te dejo que mis padres se van a tostar en el coche, ya ni me acordaba de ellos –dijo riéndose-

Amanda: Eres un caso, anda vete.

Arturo: Nos vemos pronto.

Amanda: A las nueve y media iré a tirar la basura.

Arturo: Tomo nota de nuevo. –dijo mientras se dirigía al coche-

Amanda: Buen provecho.

Arturo: Gracias.

Después de ducharme y de comer me puse en el comedor a ver videos musicales, sola puesto que las dos bellezas de la casa seguían con su rutinario ritual. De repente llamaron al timbre, no estaba esperando a nadie.

Fue a abrir, sabia de sobra que sino lo hacia yo…

Eran Clara y Yolanda, mis dos buenas amigas.

Las recibí con mucha alegría, me gustó mucho la improvisada visita. Nos sentamos las tres en el comedor.

Amanda: Que bien que hayáis venido, me estaba aburriendo un poco.

Clara: No podíamos esperar más.

Amanda: ¿Esperar a que?

Clara: ¿Pues a que va ser? A saber lo que pasó ayer.

Amanda: ¿Lo que pasó ayer? ¿De qué habláis?

Yolanda: Claro, con Arturo, después de que nos marchásemos.

Amanda: ¿Qué queríais que pasase?

Clara: ¿No paso nada? –dijo alucinada y decepcionada-

Amanda: Pues no, estuvimos comentando lo buena que había sido la noche y poco más.

Yolanda: Demasiado tímido te ha salido.

Amanda: A mi ya me esta bien, tampoco quiero forzar las cosas, prefiero que vayan despacio.

Clara: Pues sigue así de mojigata que alguna loba se te adelantara.

Yolanda: No te pases Clara.

Clara: No me paso, pero después del karaoke y del baile, buenas noches y adiós, tiene tela la cosa.

Amanda: ¿Quién ha dicho eso? Le di un beso en la cara.

Yolanda: Ves Clarita como no es tan tonta, algo es algo.

Clara: ¿Y como reaccionó él?

Amanda: Se quedó pasmado, creo que le pille desprevenido pero al menos sirvió para algo.

Clara: ¿Qué quiere decir eso?

Amanda: Esta mañana estaba con la bici y le vi con su padre jugando al básquet. Me bajé a jugar con ellos. Estuvimos hablando un rato. Después tuvieron que marcharse para ducharse y cambiarse para ir a comer a Los cinco sentidos y me quedé en el columpio y cuando salieron se acerco y estuvimos hablando de nuevo.

Yolanda: Que bien, poco a poco te vas acercando más a él.

Clara: Pues sí ¿pero de qué sirve eso? ¿qué tiene que ver con que lo de ayer sirviera para algo?

Amanda: Pues porque ha reaccionado un poco, está un poco mas suelto, no es muy directo pero las va soltando con disimulo. Me ha dicho que ayer estaba impresionantemente espectacular.

Clara: ¡Eso es genial!

Amanda: Le he dicho que esta noche iría a tirar la basura a las nueve y media, seguramente le diré de ir mañana a su casa hacer los deberes.

Yolanda: Bien Amanda, poco a poco pero seguro.

Mi madre y mi hermana se fueron a la piscina y nosotras decidimos apuntarnos. Menos mal que las chicas se dejaron un bañador en casa para estos casos.

Estuvimos tomando el sol y relajándonos con la buena tarde que hacía.

Decidimos tomarnos un bañito para apaciguar el calor que empezaba a hacerse un poco insoportable.

De repente se abrió la puerta del jardín.

Arturo, Toni y Lucas entraron con bañador. Llevaba rato sin pensar en él y de repente como ángel caído del cielo ahí estaba, y en bañador, con medio cuerpazo al descubierto.

Lucas: Hola chicas, ya esta aquí el alma de las fiestas.

Felicia: Hola Arturo y compañía.

Amanda: ¿Qué hacéis aquí chicos? –dijo sorprendida-

Toni: Muy bonito chicas, organizando fiestecitas sin nosotros eh

Clara: No es una fiesta, solo nos estamos dando un baño.

Amanda: ¿Y como os habéis enterado?

Arturo: Cuando llegué del restaurante os vi por la ventana y les llame por si querían apuntarse, espero que no os importe.

Amanda: ¿Espiando a tus vecinas chico malo?

Arturo: ¿Espiando yo? –dijo haciéndose el inocente- Os vi de refilón.

Amanda: Dos a uno guapo.

Arturo: Que tu sepas guapa –replicó haciéndose el interesante-

Lucas: ¿De que va esto? Si queréis os dejamos solos eh

Felicia: Venga Arturo métete, el agua esta muy buena.

Los chicos se unieron a nosotras y estuvimos jugando a varios juegos de piscina acaparando de nuevo mi hermanita toda la atención del Arturo.

Cuando nos cansamos de tanta agua nos salimos un rato y estuvimos charlando. Toni nos hecho el rapapolvo por lo de ayer con el idiota de Julio, ya me extrañaba a mí que no dijera nada y quedara ahí la cosa.

Sin esperárnoslo salió a su terraza Tania, nuestra hoy irreconocible profesora, que nos ofreció pasar a su casa a tomar helado de chocolate. La propuesta nos dejó a todos un poco cortados, no sabíamos que si debíamos decir que sí o que no, al fin y al cabo no deja de ser nuestra profe y la situación era un poco rara. Parece que ella se dio cuenta de lo que estábamos pensando.

Tania: Venga chicos, esta buenísimo y con este calor entra muy bien. ¿No os apetece? –dijo tratando de convencerles-

Arturo: Da igual mama, otro día, ahora estamos tomando el sol –contestó tratando de quitar importancia para que su madre no se sintiera mal-

Tania: ¿Por qué? A parte de ser la profesora de lengua y literatura también soy tu madre y ahora no estamos en el instituto. –insistió-

Amanda: Tiene razón chicos –dijo entusiasmada y tratando de animar a los demás tras ver la cara de decepción de Arturo y de su madre- vamos, nosotros nunca despreciamos un buen helado.

Arturo: Ahora entramos mama –dijo mientras miraba a Amanda dándole las gracias con la mirada-

Arturo: Por aquí –indicaba a sus amigos-

Tania: Venga chicos, pasar que se derrite.

Lucas: Esta usted muy guapa hoy señorita.

Tania: Gracias Lucas, pero hoy no soy vuestra señorita, así que llamarme Tania.

Tania: Si queréis más me lo pedís ¿vale? Yo voy a cambiarme de ropa y ponerme cómoda.

Arturo: Vale mama.

Yolanda: Gracias Tania.

Toni: Está muy bueno.

Juanjo: Hola chicos ¿Qué tal?

Todos: Hola.

Juanjo: ¿Está bueno el helado?

Arturo: Chicas éste es mi padre, se llama Juanjo.

Clara: Vaya Arturo, ya veo a quien has salido, no nos habías dicho que tenias un padre tan joven y tan majo.

Arturo: No lo sabia –dijo riéndose-

Juanjo: No se como le aguantáis.

Arturo: Si en el fondo te gusta que me meta contigo, ¿Qué harías sin mí?

Clara: No le haga caso, yo me llamo Clara y esta es Yolanda.

Lucas: Nosotros ya nos conocimos ayer, ¿recuerda?

Juanjo: Podéis llamarme Juanjo, no hace falta que me tratéis de usted. Ah si, ya recuerdo, tú eres el de la redacción de tres líneas. –dijo riéndose-

Estuvimos hablando un rato con él. Cuando terminamos del helado nos ofreció más pero ninguno quiso, Tania nos había puesto una buena ración. Él mismo recogió los platos.

Los chicos se subieron a la habitación de Arturo a vestirse y nosotras nos fuimos a mi casa. Después nos encontramos de nuevo en el jardín donde jugamos una partidita al monopoly y estuvimos hablando. Arturo se puso unos vaqueros y una camiseta azul de tirantes. Parece un conjunto bastante simple pero le quedaba de bien… no podía dejar de mirarlo, estaba tan guapo… que digo guapo, estaba guapísimo, el azul le queda mejor que el verde, a parte es mi color favorito.

Mi madre, que ya nos había traído unos refrescos hacia un rato, vino de nuevo para ver si queríamos algo de picar o de comer. Le dije que nos pidiera una pizza, el helado nos había abierto el apetito.

Recogimos el juego y antes de que nos diéramos cuenta ya la teníamos ahí de nuevo.

Marga: Si queréis algo más estaré dentro en el comedor, me pegáis un grito.

Amanda: Vale mama, gracias.

La pizza voló enseguida, se nota que es nuestra favorita. Después de eso cada uno se fue a su casa, mañana ya es lunes, hay clase de nuevo y hay que madrugar y esas cosas. Preparé el uniforme y la mochila, dejándolo todo listo. Después estuve viendo con Felicia la tele hasta que cenamos. Yo no comí mucho ya que con el helado y el trozo de pizza no tenía mucha hambre. Cuando terminé fui a tirar la basura, no sabía si Arturo estaría ahí o no ya que pasaban diez minutos de la hora que le había dicho.

Amanda: Hola de nuevo –dijo mientras tiraba la basura-

Arturo: Hola tardona, las nueve media ya pasaron hace rato.

Amanda: Lo siento, la cena se retraso un poco más de la cuenta, pero solo han pasado diez minutos.

Arturo: Tranquila, lo decía de broma, ya se que todo lo bueno se hace esperar.

Amanda: ¿Es un cumplido? Porque no se si darte las gracias o no.

Arturo: Puede –dijo sonriendo-

Amanda: Ese tono pícaro me recuerda que tenemos una conversación pendiente.

Arturo: ¿Ah si? –dijo sin saber de que estaba hablando-

Amanda: Sí, no te hagas el sueco, ¿Qué quiere decir eso del dos a uno que yo sepa?

Arturo: Jajaja Así que era eso –dijo riéndose-

Amanda: Dímelo.

Arturo: ¿Pidiéndomelo así? ¿con exigencias? Mmm no me convences.

Amanda: Por favor.

Arturo: Demasiado tarde, el día que me lo pidas con más cariño quizás hasta te responda.

Amanda: Ya nos encontraremos por el camino –dijo refunfuñando-

Arturo: ¿Por qué me miras tanto refunfuñona? Me estás obligando a hacerte cierta pregunta por tercera vez.

Amanda: Hazla, yo no te contestaré por tercera vez, mucho menos después de que no me quieras contestar a lo otro. –dijo haciéndose la enfadada-

Arturo: Bueno… como nos ponemos, se me olvidaba que tengo que tener cuidado contigo, menos mal que no tienes ninguna bebida en la mano así que supongo que estoy medio a salvo.

Amanda: Muy gracioso. –dijo muy seria- Tengo que irme, mañana hay clase y ya es tarde. Adiós –dijo mientras se iba-

Arturo: Espera Amanda, lo siento, ha sido una broma idiota, no quería ofenderte. ¡Amanda!

CONTINUARA... MUY PRONTO.

Editado 25 may 2009 por sandru25

[monivict 0]

me ha encando el capitulo,cada vez esta mas interesante como se notan que estan loquito el uno por el otro.

buen trabajo :)

[sandru25 0]

me ha encando el capitulo,cada vez esta mas interesante como se notan que estan loquito el uno por el otro.

buen trabajo :)

Gracias, me alegro que te haya gustado. EL supermercado que te gustaba a ti y a Diablilla lo tengo empaquetado ya, así que a ver si alguien me dice como hago para pasarlo. Lo unico que con el problema que tuve se me retraso un poco la historia, estoy tratando de avanzarla lo mas rapido que puedo pero no tengo tiempo para prepararlo bien de nuevo así que lo he empaquetado tal y como me lo descargué yo pero en el segundo piso he hecho una especie de trastero y he metido cosas de supermercado para que os lo monteis a vuestro gusto. No he querido meter muchas cosas para no cargaros de descargas. He puesto mostradores, estanterias, comidas... solo tengo una dudilla. Cuando de un objeto tienes varios modelos o colores, por ejemplo un sofa que tengas de 10 colores distintos, si tu colocas en el solar empaquetado uno de rojo, ¿se descargaran todos los colores o solo el rojo? Bueno espero que alguien me responda y mas comentarios de la historia que tanto me gusta recibir y contestar. Saludos.

[*+LcP+* 0]

Muy muy bueno el capítulo =)

[sandru25 0]

Muy muy bueno el capítulo =)

Me alegro mucho que te haya gustado Acabo de subir el de Arturo, espero que te guste, el lunes casi seguro subire el siguiente de Amanda, más emocionante aun.

[Diablilla 5]

Bueno capitulo

Esta genial donde estan haciendo el ejercicio jajajajaja

Me gusta mucho como cuentas todo y com haces las fotos

[sandru25 0]

Diablilla: Me alegro que hayas disfrutado, aqui viene otro capitulo que creo que tambien te gustara, éste y los proximos vienen cargaditos de muchas emociones. Me alegro que te guste como lo cuento, es mi primera historia y me da muchos animos aunque me sale así, lo que me alaga mucho mas que me reconozcas el mérito es en las fotos, algunas me cuestan horrores de hacer, hay más de una foto que igual me tirado una hora para hacerla, sobretodo las del insti porque el solar es grande y hay muchas personas (16 o 17) y eso hace que me vaya muy lento, a parte que aunque tengo el libre albeldrio ese en no me hacen igual lo que quieren y cuando lo tengo todo preparado para hacer la foto siempre hay alguien que la jode o pasa algo que me la estropea. Ademas soy un poco masoquista jeje y hasta que no consigo lo que quiero no paro y me chincho a mi misma. Pero bueno no me enrollo más, ahi va el capitulo que al final lo iba a subir ayer pero no me ha funcionado la web del foro en todo el fin de semana supongo que debió haber problemas o algo.

Hasta que no ponga continuara no esta terminado de subir del todo.

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Me siento muy mal por lo que ha sucedido en los columpios. No se que me pasó, no se porque me ofendió tanto que me dijera eso, supongo que porque me recordó al imbécil de Julio. Tengo una presión en el pecho y unas ganas de llorar inmensas. He estropeado las cosas. Le dejé al pobre ahí, solo, con la palabra en la boca, haciéndole sentir mal ni siquiera yo se porque. ¡Seré estúpida! Ahora mismo se debe estar sintiendo fatal y por mi culpa. Pero ¿qué hago? Es tarde. Podría llamarlo pero no creo que sea capaz de hablar con él después de lo de antes. Quizás esté enfadado conmigo y no quiera saber nada más de mí. Quizás no me quiere ni ver. Solo hay una manera de hablarse sin verse y sin tener que usar la boca para hablar. Creo que se me ha ocurrido algo.

Cogí el móvil y le mandé a Arturo un mensaje: M gustaría ablar contigo, agregame al Messenger, mandy_montero. Encendí el ordenador y esperé a ver si se conectaba. De repente se me abrió una ventana, era él. El corazón se me aceleró.

Estaba durmiendo muy a gusto cuando me sonó la alarma del móvil que me devolvía al mundo de los despiertos. El lunes empezaba ya, poniéndome mi dichoso uniforme que hacia meses ya que no me ponía, ni lo echaba de menos tampoco. Después bajé a desayunar y cuando terminé salí al jardín a esperar el bus. Arturo estaba ahí ya, sentado en uno de los bancos.

Amanda: Esta usted muy pensativo señorito Rojas.

Arturo: ¿Amanda? No te había visto. –dijo levantando la vista y sonriendo-

Amanda: ¿Qué pensabas tanto?

Arturo: Emmm... yo… pues… ya te dije que cuando te viera no sabría que decirte –dijo tras pensar sin éxito algo que contestarle-

Amanda: No sé que voy hacer contigo.

Arturo: ¿Estás bien? –preguntó refiriéndose a lo sucedido por la noche-

Amanda: Sí, ¿y tú?

Arturo: También.

Para bien o para mal no pudimos hablar mucho más del tema porque justo entonces salió Felicia.

Felicia: Hola Arturo, buenos días.

Arturo: Hola Felicia. Así que este es el uniforme femenino… pues no lo entiendo, ¿porqué yo me siento tan fachoso y a vosotras os queda tan bien?

Felicia: ¿Te gusta? ¿Estoy guapa?

Arturo: Sí, estáis muy guapas.

Amanda: ¿Yo también? –preguntó sorprendida-

Arturo: Sí, “me gustas mucho”. –dijo indirectamente mirándola tiernamente-

Amanda: Vaya pues gracias, a ti también te queda bien, no me parece que te quede fachoso.

Arturo: ¿De verdad? ¿Estoy… diferente? –dijo guiñando el ojo-

Amanda: Sí, - contestó riéndose- mucho, yo no lo hubiese descrito mejor – añadió sonriéndole-

Felicia: Estás muy guapo. Oye ¿quieres venir esta tarde a hacer los deberes a mi casa?

Arturo: Pues… me encantaría pero no va a poder ser, lo siento.

Felicia: Jo, ¿Por qué? –dijo caprichosa-

Arturo: Porque tu hermana y yo tenemos unos deberes pendientes de hacer en mi casa. –contestó tratando de excusarse para quitarle la idea de la cabeza-

Amanda: Veo que te acuerdas, iba a recordártelo más tarde por si se te había olvidado –dijo tratando de apoyar la versión de Arturo-

Felicia: ¿Y otro día?

Arturo: Mira ya viene el bus. –respondió tratando de evadir el tema-

La mañana no empezó muy bien, después de una aburrida clase de mates con nuestra nueva y despampanante profesora, nuestro querido señor director, que a la vez es nuestro profesor de historia, nos sorprendió con un examen sorpresa del temario del año pasado para ver de qué nos acordábamos. Ya ves que más dará, si ya lo estudiamos y lo aprobamos, ¿para que insistir en lo mismo en vez de empezar con el aburrido y nuevo temario de este año?

Después de quemar nuestras pocas y dormidas neuronas al fin llegó el recreo.

Yolanda: Lo pasamos bien el sábado eh

Clara: Te diré, aun me duelen los pies de tanto bailar.

Toni: Eso es de los zapatos que te pones.

Clara: Para presumir hay que sufrir, que se le va a hacer.

Lucas: No te creas que yo después de todo el verano sin mover el esqueleto también lo noto, también.

Amanda: Mira que sois exagerados.

Lucas: ¡Habló la del bailecito lento! Así cualquiera, aunque mira, por lo menos a alguien le sirvió para algo las clases de baile de salón del año pasado.

Arturo: ¿Qué clases? –preguntó con curiosidad-

Lucas: Unas que nos dieron el año pasado en clase de gimnasia y que no sirvieron para nada más que para enamorar a Clara del profe de gimnasia.

Clara: Oye que quieres, si es que está muy bueno, una no es de piedra.

Arturo: Creía que era la primera vez que bailabas algo lento –comentó a Amanda sorprendido-

Amanda: Sí… bueno… en un lugar público era la primera vez. –trató de excusarse-

Yolanda: Buuueenooo… creo que alguien ha metido la pata.

Lucas: ¿No lo dirás por mí?

Toni: A ver por quien va a ser entonces.

Lucas: Ya estamos. ¿Y yo que sabía?

Arturo: Así que me has salido mentirosilla… -bromeó-

Amanda: Si te lo llego a decir no hubieras querido bailar –trató de justificarse-

Arturo: Pues te vas a enterar… - dijo haciéndole cosquillas-

Amanda: ¡No! ¡Para! ¡Arturo! Que soy muy bestia y te voy hacer daño.

Arturo: ¿Daño? ¿Tu a mi? Pues no te quedan colacaos que tomar.

Una de las clases que hemos tenido después de comer ha sido inglés, con nuestro tutor. Hemos intentado tener una conversación in english entre nosotros para contarnos lo que hicimos en vacaciones, pero se ha quedado más bien en eso, en el intento. Sin embargo Arturo lo habla bastante bien, su inglés es mucho mejor que el mío que siempre se me ha resistido un poco.

De repente entró el señor director, creíamos que para notificarnos algo importante pero no. Venía a entregarnos los exámenes que ya había corregido durante la mañana.

Empezó a llamarnos uno a uno para ir recogiendo el examen. Mis sospechas se confirmaron. Tenía la esperanza de que no me hubiera ido tan mal y aunque hubiese sido justo hubiera aprobado, pero no, tenía en mis manos mi primer suspenso del curso, pero claro… sin estudiar… pues no es tan raro, y encima de historia. Aún así no pude evitar hundirme un poco. Arturo trató de animarme.

Arturo: No lo mires más anda, no es más que un examen.

Amanda: Sí, pero un examen suspendido.

Arturo: Venga Amanda, ¿que más da? Si a todos nos ha ido más o menos igual.

Amanda: Lo dices porque tú has aprobado.

Arturo: Por los pelos y por suerte, tú eres muy inteligente, seguro que no te perjudicará en la media.

Esteban: Amanda, Arturo ¿ya habéis acabado los ejercicios?

Arturo: ¿Vendrás luego a mi casa a hacer los deberes?

Amanda: Claro, o voy o Felicia va a buscarte para que vengas tú a la nuestra y entonces tendré que hacer yo la merienda y aún me debes una.

Arturo: Espero que te fuera bien venir hoy y no te importe que lo haya usado de excusa.

Amanda: Que va, ya te dije esta mañana que pensaba recordártelo.

Arturo: ¿En serio?

Amanda: Sí, te lo iba a decir anoche cuando… -se quedó cortada sin saber que decir para no recordar lo que pasó-

Arturo: Anoche –dijo amablemente poniendo fin a la conversación y tratando de quitarle importancia-

Estaba deseando estar en su casa haciendo los deberes, los dos solos en su cuarto, que aun no he visto, con la merienda que me tiene que preparar… y más después del chateo de anoche. El día ha transcurrido bastante normal, excepto por el pequeño incidente de la metedura de pata de Lucas, que por suerte se lo ha tomado bien. Pero claro estábamos en el insti y rodeados de mucha gente. ¿Qué pasaría cuando estuviésemos solos? Ahora ya es oficial que ambos nos gustamos, lo sabemos los dos de primerísima mano. Estaba hasta nerviosilla de las ganas que tenía de qué llegara el momento, ya faltaba poco. Nos estábamos despidiéndonos de Yolanda y Lucas cuando su madre le llamó. Al cabo de un par de minutos se dirigió a mí.

Yolanda: Bueno chicos os dejo, no hago esperar más a Braulio.

Amanda y Lucas: Hasta mañana.

Arturo: Tengo que acompañar a mi madre hacer unos recados.

Amanda: ¿Entonces dejamos los deberes para otro día? –dijo desilusionada-

Arturo: Ni por asomo, ya te dije el otro día que soy hombre de palabra, quedamos para hoy y hoy será. –contestó sonriéndole-

Amanda: Como quieras. ¿Me haces una llamada perdida cuando estés en casa y yo voy para allá?

Arturo: Me parece perfecto, no te separes del móvil, antes de que te des cuenta estaré contigo, pero vete ya o perderás el autobús.

Amanda: Hasta ahora Arturo y hasta mañana Lucas.

Lucas y Arturo: Adiós.

Cuando llegué a casa me cambié de ropa y me puse algo más cómodo. Por suerte los recados de Tania eran breves, así que no hemos tenido que cancelar nuestro encuentro. Mientras, le esperé viendo la tele. Cuando mi madre me vio ya empezó con la cantinela de si no tienes deberes y esos rollos que sueltan las madres para no dejarte tranquila y hacerte la vida un poco menos agradable.

Al cabo de muy pocos minutos sonó brevemente la melodía de mi móvil, al mismo tiempo que oí a mi madre llamarme con un tono algo enfadado. ¡Dios! No debí dejar que subiera ella a poner la ropa en el armario, debí haberme acordado de que dejé el examen encima del escritorio.

Subí a mi cuarto, nada más entrar ya me mostró el examen gritándome al mismo tiempo “¡¿qué significa esto Amanda Montero?! Siempre me llama así, Amanda Montero, cuando se enfada conmigo, que por suerte no es muy a menudo. No se porque lo hace, y eso que lo lleva diciendo desde que tengo memoria. Supongo que llamándome así, con mi nombre y primer apellido, debe sentir que mis errores no son fruto de ella y de la educación que me da sino de mis genes paternos, una manera de culpar a mi padre y no a ella misma.

Traté de calmarla diciéndole que no era más que un examen. Cuando Arturo me lo dijo a mí en clase de inglés más o menos funcionó pero con mi madre todo lo contrario, la cabreo un poco más. Me rebatió diciéndome que era una irresponsable por haberme pasado el fin de semana de cachondeo teniendo un examen y que empezaba mal el curso con esa actitud. Por suerte cuando le dije que se trataba de un examen sorpresa y de materia del año pasado se tranquilizó un poco.

Marga: Éste pasa, pero no quiero ni un solo suspenso más Amanda.

Amanda: Oh venga mama, a ver si te crees que suspendo por gusto, son cosas que pasan y ya está.

Marga: Estás en el último curso antes de la universidad, tienes que esforzarte o te tocará repetir.

Amanda: Ya lo se, ya soy mayorcita para darme cuenta de esas cosas, no necesito que vengas tú a decírmelo pero entiende que son muchas asignaturas, muchos temas y muchas cosas en la cabeza como para poder con todo sin problemas.

Marga: Ya lo se, y los fines de semana querrás salir con tus amigos, y cuando empiecen los entrenos de las animadoras también querrás apuntarte y muchas cosas quieres hacer hija, demasiadas.

Amanda: No te preocupes tanto quieres, todos los años he salido con mis amigos y he sido animadora y he aprobado todo. Tendré la carrera que tu no pudiste tener, me cueste lo que me cueste, pero déjame vivir la vida a mi manera.

Marga: Yo solo quiero ayudarte.

Amanda: Ya lo sé, pero no puedes.

Marga: Te equivocas, tengo la solución para facilitarte el estudio.

Amanda: Sorpréndeme –dijo incrédula-

Marga: Clases de ayuda.

Amanda: ¿Repaso? Espera que me lo piense… ¡No!

Amanda: Ni de coña, olvídalo, paso.

Marga: No era una sugerencia jovencita, era una orden, e irás te guste o no.

Amanda: Venga mama, lo que menos necesito es perder tiempo yendo a vete a saber donde estará el sitio ese, yo no necesito ir a clases de repaso, puedo estudiar sola como he hecho siempre, si tengo dudas para eso están los profesores de la escuela.

Marga: ¿Porque le ves tantos problemas? Además está muy cerca, no tardarás tanto en llegar y te gustará ya verás, confía en mí. Tampoco hace falta que vayas todos los días, en que vayas tres días a la semana ya estaría bien, eso como veas tú.

Amanda: No tengo ninguna otra opción ¿no?

Marga: Pues no.

Amanda: Y seguro que encima es una señorita Rottenmeyer.

Marga: Pues no, es una mujer joven, simpática y muy agradable.

Amanda: ¿Va mucha gente? –preguntó con asco-

Marga: No, solo tú, y quizás esté también por ahí su hijo, pero no creo ni que te importe ni que te moleste. Por cierto te estará esperando ya así que será mejor que vayas y no te retrases.

Amanda: ¿Ahora? ¿Ya?

Marga: Sí, ahora, cuanto antes mejor, para que esperar.

Amanda: Pero había quedado con Arturo para ir a su casa a hacer los deberes.

Marga: ¿Y?

Amanda: Pues que no puedo estar en dos sitios a la vez.

Marga: ¿Seguro?

Amanda: Pues claro que estoy segura.

Marga: Ay hija, no me extraña que te suspendan, que cortita eres a veces.

Amanda: ¿Que dices? –dijo extrañada sin entender nada-

Marga: Cerca de casa… mujer joven, simpática y agradable… su hijo cerca…

Amanda: ¿¡Tania!? –gritó sorprendida y contenta-

Marga: La misma. La llamé para peguntarle si conocía a alguien que diera clases y se ofreció ella muy amablemente. Me pareció que era perfecta para ello, así que…

Amanda: No me lo puedo creer.

Marga: Pero si no te gusta puedo buscar otra.

Amanda: ¡No! Tania esta bien –contestó tratando de disimular-

Marga: Bueno pues me alegro que al fin te guste mi idea y espero que sirva de algo.

Amanda: Mama eres la mejor, me voy, no quiero hacerles esperar.

Arturo: Pasa Amanda, estaba terminando de preparar la merienda. Espero que te guste el zumo de naranja, está recién exprimido, lo he hecho yo mismo.

Amanda: Me encanta, y si lo has hecho tu seguro que está muy bueno.

Arturo: Le he puesto sacarina y mucho cariño.

Amanda: ¿Y esa caja? ¿Has pasado por “la dulce vida”?

Arturo: Si es así como se llama la pastelería de la madre de Lucas, sí. Espero que no te importe que la merienda sea comprada en vez de haberla hecho yo.

Amanda: mmm no sé, ese no era el trato, muy bueno tiene que ser lo que has comprado para que no me debas una merienda.Arturo: No sé, a ver si te sorprendo.

Arturo: ¿Está bueno el zumo?

Amanda: Está buenísimo, se nota que le has puesto mucho cariño. –dijo sonriéndole-

Arturo: Ya te lo dije. –contestó guiñándole el ojo-

Arturo: Y que, ¿te he sorprendido con la merienda o no?

Amanda: Muchísimo, me encantan los pantera rosa, son mis favoritos, están tan buenos… y hace mucho que no como.

Arturo: Me alegro que te haya gustado mí elección, aunque tengo que confesar que no tiene mucho mérito, es el resultado de tener amigos que te conocen muy bien.

Amanda: ¿Te lo ha dicho Lucia?

Arturo: He dicho amigos que te conocen muy bien, me referia a Lucas.

Amanda: Touche.

Amanda: Están deliciosos.

Arturo: Sí, tenías razón, són riquísimos. Creo que han superado a mi zumo.

Amanda: Dejémoslo en empate.

Arturo: Vaya, muy generosa, gracias.

Amanda: ¿Y tú madre?

Arturo: No ha llegado aún, ¿Por qué?

Amanda: ¿No te lo ha contado?

Arturo: ¿Contarme? ¿El qué?

Amanda: Me va a dar clases de refuerzo.

Arturo: ¿Y eso?

Amanda: Cosa de mi madre, por el examen de historia.

Arturo: ¿Se lo has dicho?

Amanda: ¡Claro que no! No soy tan tonta para eso. Lo soy para dejarme el examen encima del escritorio.

Arturo: Eres un caso. Espero que por lo menos no se haya enfadado mucho.

Amanda: Bastante pero se le ha pasado pronto.

Arturo: Así que ahora vendrás todos días… y haremos los deberes juntos… -dijo haciéndose el interesante-

Amanda: Pues sí, un duro castigo –contestó sonriéndole-

Arturo: Entonces te tendré que preparar muchas meriendas… te voy a tener que cobrar.

Amanda: Si yo me conformo con muy poco.

Arturo: Lo decía de broma, será un placer hacerte ricas meriendas todos los días.

Amanda: Ten cuidado que a lo bueno me acostumbro muy rápido.

Estábamos terminando de merendar cuando llegó Tania. Nos preparamos para empezar con los deberes de clase en la mesa del comedor. Mientras Tania bajaba Arturo me estuvo preguntando que quería que me regalase por mi inminente cumpleaños. Me dijo que quería que fuese algo especial y que me gustase. ¿Será mono? Le he dicho que me gusta que sea sorpresa, así que no le he ayudado mucho aunque no me extrañaría que le pidiese consejo a las chicas o incluso hasta a los chicos. Estoy deseando ver que me regala, sin duda, viniendo de su parte, va a ser muy especial, sea lo que sea.

Tania: ¿Empezamos?

Amanda: Ya he empezado con ellos, estaba terminando los ejercicios de inglés que no me dio tiempo de acabar en clase.

Tania: ¿Y como lo llevas?

Amanda: Bien, ya casi está, tenía unas dudas pero Arturo me ha ayudado.

Tania: Y tu Arturo ¿cómo vas? ¿Ya los terminaste?

Arturo: Sí, yo estoy con los de mates.

En el fondo mi madre tenía razón. Tengo que reconocerlo aunque me fastidia un poco. Hacer los deberes con Tania, a parte de haber sido una gozada por pasar mucho más tiempo con Arturo, ha estado muy bien. Me ha ayudado bastante y se me hace más fácil y ameno realizar los ejercicios y estudiar en general. Es muy buena profesora y se la ve una gran mujer. Lo único malo que sino tengo deberes ella me pondrá igual ejercicios para hacer, pero bueno, supongo que me irá bien, y además no estaré sola. No es la tarde que había imaginado y deseado pero no ha estado mal del todo.

Cuando terminamos con todos los deberes que tenemos para mañana me fui para casa. Podía haber seguido con los que tengo para pasado mañana pero Tania a parte de ser profesora también es madre, esposa y ama de casa y tenía que hacer la cena. Mi madre estaba en la cocina terminando de preparar un poco de pasta. Como no tenía mucho que hacer la ayudé haciendo un poco de macedonia para postre.

Me estuvo preguntando por las clases de repaso, de ayuda, como prefiere llamarlo ella. Le estuve contando.

Después cenamos las tres, una más de nuestras amenas cenas en familia donde mi hermana le cuenta a nuestra madre sus chorradas y cotilleos del colegio. Sin embargo, hoy el tema de conversación ha sido distinto. Se muere de envidia de que me vaya a pasar las tarde con nuestro vecino y mí y no su compañero de clase. Ha intentado convencer a mi madre de que a ella también le irían bien esas clases, pero su capricho no ha tenido el resultado que ella esperaba. Mi madre le ha dicho que eso era imposible y que a ella no le hacía falta, que su curso no era tan decisivo como el mío.

Cuando terminé me di una rápida ducha y me disponía a ponerme el pijama cuando… ¡Dios! ¡No podía ser! No podía creer lo que mis ojos estaban viendo. Aun ahora no termino de creérmelo.

CONTINUARÁ... MUY PRONTO.

Editado 1 jun 2009 por sandru25

[Diablilla 5]

Enseri enorabuena!!!!!!

Me ha encantado el capitulo sobretodo la parte de la conversacion por el msn

Ha estado super graciosa jajajaja que gracioso arturo '' me gustas mucho desde que baje del coche y te vi por primera vez''

Amos que ricoooo si esque estas historias de amor me encantan!!!!!!!!

Espero pronto el siguiente capitulo

[sandru25 0]

Enseri enorabuena!!!!!!

Me ha encantado el capitulo sobretodo la parte de la conversacion por el msn

Ha estado super graciosa jajajaja que gracioso arturo '' me gustas mucho desde que baje del coche y te vi por primera vez''

Amos que ricoooo si esque estas historias de amor me encantan!!!!!!!!

Espero pronto el siguiente capitulo

Gracias, no sabes como me gusta leer tus mensajes menudo subidon jeje Ahora si que el capitulo esta todo subido, antes lo subia todo de golpe pero el otro dia a punto de terminar no se porque me salio un error y vuelta a empezar, me dio tanta rabia el tiempo perdido que una vez y no mas asi que ahora lo voy subiendo en pequeños trozos pero todo seguido a no ser que tenga que parar para comer como hoy. Pero ya esta todo asi que ya puedes seguir disfrutandolo. Que bien que te haya gustado la parte del msn, me parecio original ademas ya ves que en el chat uno larga sin darse cuenta mas de lo que debiera jeje A ver si te sigo sorprendiendo con las dos ricuras, espero que si. Besos.

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Aquí va un trocito más, es corto, el trozo que hacía falta de la hoja de diario de ese día, para que no os tengáis que esperar al lunes para saber que pasa y para poder subir el capitulo entero del diario de arturo sin desvelar nada que no hayas visto ya aqui. Espero que os guste aunque no es muy bonito ni romantico pero ya se sabe, la vida es así, una de cal y otra de arena.

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El mundo se me vino abajo. Sentí una mezcla de rabia, dolor, tristeza, cabreo… Decepción. Esa era la palabra que mejor definía como me sentía en ese momento. Cogí la ropa que me había quitado, me fui al baño, me vestí de nuevo y me recogí en un rápido y mal hecho moño mi mojado cabello.

Amanda: Hola Tania, ¿podría hablar un momento con Arturo?

Tania: Es un poco tarde ¿no?

Amanda: Perdona que te moleste pero solo será un momento, es importante.

Tania: Esta bien. Cariño puedes avisar a tu hijo de que tiene visita.

Juanjo: Claro, ahora se lo digo.

Tania: ¿Ya has revisado lo que te encargué antes?

Amanda: No, ahora iba a ponerme con ello antes de irme a la cama.

Tania: Bueno mañana ya lo miramos, parece que Arturo ya está bajando, os dejo solos.

Amanda: Gracias, buenas noches.

Arturo: Ei Amanda, ¿Qué pasa? –dijo antes de que ésta le pegara un buen guantazo- Eh ¿a qué viene esto?

Amanda: ¿Qué a que viene eso? No te hagas el tonto quieres que no te pega, demasiado listo eres.

Arturo: ¿Pero que bicho te ha picado?

Amanda: El peor de todos, tú. Que pasa, ¿que el sábado por la noche no pudiste ver nada y hoy has buscado refuerzos?

Arturo: ¿el sábado por la noche? ¿ver? ¿refuerzos? ¿de que me estás hablando?

Amanda: No me tomes por estúpida quieres.

Arturo: Yo no te tomo por nada, pero cálmate quieres –dijo poniéndole la mano sobre el hombro-.

Amanda: Que no me toques! ¡Me das asco!

Arturo: Y tú miedo.

Amanda: Que te he visto espiándome con el telescopio cuando iba a cambiarme.

Arturo: Que que? ¡No! ¿Estás loca o que?

Amanda: No lo niegues.

Arturo: ¿Cómo no voy a negarlo? ¿Pero como puedes pensar esto? Joder.

Amanda: Eres un cerdo, creí que eras diferente pero me equivoqué.

Arturo: ¿Pero de verdad piensas eso de mí?

Amanda: ¿Te parece que estoy de broma o que?

Arturo: Ojalá, pero mira tú por dónde, está claro que si piensas eso de mí yo también me equivoqué contigo.

Amanda: Eres un falso, un cínico, un hipócrita. Aléjate de mí, no voy a poder evitar verte que es lo que quisiera pero al menos no te quiero cerca.

Arturo: Tranquila, no te preocupes, será un placer no acercarme a una creída, engreída y egocéntrica como tú.

Tania: ¿Qué está pasando aquí? ¿que son tantos gritos?

Amanda: He pillado a tu hijo mirándome con el telescopio cuando iba a desnudarme.

Tania: ¡Arturo! ¡No me lo puedo creer!

Arturo: No no mamá, eso no es cierto, está loca.

Amanda: No lo niegues falso, se un hombre y admítelo por lo menos.

Tania: No le faltes el respeto. ¿La estabas espiando o no?

Arturo: ¡Que yo no la he espiado! solo estaba mirando las estrellas.

Amanda: ¿Las estrellas? Por favor. Te voy a meter una leche que si que te voy hacer ver las estrellas.

Tania: Amanda déjamelo a mi quieres, y espero por tu bien Arturo que no estés mintiendo.

Arturo: Te juro que estoy diciendo la verdad, ¿Por qué no me creéis?

Juanjo: ¿Qué está pasando aquí?

Felicia: ¿Qué te pasa Amanda? Tienes mala cara, pareces un alma en pena.

Amanda: No me encuentro muy bien.

Felicia: ¿Qué tienes?

Amanda: Un fuerte dolor.

Felicia: ¿La regla?

Amanda: Sí, eso mismo – dijo para ocultarle la verdad-

Felicia: ¿Quieres que te traiga una pastilla? A mí me van muy bien.

Amanda: No hace falta gracias, no creo que me haga nada, ya se me pasará.

Felicia: Como quieras.

El fuerte dolor era un poco más arriba de los ovarios, exactamente en el corazón, y eso no se me iba a pasar con una pastilla para la regla. No quise decirle nada, tampoco sé si con lo encaprichada que está con Arturo me hubiese querido creer, debería saber que nos puede espiar cuando nos cambiamos pero es tan niñata que quizás eso hasta le gustase. Yo en cambio estoy peor que un alma en pena como ella dice. Ahora mismo tengo una decepción encima que hace que me sienta vacía por dentro. Siento que estos últimos días he vivido una mentira, con el más grande de los mentirosos. El precioso príncipe se me convirtió en el más feo y repugnante sapo. Encima la discusión que hemos tenido ha sido horrible. Le he dicho cosas muy feas y, aunque se lo merecía, el tortazo que le di me dolió más a mí que a él. Ojalá pudiera no verle más para olvidarme de él, aunque mi corazón quiera todo lo contrario, sin embargo tendré que verle todos los días, dentro y fuera de clase. No sé cómo voy hacerlo. No hago más que repetirme a mi misma que no voy a llorar para tratar de ser más fuerte y aunque más o menos me está funcionando porque me quiero controlar para no llorar delante de mi hermana no sé cómo será cuando le vea, cuando le tenga cerca.

Amanda: ¡Hola Yolanda! Buenos días Lucas.

Yolanda y Lucas: Hola, buenos días.

Toni: Hola chicos.

Clara: Hola.

Lucas: ¿Qué le pasa a Arturo?

Amanda: Nada.

Yolanda: Como que nada, si parece que se le haya muerto alguien.

Amanda: Pues se le habrá muerto, yo que sé.

Lucas: Pero si nos ha dicho que tiene que ver contigo.

Clara: ¿No nos dijiste que no sabías nada?

Amanda: Y no lo sé, preguntadle a él.

Yolanda: No nos lo ha querido decir, ni siquiera ha querido hablar con nosotros.

Amanda: ¡Bueno vale ya! No me apetece hablar de ello, dejadme en paz, por favor.

Toni: ¿Estás bien Amanda?

Amanda: Lo estaré si dejan el tema. Me voy a clase.

Había estado tratando de disimular hasta entonces, de hacer como si no pasara nada, incluso cuando subí al autobús y Clara y Toni me preguntaron por él, pero tanta pregunta me hizo sacar la mala ostia que se me va acumulando dentro cada vez que me acuerdo de lo que pasó anoche, cada vez que se me viene a la mente la imagen de él mirándome con el telescopio. Por si eso fuese poco tenía que enfrentarme a mí día a día con pero a la vez sin él. Sólo llevamos 4 días de clase pero ya empezaba a acostumbrarme a sentarme a su lado y en resumen a estar todo el día pendiente de él.

Me senté detrás de los chicos, con Pedro. Es un buen chico, hemos hecho varios trabajos juntos y es muy majo aunque está abducido por Pili y Nati, es como una marioneta en sus manos. Durante las clases estuvimos hablando. Arturo se sentó en la última fila, en el rincón más remoto de la clase. No dejaba de mirarme, podía sentir encima de mí su mirada, no se si le he debido de dar celos, en ningún momento me senté con Pedro para eso pero sí lo he conseguido pues no me desagrada del todo, me alegro, que se joda.

Tan pronto se hizo la hora del recreo las dos señoritingas recogieron a su marioneta, tendrán miedo de no tenerlo lo suficientemente contento como para evitar que el empollón se pase a nuestro bando. Yo volví con mis amigos y pasamos el recreo en los columpios.

Clara: ¿Qué ha pasado al final con Arturo?

Amanda: No me apetece hablar. –dijo con tono cansado ante la insistencia de su amiga-

Yolanda: Déjala tranquila anda, no la atosigues.

Clara: Pero algo ha debido pasar, somos tus amigas, tenemos derecho a saberlo.

Yolanda: En eso tiene razón Amanda, sino sabemos que os pasa no os podemos ayudar.

Amanda: No nos pasa nada y no nos podéis ayudar.

Clara: Pero cuéntanos algo, danos aunque sea una pequeña pista. Míralo pobrecito, da lástima de ver, a mí se parte el corazón. ¿A ti no?

Amanda: Era demasiado bonito para ser verdad, el príncipe se me transformó en sapo, para que veas que la maldita bruja esa se equivocó de lleno. No quiero saber nada más de él, para mí está muerto, no me da ninguna lástima y no quiero hablar más del tema, ¿entendido?

Está muerto para mí, sí, pero no enterrado. Ojalá, pero eso no es tan fácil por más que quiera disimular y hacerme la dura. Lo cierto es que sí que daba un poco de lástima verle ahí solo en un rincón, pero el dolor y la rabia que tengo por dentro es mucho más grande.

Después tuvimos clase de bellas artes, donde pintamos a un precioso e inmóvil modelo, un frutero lleno de fruta, naturaleza muerta, que nunca he entendido porque se llama así, si fuera muerta la fruta estaría podrida y eso daría tanto asco pintarlo como ver el cuadro. Por lo menos era una clase tranquila donde no había que intentar seguir ninguna explicación ni tomar apuntes, porque hoy concentrarme me ha sido muy difícil y no me he enterado de mucho, la cabeza se me iba a otras partes por más que intentaba evitarlo.

Una clase más, y por suerte, Arturo estaba en la otra punta de la clase. Se está alejando bastante, cosa que me alegra y me pone las cosas fáciles, me sería más duro superar esto si le tuviera tan cerca de mí todo el santo día, pero por suerte tengo mucho espacio para no verle mucho y no pensar tan a menudo en lo sucedido.

Estaba deseando que llegara la hora de comer, tenía mucha hambre. De la rabia que tenía esta mañana aún encima no he desayunado y las tripas ya hacía rato que se me estaban quejando.

La comida de hoy era muy variada, había espaguetis pero como ya los cené ayer me cogí la sopa de verduras que no es que me apeteciera mucho pero cuando hay hambre… y de segundo unas ricas empanadillas, más rellenas de tomate que de atún pero se podían comer. Después de eso nada mejor que una buena tajada de sandía.

Estuvimos hablando de la fiesta de mi cumpleaños durante el postre. También de cómo lo celebraríamos el fin de semana. Quieren ir a la bolera porque saben que voy a ganar, así me dan el gusto por mi cumple. Les he dicho que me lo pensaré.

La última clase del día ha sido gimnasia, como no con nuestro chándal del colegio que lo único bueno que tiene es que es de color azul.

Hemos hecho flexiones y después nos hemos puesto por parejas para hacer abdominales. Una vez más me he puesto con Pedro. La clase ha sido dura y cansada pero eso es bueno para mantenernos en forma.

Sin embargo ha sido el momento del día en que más lástima me ha dado Arturo. Cómo somos impares se ha quedado desparejado y no le ha quedado más remedio al profesor que ponerse con él para que pudiera hacer los ejercicios. Eso ha sido el colmo de la discriminación, hasta el friki de la clase tenía a su pareja, la congui (la llamamos así porque es negra como un conguito). Sin embargo eso no debería importarme lo más mínimo, él se lo ha buscado.

Antes de ir a casa he pasado por la librería a comprar las invitaciones para mi fiesta de cumpleaños.

Había muchos modelos distintos, todos muy bonitos, pero después de mucho mirar al fin me decidí por uno. Las compré y me fui a casa de Tania a hacer los deberes.

Cuando llegué a su casa ahí estaba en el comedor Arturo haciendo sus deberes, no se porqué no me sorprendió mucho. Lo primero que hice, evidentemente, fue pedirle a Tania que estuviésemos solas, que no me apetecía tener compañía.

Ella me respondió que no nos iba a molestar pero le insistí en que no me apetecía tenerle cerca de mí. Parece que lo entendió.

Tania: Arturo hijo ¿porqué no te vas a hacer los deberes a tu habitación?

Arturo: Porque ya los estoy haciendo aquí.

Tania: Amanda y yo tenemos que hacer la clase.

Arturo: Tenéis cinco sillas y tres cuartos de mesa, no os molestaré, así si tengo alguna duda te la pregunto.

Tania: Si tienes alguna duda cuando se vaya me la preguntas y yo te la soluciono, pero ahora vete a tu cuarto a estudiar anda.

Arturo: ¿Qué pasa que está ya no es mi casa o que? –refunfuñó mientras recogía sus cosas- De fuera vendrán y de tu casa te sacarán –añadió mientras subía las escaleras-

Amanda: Gracias. –le dijo a Tania-

Estuve haciendo los deberes, que por suerte no eran muchos, y Tania me los revisó. Después improvisó unos ejercicios de esos de ir analizando las palabras y las frases, eso de decir cual es el sujeto y predicado y que es un verbo y un sustantivo. Esas cosas taaaan útiles y prácticas en la vida real. Me ha dicho que eso está en el próximo tema y así ya lo llevo por delante.

Tania: Muy bien Amanda, veo que ese tema lo tienes bastante dominado.

Amanda: ¿Tú crees? ¿No he hecho muchos fallos?

Tania: Hombre hubiese estado mejor no hacer ninguno pero lo has hecho bastante bien, cuando lo explique en clase y hagamos ejercicios lo dominarás mejor. Mañana si te parece nos podemos poner con los verbos y sus distintos tiempos.

Amanda: Yo mañana prefiero hacer los deberes en mi casa.

Tania: ¿Tienes algún problema conmigo? Podemos cambiar algo de la clase si quieres.

Amanda: No Tania, no es por ti. Las clases están bien, me están ayudando mucho.

Tania: ¿Entonces?... ¿Es por mi hijo no?

Amanda: Necesito un poco de tiempo, no es fácil para mí verlo todo el día en clase y después tener aquí esa escenita de antes.

Tania: Hablaré con él, le diré que nos dejé el comedor para nosotras y que se vaya directamente a su habitación, no pasará más, te lo prometo.

Amanda: Vengo el viernes para hacer los deberes de toda la semana ¿vale?

Tania: ¿El jueves tampoco quieres venir?

Amanda: El jueves no puedo, celebro mi cumpleaños, doy una fiesta en casa.

Tania: No lo sabía, está bien, entonces el viernes.

Me fui a mi casa y me subí a mi cuarto. Felicia estaba ahí estudiando. Me puse a escribir las invitaciones.

Felicia: ¿A quién vas a invitar?

Amanda: A toda la clase.

Felicia: ¿A toda?

Amanda: Sí, menos a Arturo.

Felicia: ¿¡Qué dices!? ¿No vas a invitar a Arturo?

Amanda: No.

Felicia: ¿Pero porqué? ¿Cómo no vas a invitarlo si es compañero y vecino?

Amanda: Pues porque no me apetece que venga y ya está.

Felicia: Pero no puedes hacerme eso, me apetecía mucho estar con él.

Amanda: Pues cuando sea tu cumpleaños le invitas a él solo si quieres pero ésta es mi fiesta y yo invito a quien quiera y da la casualidad que no quiero que él venga.

Felicia: Pues muy bien hermanita, muchas gracias por nada.

Solo me hacía falta eso hoy, sino había tenido bastante con medio enfadarme con mis amigos, tener que haber aguantado estar en clase a escasos metros de mi pervertido vecino e insistir en que no estuviera haciendo los deberes en el mismo sitio que yo encima me he tenido que discutir con mi hermana por no invitar al sapo a mi fiesta. Me he tenido hasta que ir al baño a ponerme el pijama, por no aguantar sus malas caras y por miedo a que el otro vuelva a las andadas al no darse por vencido ante su fracasado intento de ayer. Esto ya es hasta surrealista. Ojalá el sapo pudiera volver a su charca, ojalá todo pudiera volver a la normalidad. Preferiría desear otras cosas, para ser más exactos todo lo contrario, pero sintiéndolo mucho es demasiado tarde.

Hoy he tenido la sensación de haberme despertado y vivido el día de ayer. Todo me ha parecido igual. Con distintas clases, pero exactamente igual. Con falta de concentración, con una mezcla de sentimientos entre rabia y lástima al mismo tiempo cada vez que miraba al sapo, con una sensación dentro de mi corazón de vacío y tristeza sin entender a penas porque. Lo único que lo ha diferenciado ha sido el entregar las invitaciones para mi fiesta de mañana y el no haber ido a casa de Tania hacer los deberes.

Clara: ¡No me lo puedo creer! ¿Vas a invitar a los pijos-empollones?

Amanda: Sí, a toda la clase.

Yolanda: ¿Al friki y a la congui también? –preguntó extrañada-

Amanda: Sííííí –repitió con poco entusiasmo- Pues ésta es la última. Ya está.

Clara: ¿No falta una?

Amanda: No.

Yolanda: ¿No vas a invitar a Arturo?

Amanda: ¿Otra vez con lo mismo?

Yolanda: ¿Aun no habéis arreglado las cosas no?

Amanda: No hay nada que arreglar chicas, le quiero fuera de mi vida y ya está, no creo que sea tan difícil de entender.

Yolanda: ¿Invitas a todos menos a él? ¿Y dejas las invitaciones encima de la mesa para que encima lo vea? ¿Qué lo haces para fastidiarle no?

Amanda: Claro que no. Lo hago… para joderle.

Clara: ¿Pero que pasó para que el príncipe se convirtiera en sapo así de repente?

Amanda: No quiero hablar del tema –insistió- porfavor.

Yolanda: Esta bien, no te preguntaremos más.

Después de cenar me subí al cuarto y estuve viendo un poco la tele. No me enteré de nada. Mi cabeza y mi corazón siguen pasando el día peleándose entre ellos sin ponerse de acuerdo. Además mañana es mi cumpleaños.

¿Cómo se supone que se debe sentir una persona el último día antes de cumplir años? ¿Debería estar contenta de que mañana cumplo 17 años? ¿O triste porque es mi último día con 16 y nunca más los volveré a tener? La gente cuando se hace mayor se empieza a deprimir por cumplir años, dicen que les pesan porque son muchos, pero ¿quién dice que 16 o 17 no sean muchos como para no tener la misma sensación? Hasta ahora siempre había estado contenta por ello, más estos últimos años que se acercan a los 18 y ya empiezas poco a poco a ser mayor para la sociedad, ya empiezas a ser alguien. Sin embargo este año no es así. No puedo evitar sentirme triste y vacía. La decepción que tengo encima es tan grande que supera la alegría que debiera causarme el hecho que mañana sea uno de los días que se supone que es de los más felices del año. Me siento tan deprimida que realmente no tengo ganas ni de celebrar la fiesta pero debería dar muchas explicaciones si no la celebrara y lo que menos quiero es hablar de ello, no quiero recordarlo, solo olvidarlo, aunque viéndole todos los días no ayuda mucho.

CONTINUARA...MUY PRONTO

Editado 8 jun 2009 por sandru25

[monivict 0]

Perdona por no escribir antes pero es que estoy de mudanza y sin internet,solo puedo conectarme los fines de semana y lo primer que hago es seguir tu historia.

Me ha gustado mucho el capitulo.

Lo del messenger me ha encantado esta super trabajado. :)

que pena que amanda este disgutada con arturo (con lo buena pareja que hacen)haber si se arreglan pronto.

[sandru25 0]

Perdona por no escribir antes pero es que estoy de mudanza y sin internet,solo puedo conectarme los fines de semana y lo primer que hago es seguir tu historia.

Me ha gustado mucho el capitulo.

Lo del messenger me ha encantado esta super trabajado. :)

que pena que amanda este disgutada con arturo (con lo buena pareja que hacen)haber si se arreglan pronto.

¡¡¡¡¡Que bien al fin una respuesta-opinion-comentario!!!! Y ademas tuya, ya empezaba a preguntarme donde andabas jeje Muchas gracias por lo que sea lo primero que haces seguir mi historia, que alago tan grande (con el bajon de la falta de comentarios ya tengo subidon para unos cuantos dias jeje) . Me alegro que de nuevo te haya gustado el capitulo y lo de la parte del messenger que realmente te puedo asegurar que trabajado esta mucho, porque soy muy masoquista yo y siempre acabo haciendo dificiles las cosas que son faciles y me lie a hacerlo con el photoshop que no sabes cuanto se me resiste jeje y así me fue, buen resultado pero mucho tiempo. No quiero adelantar nada pero te puedo decir que el disgusto no dura mucho y que se arregla de una forma bastante bonita, almenos a mi me lo parece, ya me diras tu que tal. Al final hoy tuve un poco de lio y no pude subir el capitulo de Arturo, lo intente en casa de mi novio pero tuve algunos problemillas y lo deje para subirlo en mi casa así que voy ahora a ello aunque es un poco tarde pero bueno. Espero que tambien te guste, es un poco triste pero ya te he adelantado que no dura mucho.

[Diablilla 5]

Siento no haber comentado antes,no me di cuenta de que habias puesto capi jajajajaja

No me gusta que amanda este emfada con arturo hacen una relinda pareja

Yo no creo que la espiara el no es asi....

A ver si lo arreglan

[Patri 1]

Siento no pasarme antes, siempre leo el capitulo pero nunca comento!En fin que buen capitulo

pero me da muchisima lastima que Amanda este enfadada con Arturo espero que pronto lo solucionen todo, en fin besitoss!!

[sandru25 0]

Siento no haber comentado antes,no me di cuenta de que habias puesto capi jajajajaja

No me gusta que amanda este emfada con arturo hacen una relinda pareja

Yo no creo que la espiara el no es asi....

A ver si lo arreglan

No pasa nada, te eche de menos pero fijate que me lo imaginé, porque cuando hiciste el ultimo comentario aun estaba terminando de subir el capitulo y despues el otro tuve que hacerlo con el edit porque nadie contesto y claro es lo que tiene no poder postear doble, que el mensaje no sube y uno no se da cuenta de que han actualizado y eso que quite la encuesta y le puse el simbolo del corazon para que destacara un poco jeje pero ni aun así. Esta madrugada actualice el de Arturo y ha pasado lo mismo, se ha queado por el medio y la gente no se ha dado cuenta porque solo ha subido una visita, en fin, que se le va a hacer. Por cierto que si aun no lo has leido pues ahí está la respuesta a si la espio o no (la otra cara de la moneda, la otra version de los hechos). A lo de a ver si lo arreglan o no pues ya adelante un poco a monivict que no durara mucho pero hasta aqui puedo leer jeje

Mensaje para Patri. No se como contestar a varias personas en un solo mensaje así que lo pongo así.

Gracias por comentar, me gusta mucho conocer vuestra opinion y vuestras impresiones. Me alegro que te haya gustado y bueno da un poco de lastima que esten enfadados pero ya sabeis, lo mejor de las peleas...

Editado 13 jun 2009 por sandru25

[monivict 0]

¡¡¡¡¡Que bien al fin una respuesta-opinion-comentario!!!! Y ademas tuya, ya empezaba a preguntarme donde andabas jeje Muchas gracias por lo que sea lo primero que haces seguir mi historia, que alago tan grande (con el bajon de la falta de comentarios ya tengo subidon para unos cuantos dias jeje) . Me alegro que de nuevo te haya gustado el capitulo y lo de la parte del messenger que realmente te puedo asegurar que trabajado esta mucho, porque soy muy masoquista yo y siempre acabo haciendo dificiles las cosas que son faciles y me lie a hacerlo con el photoshop que no sabes cuanto se me resiste jeje y así me fue, buen resultado pero mucho tiempo. No quiero adelantar nada pero te puedo decir que el disgusto no dura mucho y que se arregla de una forma bastante bonita, almenos a mi me lo parece, ya me diras tu que tal. Al final hoy tuve un poco de lio y no pude subir el capitulo de Arturo, lo intente en casa de mi novio pero tuve algunos problemillas y lo deje para subirlo en mi casa así que voy ahora a ello aunque es un poco tarde pero bueno. Espero que tambien te guste, es un poco triste pero ya te he adelantado que no dura mucho.

No te preocupes si la gente no deja ningun comentario,entre que estan de vacaciones y que ya han salido los sims3 tienen menos tiempo,pero seguro que la leen sino fijate en la gente que se meten tienes 1226 visitas que eso ya es mucho.

Sigue asi tu historia esta genial y a mi me encanta y eso te lo dice tu fans nº1. :)

Espero impaciente el proximo capitulo aunque no lo pueda ver hasta el fin de semana que vienejeje besos